Capítulo 25: Nikki.

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Tal vez no era tan malo como pude pensar por unas horas,tal vez la persona que me dio a luz solo lo hizo y se borro o termino con papá y nos abandono, tal vez mamá llego para salvarnos y darnos una oportunidad de saber lo que es ser amados.

Esta era mi realidad, mamá me amaba y me eligió como su hija, ella me permitió ser parte de su vida sin llevar su misma sangre... ella era la indicada.
















OMNISCIENTE.

Las palabras y el cariño de Chris habían sido suficiente para que Miley lo entendiera. Nadie nacía sabiendo, eso era algo que cada uno tenía que ir descubriendo y esa era su realidad, amaba a su mamá con toda su alma. De forma cuidadosa pero rápida salio de su cama y Chris no dudo en seguir sus pasos, no había visto sus ojos y temía que este hecha una furia, solo dijo su nombre repetidas veces mientras seguía sus pasos, eran apurados, era una pequeña caminata que se transformo en corrida.

Donna abrazaba a Nikki, ambos se levantaron del sofá dispuestos a tener esa charla con su hija. La rubia pensaba que ya no la amaría, que correría a los brazos de su madre de sangre y que la dejaría en el olvidó, pero cada pensamiento negativo se fue cuando vio a su hija bajar corriendo las escaleras. Chris venia detrás de ella, no entendía que pasaba por su cabeza pero decidió intentar hablar, algo que antes no pudo hacer y ahora mismo tampoco. Miley la miro por unos cortos segundos y sonrió para correr hasta ella y abrazarla con fuerza mientras apretaba sus ojos, la había elegido hace casi catorce años atrás. Estaba sorprendida y llena de emoción, sus lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas cuando pudo sentirlo.




-Si te elegí fue por algo, no lo entendía pero ahora puedo hacerlo. - Dijo Miley viendo con amor a Donna a su mamá.



Donna sollozo para luego volver a abrazar con fuerza a Miley, a su amada hija.




















DONNA.

Mi bebé me había vuelto a elegir, me había vuelto a dejar entrar en su corazón y pude ver todo ese amor en sus ojos verdes. Ahora cambiaban finamente a un azul debido al cambio climático, ojalá sus ojos fueran azules como los míos así tranquilamente podía sentirse segura de tener una pequeña parte de mi en ella.

Rhyan, Miley y Frankie eran mis bebés, ellos eran mis hijos y claramente sabia que la tormenta estaba cerca pero eso no importaba ahora. Lo que más importaba era que ambas estábamos juntas de nuevo.




















OMNISCIENTE.

Storm pudo ver como su hermana era feliz junto a la mujer que la había elegido, no sentía miedo de su mamá Brandi. Lo que sentía era ansiedad por ella, no quería que vuelva para hacer un problema en donde ya no lo había.

Chris coloco su brazo por el hombro de Storm y ambos se miraron con alivio, la habían salvado.






-Mejor los dejo solos, tal vez hay cosas que hablar. - Susurró Chris viendo a Storm.

-Lo se, también lo haré. - Respondió Storm en un susurró. - Gracias por venir, si no fuera por ti todo seria un caos y probablemente esto no estaría sucediendo.

-Es ella misma, lo haría. -Dijo Chris con una pequeña sonrisa mientras se acercaba hasta ambas mujeres. - Tengo que irme, luego te llamaré.

-Gracias. - Dijo Donna con una pequeña sonrisa. - Es la primera vez que te veo y ahora se porque mi hija te quiere mucho.

-Yo quisiera saberlo. - Susurró Nikki ganándose un pequeño codazo de Storm. Miley se alejo un poco de todos y camino con Chris hasta la puerta.

-Gracias por aguantarme, llevamos casi dos meses y tuviste que presenciar algo así. - Dijo Miley en una mueca.

Home Sweet HomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora