Capítulo 11.

14 0 0
                                    


𝄞—Lo harás muy bien—𝄞

—Me llegó una solicitud por parte de un programa, quieren escucharnos. Así que nos invitaron para que cantemos—dice parado en la puerta, mirándome fijo y con las manos en sus bolsillos.

—¿Me estás diciendo que daremos nuestro primer concierto?—pregunto nerviosa. Él sonríe asintiendo.

—Tendremos nuestro primer concierto.

Grito lanzándome sobre él. Este me recibe abrazándome y ríendo. Enrollo mis piernas en su abdomen a lo que él tambalea recuperando su postura, sujetándome bien.

—¡Cantaremos los dos por primera vez en una tarima!—chillo. Enrollo también los brazos en su nuca.

—Lo haremos—asegura él, muerdo mi labio y dejo un corto beso sobre sus labios. Él atrae mi labio hacia los suyos pero todo pasa muy lento y solo veo encima a un montón de personas con cámaras, flash, y preguntas por cantidades. ¡Los paparazzis! ¡Los periodistas chismosos nos vieron besándonos! Eso no es bueno.

Él me deja en el piso y me agobio al ver tres micrófonos sobre mi boca esperando a que yo responda la pregunta que hicieron. No la escuché porque estaba aturdida, así que la vuelven a repetir.

—¿Qué se siente ser la novia del chico más talentoso de la nueva era?—pregunta una mujer, por supuesto que haciendo su trabajo, veo bastantes cámaras apuntarme.

Abro los ojos horrorizada al sentirme encerrada. Volteo mi cabeza buscando a Jacob y es cuando lo veo mirarme con una sonrisa de diversión, él se está burlando de mí.

—Dime, bonita, ¿cómo se conocieron? ¡Es obvio que se nota a leguas su amorío! La última canción también lo demuestra todo.

La mujer sigue esperando por mi respuesta y yo solo me pego contra la puerta de mi casa.

Seguramente Jacob ve mi cara de horror y se acerca.
—Otro día te responderá. Ahora estamos ocupados, gracias—él aboga por mí con su serena voz y la mujer parece quedar atontada. Su brazo sigue estendido con el micrófono, le doy una sonrisa incómoda para no quedar como grosera y me volteo abriendo rápidamente la puerta. Entro y lo hace también Jacob, cerrándola y dejando atrás todos los gritos en preguntas sin respuesta.

Suspiro exhasuta recostada en la puerta. —¿Cómo supieron dónde vivía?—gruño y solo escucho su risa. Lo miro mal, él pasa una mano por su cabello mirándome risueño.

—Te lo dije—ríe. —Ahora creo que me entiendes, ibas a tener fans y también te ibas a sentir agobiada.

—Te entiendo perfectamente, créeme.

Él ríe negando con la cabeza.

—¿Y sabes que es lo peor? ¡Que creen que soy tu novia!—grito sin pensarlo.

Él se pone por un momento serio pero después me mira y vuelve a reír.

—Eres muy graciosa—se ríe de mí y ahora lo estoy odiando. —Y pues que piensen lo que quieran, ¿no?

Trago grueso asintiendo.

—Ahora solo centremonos en el concierto de mañana.

Me separo de la puerta abriendo los ojos muy grandes y caminando hacia él —¡¿Mañana!?

Él se ríe. No entiendo por qué lo hace.

—De verdad que eres muy graciosa —se ríe, solo bufo. No sé si tomar eso como un halago o una ofensa.
—Y sí, es mañana.

Broken smile. Where stories live. Discover now