Capitulo 4

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Al día siguiente Tae se levantó antes que Jimin así que empezó a hacer el desayuno para ambos, y a tenerle desde ya una pastilla para la jaqueca que iba a tener su mejor amigo. Yeontan, su perrito, se acercó sigilosamente y se subió primero a la silla sin que el rubio se de cuenta, y de la misma manera se subió a la mesa, ya que el rubio había dejado en la mesa los tocinos que ya había freído, y sin previo aviso el canino empezó a comerse el tocino.


Para justificar, el pequeño Yeontan no había sido alimentado hoy pues su dueño se encontraba muy distraído como para acordarse que tenía un hijo al cual dar de comer. Pero cómo juzgar a Tae pues solo se la pasaba sonriendo mientras recordaba el incidente que había pasado el día anterior, según era porque aún la situación le resultaba cómica, sin embargo, también se preguntaba si Jungkook le volvería a escribir, o más importante si se volverían a ver, de verdad le agradó y su compañía fue grata. Jungkook es una persona con muy buen gusto en la lectura, y hubiera querido más tiempo para hablar con él sobre los libros que ambos ya habían leído, pues esos temas no los compartía con Jimin, ya que su mejor amigo no estaba interesado en novelas o en libros en general.


Quisiera saber si tenemos los mismos gustos en libros.


Quisiera saber cuál fue su primer libro.


Quisiera conocerlo más.


Todo siendo un mecanismo que activo su cerebro como excusa para poder justificar la necesidad de ver a aquel chico pelinegro. Cuando al fin salieron los panes tostados del tostador, Taehyung los puso en un plato, gira sobre sus pies para ir a la mesa, y descubre al canino trepado en la mesa saboreando el último tocino que quedaba.


-¡Yeontan!- grita Tae haciendo que el perro lo mirara ante la mención de su nombre -¡Baja de la mesa en este instante!- dice con autoridad, a lo cual Yeontan no pudo desobedecer, y se bajó hasta quedar a los pies de su dueño -Yeontan...¿Pero qué has hecho? ¿Por qué te comiste los tocinos?- en respuesta el perro solo ladró dos veces y movió su cola.

-¿Que se supone que haces Tae?- dice Jimin saliendo de su habitación agarrando con una mano su cabeza.

-Lo que pasa es que Yeontan se comió los tocinos que había freído- dice Tae sin quitar la vista del pequeño canino, quien no se arrepentía de lo que había hecho y seguía moviendo la cola.

-Yeontan nunca a hecho algo como eso- dice Jimin defendiendo al pequeño.

-Pues esta vez sí lo hizo- dice Tae.

-Qué raro- Jimin abre bien sus ojos y empieza a buscar el plato en donde siempre come el canino y lo ve completamente vacío -¿pero qué esperabas que hiciera si no le has servido su comida?- dice Jimin con tono de reclamo.

-Oh- fue lo único que pudo articular Taehyung como respuesta a todo, dejó el plato con los panes tostado en la mesa y se apresuró en servir la comida para Yeontan, el canino solo le siguió hasta que por fin le sirvió la comida, Tae le acarició la cabeza, sin embargo, el perro no lo miro como siempre lo hacía.


Ya se le tiene que pasar.


-Bueno déjame freír más tocino, por el momento toma esta pastilla- Jimin quien está sentado en la silla mientras sostenía su cabeza con ambas manos apoyando los codos en la mesa, alzó ligeramente la vista, vio la pastilla y sin pensarlo la tomó con el café que ya estaba en la mesa.

Tenias que ser tú (KookTae)Where stories live. Discover now