X. Anchors

4.3K 301 177
                                    


"ANCLAS"


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Decir que tengo muchísimo sueño es quedarme corta. Después del desastre que quedó con la declaración de Aiden, debí ponerme al día con un proyecto en el que estoy trabajando con Mason, y no pude avanzar por el viaje. Lydia me envió unos apuntes antiguos, y me salvaron... ella realmente es una genio.

Así que ahora estoy terminando de arreglarme y espero a Scott que vendrá por mí para ir a la escuela, siento un poco de ansiedad por verlo, fueron dos semanas y es extraño, porque me había acostumbrado tanto a él, que nunca pensé que lo echaría tanto de menos.

 El timbre suena y mi corazón se acelera. Rápidamente comienzo mi camino para abrir, pero bajo la marcha cuando quedan solo un par de metros y me obligo a no parecer una desesperada, además, entre nosotros no hay nada, y principalmente porque yo no quiero.

Abro la puerta y allí está, con una gran sonrisa y sus brillantes ojos, pero noto algo extraño, reconozco en él un poco de preocupación y eso no me gusta para nada, menos por la ansiedad que trae encima.

—¡Sophie! 

Me envuelve en un abrazo y río mientras me aferro a sus hombros cuando me eleva y da un par de vueltas, no esperaba una bienvenida tan entusiasta. Le devuelvo el abrazo cuando me deja en el suelo.

—¡Vaya! —dice asombrado observándome de pies a cabeza y me remuevo un poco nerviosa ante su mirada—. Realmente te ves muy bien —sacude un poco su cabeza.

Sonrío enternecida por su actitud.

—Gracias. —Cierro la puerta a la vez que lo veo adentrarse en la sala—. Créeme que me costó varios días de sol lograr un bronceado así y no quedar simplemente roja.

—Ciertamente yo no tengo ese problema —río un poco y lo guío a la cocina, nos sentamos junto a la encimera luego de elegir algunas cosas para desayunar.

—Entonces cuéntame, ¿qué tal han estado las cosas aquí?

—Bien —sé que miente porque su corazón lo delata.

—Sí... ¿supones que debo creerte?

Respira hondo y pasa una de sus manos por su rostro.

—¿Recuerdas que Deaton dijo que habrían consecuencias por lo que hicimos para salvar a nuestros padres? —Asiento y continúa—. Creo que comienzo a sentirlo —susurra bajando la mirada a sus manos y las inspecciona.

—¿Qué sientes, Scott?

Pero niega con su cabeza y pide cambiar de tema, así que le cuento un poco de lo que hice en Brasil, se muestra realmente interesado ante mi experiencia del surf, y es muy lindo sentirme escuchada de verdad.

GOLDEN EYES || teen wolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora