Home Sweet Home

Capítulo 5: Larga vida.

-1998-

El tiempo había pasado y con el se llevo seis largos años.

Lena ya tenia sus seis años de vida y seguía siendo el centro de atención total de Nikki junto a Decker, Gunner y Storm. Al poco tiempo del divorcio, ambos tuvieron un pequeño encuentro donde Decker llego a la vida en mil nueve noventa y cinco.

En diciembre de mil nueve noventa y seis Nikki volvió a casarse con la playboy, Donna D'Errico. La rubia no venia sola, su pequeño hijo Rhyan, el cual era un año menor que Lena. Fue una nueva figura para Lena,un nuevo hermano.

El amor surgió y hizo que ambos unieran sus vidas sin importar que Sixx haya cerrado unos meses atrás su divorcio con Brandi, en mil nueve noventa y cinco, unas semanas antes del cumpleaños de Lena; Brandi y Nikki decidieron divorciarse.
El paso de las semanas y meses eh incluso años hizo que Lena comenzara a ver a Donna como su figura materna,ya que bueno, su madre biológica solo llevaba a sus hijos hasta la casa de Nikki para solo dejar que se queden los días correspondientes y luego marcharse sin querer ver a su hija menor.

Mick y Diana había tenido una hermosa hija a la cual llamaron Brooke Mars.
Tommy y Pamela tuvieron mellizos, una niña y un niño los cuales fueron nombrados como Brandon y Nancy Lee. Al año siguiente en mil nueve noventa y siete tuvieron otro hijo el cual llamaron Dylan Lee.

El álbum Generation Swine había salido a la venta en mil nueve noventa y siete, haciendo que fuera algo polémico y algo confuso para los fanáticos debido a su genero, eso no detuvo a los chicos que ahora mismo se encontraban de gira en distintos lugares del mundo.

Nikki había tratado de llevarse a Lena con él al menos los primeros meses durante la gira pero fue algo difícil ya que apenas tenia seis años y los cambios de horario podrían afectarle de forma negativa. Donna fue la encargada de convencer a Sixx para que al menos la deje a su cuidado los primeros meses ya que luego el contraria una niñera para que la cuide durante los conciertos.

Los primeros años de vida eran compuesto por la enseñanza y el aprendizaje. Lena había aprendido a escuchar a sus padres pero también a hacerlos renegar cuando hacía travesuras con sus hermanos mayores. Desde que comenzó a experimentar el movimiento de su cuerpo, comenzó a sonreír con frecuencia, eso se había transformado en el acto que la diferenciaba. Estaba siempre sonriendo. Tanto era ese acto que su hermano Gunner comenzó a llamarla Smiler.

-Vamos Smiler, más cuidado. - Dijo Donna sonriendo al ver como Lena corria  apurado a ella. - Eres una pequeña atlética. - Lena finalmente llego a los brazos de Donna haciendo que esta festejará levantando sus brazos. - Muy bien nena, tu papá estará muy orgulloso. - Con seis años era sencillo caminar, el problema era que Lena estaba tomando el gusto de empezar a correr por todos lados.

-¿Papi? - Pregunto Lena apoyando su mejilla en el pecho de su madre.

-No te preocupes que en un tiempo podrás verlo. - Respondió Donna viendo como Rhyan sacaba de una caja varios autitos de colores. - Ve a jugar con tu hermano.

Donna se había encargado de cuidar a sus hijos los últimos cinco días en los que Nikki había partido de gira. Últimamente había lidiado con ver y escuchar a Brandi y Nikki pelear con respecto a su hija menor, al parecer la castaña seguía con una sola idea fija en mente.
La rubia escucho como el timbre de la casa resonaba así que apuro un poco su paso hasta la entrada sin dejar de ver de reojo a sus hijos jugar en el suelo con los autos de colores. Al abrir la puerta se llevo la sorpresa de ver a Brandi con una mirada no muy feliz.

-Oh, hola Brandi. - Hablo Donna con una pequeña sonrisa. - ¿Y los niños? - Pregunto al ver que no estaban a su lado. -  Creí que hoy vendrían.

-Hola, eso mismo creí yo hasta que no estaba ni enterada que Nikki salio de gira hace cinco días. - Respondió Brandi molesta. - No me dijo nada y él muy bien sabia que tiene la semana con sus hijos.