The Ways of the Universe [ChanBaek]

Extra III: Mi doppelgänger ¿malvado?

El golpear de las olas sobre la Costa trajo a BaekHyun un largo respiro que lo llenó de ese dulce aroma del lugar que tanto había extrañado por varios meses. Sintió el calor en su piel y esto lo colmó de paz junto a una amplia tranquilidad que solo se vio completa una vez que, luego de sentir entre sus pies descalzos el ligero picar de la arena, escuchó tan cerca de sí unas risas.

Fueron risas de niños, pero, a diferencia de cómo pudo haber sido en esos últimos momentos que pasó en Lumiscia antes de que tuviera que partir—de una manera más forzada que planeada—, estas risas tenían una nota distinta, una muy específica, y que le dejó sonreír de igual modo al buscarlas porque sabía que eran las voces de sus Hijos.

"¿Qué tal están los nenes?" dijo al voltearse y ver a solo unos metros de sí a ChanYeol con YuRa en uno de sus brazos junto a SungJin acostado sobre una toalla en la arena. Sus bebés apenas cumplían los tres meses, y aunque aún no eran capaces de hablar o caminar—por obvias razones— sí les gustaba mucho balbucear, reír de vez en cuando y patalear cuando los dejaban como a SungJin, o hasta tocar y jalar cosas como YuRa hizo ahora con el cabello de su Padre al tomarlo desprevenido por su llamado.

Se rio en voz baja, no debería burlarse del modo en el que su niña acababa de maltratar a ChanYeol, mucho menos porque este estaba ahora intentando hacerle entender que no debía hacer eso, de una manera que no cayera en el regaño para hacerla llorar, pero que tampoco se mostrara demasiado permisible. Sin embargo, la interacción tan adorable que estaban representando frente a él solo no pudo dejarle hacer más. Le fascinaba ver a su familia junta y admirar el modo en el que ChanYeol acataba su parte de responsabilidad porque, de menos, así aprendía algunas cosas.

Entonces, a pesar de no recibir una contestación, se acercó hasta donde estaban al regresar sobre sus pasos y sentarse junto a ChanYeol para acariciarle la pancita a SungJin con lo que le volvió a sacar otra carcajada, y al permanecer con esa sonrisa de lo provocado, volvió con su novio.

Fue el turno de ChanYeol de verle completamente enamorado, con esa sonrisa tan bella por descubrir lo bien que sabía manejarse con sus Hijos, pero, sin darle algún comentario de momento, al final decidió que podía responderle a su pregunta con un solo:

"Están bien. Parece que se están divirtiendo, ¿no es verdad, nubecitas?" sonrió de nuevo, porque era obvio que no iban a recibir respuesta de sus bebés con apenas la edad que tenían, mas, siquiera BaekHyun pudo garantizarlo cuando YuRa pareció fascinada con recibir otra caricia similar a la que él le dio a su hermano por parte de su Padre, y que, por la risita que soltó, SungJin le imitara sin tener la misma razón para reírse como ella.

Quizá fue por eso por lo que, en esta ocasión, al saber que no tenía más dudas de sus niños, regresó la mirada a su novio, y con una pequeña sonrisa, le preguntó, en cambio:

"¿Y qué hay de ti? ¿También te la estás pasando bien?" pero, contrario a lo que de ChanYeol se podría esperar, solo lo vio encogerse de hombros, antes de colocar a su niña sobre sus piernas y sostener su cabecita con su brazo al mantener sus manos unidas, probablemente en una posición un poco más cómoda para el más alto.

Ver eso no le dijo mucho a BaekHyun, le dejó un poco inquieto, y por su curiosidad, se vio leyendo las percepciones de su novio, para que descubriera algo un poco extraño.

"Sí, supongo que lo estoy," se lo confirmó mucho más una vez que le escuchó articular eso, y él se encontró frunciendo el ceño al tener que reiterarlo.

"¿Supones?"

"Aja. Ya sabes, estamos en este hermoso lugar de la Costa, solo nosotros dos, con los niños, todo es muy relajante. ¿Por qué habría de quejarme de algo?"