Capítulo XXXI.

35 9 1
                                    

Disculpen la demora, he tenido algunas cosas encima y no me había dando tiempo escribir, también una disculpa si hay faltas de ortografía. Sin más que decir, sigamos 🐺❤


-Por fin te pertenezco – pensaron ambos jadeantes uniendo sus frentes en busca de aliento.

-Fue…- mencionó aún jadeando el rubio – increíble – suspiró tomando entre sus manos el rostro del azabache mirando los preciosos ojos de este acercando nuevamente sus labios a los contrarios pegándolos en un suave toque, apenas moviéndolos, degustando tiernamente a su pareja que se regocijaba debajo suyo, amándose mutuamente.

El omega que intentaba moverse nuevamente fue detenido de las caderas por el alfa en un movimiento rápido – No Yoongi, el nudo aún no baja, te vas a lastimar – ordenó besando la frente de Yoongi.

-Estoy muy feliz, aunque admito que me hubiera gustado haberte hecho algo especial, ya sabes algo romántico – dijo el rubio algo apenado.

-No seas estúpido Jimin – respondió ofendido el omega – el simple hecho de que estemos unidos finalmente es lo que en verdad me interesa, y bueno… estoy feliz de que hayas sido tu quien lo haya hecho – musitó tocando inconscientemente la marca que relucía en su cuello, una marca de Jimin, su alfa.

De pronto una gota cálida chocó en su mejilla, volviendo su rostro hacia delante, observó que el alfa lo miraba intensamente con los ojos llenos de lágrimas desbordándose y cayendo; Yoongi, enternecido de aquella escena llevo sus pulgares a la cara de Jimin y limpió con cuidado el rastro de humedad, aprovechando para besar castamente al alfa.

-Te amo Jimin – suspiró una vez se separó del dulce tacto.

-Yo también te amo Yoongi – sonrió cerrando unos segundos sus ojos para volver a reincorporarse – Y…perdóname por haberte tratado mal en un inicio, no sé que pasó por mi estúpida cabeza, pero te juro por mi vida – inició intensificando su mirada adentrándose hasta lo más profundo en el alma del omega - que yo seré tu protector, tu amante…un amigo o lo que sea necesario para hacerte feliz hasta mi último aliento, yo te amaré – finalizó besando intensamente los labios ajenos, sellando su juramento.

Moviéndose otra vez, después de que había bajado el nudo, le hizo el amor a su omega, demostrándole cuanto lo amaba, susurrándole palabras que dejaban en sosiego a Yoongi, entregándose en cuerpo y alma el uno al otro, haciendo promesas silenciosas…uniendo a sus lobos en alma, sin que la parte humana si quiera lo notara, proclamaron a su pareja, si uno moría el otro le seguiría, la Diosa Luna creo a sus destinados, y estos ya estaban creando su camino.



-¿Te duele mucho? – preguntó algo preocupado Jimin.
-Solo un poco, no es nada en realidad – de solo pensar en la causa del dolor lo hace feliz - tranquilízate un poco alfa puedo sentir tu inquietud – respondió apegándose más al alfa.

Después de haberlo hecho, tomaron un rápido baño y decidieron meterse bajo las cobijas para descansar un rato, más por Yoongi, ya que este tenía un dolor en la cadera pero no podía estar más feliz por eso.

-En que piensas Yoongi – dijo el alfa, dejando un poco dudoso al omega, quien lo volteó a ver dejando en claro que no sabía a que se refería – es decir, no sé mucho de ti, así que estaba pensando en sí… te gustaría contarme un poco de tu vida, ya sabes, ahora que estamos juntos oficialmente, me encantaría saber todo de mi omega – explicó acariciando el hombro de Yoongi, sacándole unos cuantos ronroneos.

Suspirando, miró hacia la pared y cerró un poco los ojos, pensando…

-Pues…mi vida no es muy interesante y de color rosa como ya te habías dado cuenta – respondió refiriéndose a su padre – mi madre, murió hace mucho tiempo y desde allí todo cambió para mal, mi papá se transformó en un alfa arrogante y déspota que solo ama su trabajo, mi hermano…él tuvo que acostumbrarse a que mamá no estuviera y que yo fuera su fuente de protección y no me quejo de eso porque Baek es la única familia que me queda, el es lo más importante para mí y ha estado conmigo al igual que Hoseok en los momento malos de mi vida.

Jimin tratando de consolar al omega, beso el hombro desnudo de su pareja y lo abrazo dejando su mano posada en el vientre de Yoongi.

Mirando la espalda del azabache se dio cuenta que tenía una alargada cicatriz casi desapareciendo en una fina línea pero que persistía allí que atravesaba desde su columna hasta uno de sus hombros, trazándola con sus dedos se percató que el menudo cuerpo de Yoongi se tensó y la marca comenzó a originar emociones tristes y negativas alertando al alfa de inmediato.

-¿Qué sucede Yoongi? – preguntó asustado pues el omega había comenzado a sollozar y temblar haciéndose bolita – Por favor, dime que sucede Yoongi, ¿qué tienes? – Volvió a preguntar sin recibir respuesta.

-Odio esa cicatriz – sollozó – la odio…quiero que desaparezca – musitó adolorido – perdóname Jimin – dijo rápidamente el omega – es horrible ¿no es así?, mi cuerpo está sucio desde aquel día, ¿no te da asco haberte unido a mí? – preguntó torpemente debido al llanto.

Jimin no respondía, quedando en shock, ¿asco?, qué tan importante es esa cicatriz para que el hermoso ser que tenía en frente se derrumbara de un segundo a otro, ¿cómo se la hizo?...o ¿quién se la hizo?.
Sin darse cuenta comenzó a gruñir fuertemente asustando todavía más a Yoongi quién en un ataque miedo, intento alejarse del alfa, sumido en un intenso temor, en su pasado.

-No me hagas nada, te lo ruego – musitó angustiado cubriendo su cara con ambas manos para después esconder su cabeza entre sus piernas.

Jimin al darse cuenta de esto, intento relajarse y se acercó despacio al tembloroso cuerpo de Yoongi quien aún yacía hecho bolita, pero en cuanto Jimin apenas rozó sus dedos en la desnuda piel del omega este soltó un gemido angustiado, llamando a su alfa para que lo protegiera.

-No me toques, déjame tranquilo, por favor – balbuceaba perdido.

-Yoongi – llamó suave el alfa – soy yo, perdóname no quise asustarte, soy un imbécil – dijo soltando sus feromonas, tranquilizando al omega de a poco dándole oportunidad a Jimin acercarse y abrazarlo pegando el rostro del azabache en el cuello del rubio arrullándolo tarareando cualquier canción que se le viniera a la mente, hasta que Yoongi por fin se quedó dormido con rastros de lágrimas en sus mejillas, con la nariz roja y los ojos hinchados de tanto llorar.

-¿Qué fue lo que pasó? – se preguntó a sí  mismo el alfa tratando de entender lo que había sucedido - ¿quién te dañó?




-Priverslla 🌸.




Omega Por Defecto/Jimsu♡Where stories live. Discover now