5. Aceptarlo

1.6K 75 70
                                    

A veces no lo entiendo, será que.. ¿Podría sentir algo más que un aprecio hacia Sandra? ¿Será que Armando tiene razón?

No sé.. Espero poder descubrir que es lo que en realidad siento por Sandra.

La verdad, mis actitudes nunca demostrarán que sólo es cariño o algo por el estilo.

- Armando, voy a Presidencia.

- Se para y me detiene - ¡Espere, espere! ¿Usted que va a hacer ahí? ¿Quiere que Betty lo eche a patadas?

- No es asunto suyo, Armando. Vuelvo luego. - Cierro la puerta, y camino hacia Presidencia.

- Buen día, Betty.

- Buenos días, Doctor ¿Qué pasa? ¿Necesita algo? - Betty me observó inquietante al ver que vine a su oficina. Realmente, no lo hago constantemente, sólo lo hago cuando es importante.

- Si, Betty, necesito algo. - Trago saliva. - Necesito que me ayude.

- ¿A qué, Doctor? - Se acomoda en su asiento y se ve dispuesta a escucharme.

- Betty, yo sé perfectamente que nosotros no tenemos la confianza suficiente. - Continúo. - Pero, a la única que puedo recurrir es a usted. Usted le tiene mucho cariño a ella, y yo sé que me puede ayudar.

- Doctor, ya me está asustando. Dígame. - Betty juega con su lapicero dorado.

- Es sobre Sandra. - Ella abre los ojos como platos. - Últimamente me siento muy extraño ¿Sabe? La veo con Franco y no puedo evitar sentir algo. Algo extraño en el pecho. - Digo. - No sé que es, no sé que siento. Yo pienso que es porque me angustia ella, no quisiera que la lastimen. Pero, Armando me dice que no, que yo siento algo por Sandra.

- D-Doctor, yo no entiendo porque me está diciendo esto. Háblelo con ella. - Betty se rasca la cabeza.

- Yo sé, Betty. - Hago una expresión triste. - Pero es necesario, yo sé que usted me puede ayudar.

- Doctor.. Yo no sé todo, pero lo que si sé es que usted la lastimó, y mucho. - Hace una sonrisa triste.

- Sí, Betty, soy consciente de eso. - Suspiro.

- Debería pensar, ya que usted está muy confundido. - Dice. - Discúlpeme, pero usted no es el mejor hombre del Mundo. - Encoje los hombros. - Usted lastimó a muchas mujeres, así como usted me lo hizo con ese juego que planearon usted y Armando hace mucho tiempo. - Se para y camina alrededor de la oficina. - Pero Armando se dió cuenta que me amaba, por eso le dí otra oportunidad. Él luchó por mí, y por un futuro juntos.

- Sí, Betty, y tal vez aún me sigue odiando. Cometí muchos errores de los cuales estoy aprendiendo. - Agacho mi cabeza mientras hablo. - Pero quiero que me ayude. Sé que estoy confundido, pero lo he pensado y tal vez siento algo más por Sandra.

- Doctor, no soy la más indicada para hablar de esto. - Prosigue. - Pero Sandra si se enamoró de usted, y mucho. La ilusionó, ella tuvo que aceptar que usted nunca la quiso como pensó. - Dice. - Pero si usted la ama de verdad.. Debe luchar por ella. - Hace una pequeña sonrisa. - Franco la trata como se merece, como la gran mujer que es. Puede perderla, y en cualquier momento.

- Tiene razón, Betty. - Digo.

- Y no sé, pero yo creo que usted si la quiere, lo veo muy preocupado. Nunca lo había visto así. - Vuelve a sentarse. - Pero si usted acepta que siente algo por ella.. Luche por su amor.

- Sí, Betty, usted tiene razón. - Sonrío. - Muchas gracias.

- Piénselo ¿Sí? - Me toma un hombro de una forma amistosa.

Sé que fue un error • MandraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora