The Ways of the Universe [ChanBaek]

Capítulo 24: El Festival del Pueblo. Parte 1

[Advertencia: Desorden cronológico de los eventos-lo que quiere decir que, a pesar de que los sucesos descritos aquí sí son en el mismo día, algunos toman más tiempo que otros, y por esto no es como si realmente una narración abarcara a la otra (en otra situación).]

Capítulo largo, chicos, disfrútenlo~

La ropa que BaekHyun le había traído para que usara era sin duda todo un traje que en su vida jamás se habría imaginado estar portando. Parecía de la Realeza, porque lo máximo que él había usado de porte elegante había sido su uniforme al ser nombrado General y con el cual resaltaba el grado que tenía junto a sus estrellas, unas cuantas medallas y la gorra que no había vuelto a sacar para evitar maltratarla.

Eso, sin embargo, no se comparaba con esto.

Si bien, el pantalón de tonalidad beige no tenía mucho que dar a resaltar y se sentía un poco suelto, casi holgado, se ajustaba ahora con un cinturón para amarrarle adecuadamente en torno a su cintura, y quedaba bastante remarcable, hacía incluso parecer que tendría algo de trasero cuando él sabía que nada ahí existía desde su nacimiento.

Usaba una camisa de botones en el mismo color del pantalón que había fajado, y casi desaparecía sobre el saco que debía abrocharse por encima, a especificación propia de BaekHyun.

"Es parte de la tradición. Debemos vestir formalmente. Traer solo el pantalón y la camisa sería algo burdo para la etiqueta de la fiesta. Toma, te quedará bien, yo mismo lo he escogido con el sastre de mis Padres. Estaré cambiándome afuera mientras tú terminas aquí adentro en el baño."

Luego de eso, quizá—y solo quizá— había intentado robar un pico de los labios de BaekHyun, pero falló en el proceso al tener un BaekHyun muy escurridizo que le entregó antes la ropa y le cerró la puerta, por lo que huyó de su cercanía tal como había dicho.

Bien, era cierto que solo el día anterior se habían confesado, que solo la noche pasada habían compartido su primer beso y esa primera sensación de conocer tanto sentimientos como emociones y pieles contrarias, pero ChanYeol no sabía por qué tenía internamente y desde esa mañana la imperiosa necesidad de besar, abrazar o tomar a BaekHyun consigo, en la que seguía fallando en todos los casos por BaekHyun y su forma de evitarlo con cierto pudor y hasta risa.

Por un segundo incluso se había comparado con un animal en celo.

Pero también había otra voz dentro de él que tiernamente decía que eran solo sus sentimientos intentando hacer presencia para recordarle a BaekHyun ante todo que lo dicho ayer—y casi dicho— era cierto, y no por haber estado ebrio se había dejado llevar en acciones y palabras. Otra voz en su interior le decía con mayor recelo que solo lo intentaba porque deseaba saber si realmente era BaekHyun el que originaba los llantos de niños en su cabeza. Que no tenían presencia más que como recuerdo desde eso último pasado anoche.