Estocolmo ©

Final 35.

Todo pasó muy rápido, de un momento a otro Ellien estaba rodeado de policías que le apuntaban ordenándole que pusiera las manos sobre su cabeza.

Maggi intentaba sin éxito llegar hasta él, no podía, puesto que un policía la mantenía bajo su agarre.

En aquel aeropuerto todo se había vuelto un caos, los que no habían huido despavoridos, se habían quedado a distancia presenciando la situación.

La pelinegra miró a la chica detrás del cristal con lagrimas en los ojos ¿Por qué lo había hecho? Se preguntó en medio de su desesperación.

Quizás era su trabajo, pero qué le costaba dejarla ser feliz.

Se derrumbó en el suelo ya sin fuerzas para persistir, por más que luchara la situación seguiría igual.

El policía la seguía agarrando intentado mantenerla de pie, pero no podía, no quería ver como la alejaban del hombre que ella amaba.

—- Maggi —- la llamó el pelirrojo en medio del alboroto, su corazón se movía errático al verla hecha nada en el piso —- Nena levántate por favor.

Ella lo miro y en apenas un susurro que ni ella misma escuchó dijo:

—- Te amo.

Él de igual manera respondió:

—- Yo te amo más Maggi.

Maggi, Maggi, su dulce y frágil Maggi.

Repetía su nombre una y otra vez intentando despertarla, las lágrimas que bajaban como manantial de sus ojos cerrados le decían que estaba teniendo una pesadilla.

Ella por fin despertó y sin dudarlo se tiro a sus brazos, no preguntó al instante que había soñado, dejo que se calmara mientras ella escondía su cara en su pecho y aún permanecía sollozante.

Se encontraban en un motel donde estarían por esa noche, después de casi cuatro horas de vuelo, pero no se quejaba, agradecía que todo había salido bien en el aeropuerto, no tuvieron ninguna complicación tanto para salir de Inglaterra como para entrar a Gales.

Gracias a Dios, al universo o a quien sea todo había salido bien.

Y Maggi hizo un trabajo excelente, aún sabiendo que estaba muriéndose de los nervios, trato de de permanecer serena la mayor parte del tiempo.

Ella fue muy valiente.

—- ¿Quieres contarme? —- pregunto él cuando la notó un poco más tranquila —- Estoy aquí.

Acaricio su espalda y ella suspiró entrecortado.

—- Soñé que nos agarraban en el aeropuerto —- dijo sorbiéndose la nariz con la manga de su camiseta larga, no dejaba de pensar como los miraba la chica del aeropuerto—- No quiero ni recordarlo, fue horrible.

Ellien la escuchó atento mientras le acariciaba la cabeza, ella subió la mirada hasta encontrarse con la de él y en eso aprovecho para responderle.

—- No pudieron —- comenzó —- Eso era lo único que me preocupaba, ahora no hay ser sobre este planeta que logre apartarme de ti.

A Maggi se le cristalizaron los ojos nuevamente, siempre se preguntó si en algún momento de su vida sería feliz, y ahora, justo donde estaba, podía decir con toda certeza que si tuvo que vivir todo lo que vivió para llegar a ese punto, lo viviría mil veces más.

—- Aún no puedo creer que estamos aquí —- respondió dejando de pensar en lo que pudo pasar, y es que todo pasó tan rápido que ni siquiera se había puesto a pensar en que ya era libre y estaba con la persona que amaba —- ¿Vas a contarme cómo llegamos hasta este punto? Por lo menos la parte que no sé.