Ayudar a las personas es el objetivo de la vida de Kamille Ali, incrustado en ella desde su nacimiento y hasta el fin del mundo.
El levantamiento de los muertos y la pérdida de sus padres no eran cosas para las que estaba preparada. Con solo su herm...
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Una pensaría que quedarse en un yate en medio del mar durante un apocalipsis zombie proporcionaría algo de entretenimiento o que ocurrieran cosas emocionantes, pero no. Kamille no estaba segura de cómo se sentía al respecto, pero sabía que estaba aburrida y que no era divertido.
Alicia estaba en su habitación, diciendo algo sobre volver a revisar la radio hoy. Eso dejó a Kamille para encontrar algo que hacer, lo que significó encontrar a Ofelia y participar en horas de conversación con ella.
Las dos se reían como niñas de la escuela, casi olvidando el hecho de que se encontraban en un escenario que amenazaba sus vidas. Kamille se iba de vez en cuando para ayudar a Madison o (sorprendentemente) a Daniel con las tareas domésticas, pero por lo demás regresó con Ofelia y las dos entablaron una conversación con facilidad. Todo fue sin esfuerzo con Salazar, descubrió Kamille, tan fácil como lo fue con Alicia. Casi se alegraba de que el mundo las hubiera llevado a conocerse.
Habían pasado horas y Kamille perdió la noción de cuánto tiempo había estado hablando con Ofelia, recordando viejos recuerdos. Estaba hablando de Adam y, curiosamente, se sentía bien hablar de él. Lo devolvió a la vida, aunque solo sea momentáneamente.
"Oh, ahí estás..."
La risa de Kamille y Ofelia se calmó cuando miraron a Alicia, que había entrado en la sala de estar con una expresión estoica en el rostro. Kamille se dio cuenta de que no había visto a la niña más joven desde el desayuno, y de repente sintió que la habían pillado haciendo algo que no debería estar haciendo. El tenso lenguaje corporal de Alicia le dio esa sensación y estaba confundida porque no pasaba nada.
"Oye, Alicia". Dijo Ofelia, sonriéndole a la rubia.
Los ojos de Alicia se movieron entre Kamille y Ofelia antes de apretar levemente la mandíbula. "Oye..."
La sonrisa de Kamille se desvaneció ante la repentina incomodidad. ¿Qué le pasaba a Alicia?
"Esto fue divertido, Kamz". Dijo Ofelia, ya de pie, aparentemente sin darse cuenta de lo que notó Kamille. "Debería cambiar esto". Señaló a su vendaje, "Pero te veré más tarde".
