Abuela

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-Está mal, ¿podemos ir?

-Claro, claro, no llores que se recuperará. Ven aquí.-Le dije abrazándola y volvimos.
Bajó del coche y entró corriendo en el hospital, subió a la planta que le había dicho la madre y cuando entró en la habitación vi como se tiraba encima de la camilla.
-Connor puedes pasar.-Me dijo Mary.
-Oh, yo no... puedo esperar aquí.
-Ella te necesita, mi madre está a punto de...-no terminó la frase y empezó a llorar entonces le di un fuerte abrazo.
-Lo siento mucho.-Cuando se separó fue a junto de Jason el cual aún no puede verme delante porque tiene miedo de que le haga daño a Summer.

Entré en la habitación pero me quedé en la puerta al ver como Summer y su abuela mantenían una conversación en una voz demasiado baja, a Summer le caían las lágrimas y su abuela respiraba muy despacio, cuando me vio me sonrió y fui a junto de ellas. Le pasé una mano por el pelo a Summer y la abuela me habló.

-Al final eres su novio, ¿no?
-Algo así.-Sonreí.
-Ya sabía yo que acabaríais juntos, mi marido tan solo era mi jefe cuando empezamos a salir y al final...-dijo callándose para coger aire.
-Pues vaya usted a saber, a lo mejor hacemos como ustedes, nunca se sabe.

-Igual sí-dijo sonriendo-, ¿puedes llamar a tu madre, Summer?-Dijo y ella asintió.-Escucha, las veces que ha venido a verme me ha... me ha hablado mucho de tí. Le gustas mucho, ¿sabes? Incluso por la forma en que le brillan los ojos al escuchar tu nombre, diría que está enamorada.

-Ella también me gusta mucho, no se imagina lo feliz que me hace.-Me cogió la mano y respiró antes de hablar.

-Cuida de ella, cuídala bien porque se pondrá triste al ver que yo no estoy.

-Lo haré, no se preocupe.-Sonrió y cerró los ojos, una máquina empezó a emitir un sonido y un par de enfermeras entraron corriendo.
-Lo sentimos mucho.-Dijo una de ellas antes de salir.

Mary y su hermana empezaron a llorar mientras que sus maridos las abrazaban y Summer, Summer solo se acercó a la camilla, le cogió la mano a la abuela y de un momento para otro se tiró al suelo.

-¡Abuela! ¡Abuela, no, por favor!-Gritaba.
Me agaché a su lado y la quise abrazar pero empezó a llorar muy fuerte y movía los brazos para que no pudiera abrazarla.

-Summer, tranquila por favor.-Dije mientras se retorcía.-Ella no querría verte así, tranquila o llamaré a un médico.

-Abuela...-susurró mientras apoyaba la cabeza en mi pecho.

La cogí en brazos y me senté con ella en una silla que había en el pasillo, se fue calmando poco a poco y a los diez minutos apareció Mary. Se sentó a mi lado y le cogió la mano a su hija.

-Cariño, tienes que estar tranquila. No te dejaremos venir al entierro si estás así.

-Mamá, la abuela.-Dijo con la respiración agitada.-No quiero que se vaya.

-Ahora ya está cariño, no podemos hacer nada, ya está. Ahora la abuela está bien, tienes que tranquilizarte.-Asintió y Mary se limpió unas lágrimas que tenía en su mejilla.-Iré a junto de mi hermana que le ha dado un ataque de ansiedad, si se pone peor avísame.-Me susurró.

-Lo siento mucho Mary, intentaré que se calme.-Contesté y me hizo una pequeña caricia en el hombro antes de marchar.-Escúchame pequeña, vamos para casa, ¿vale?

-Quiero quedarme con la abuela.
-Después venimos pero ahora vamos un ratito para casa.

-No Connor, por favor, quiero quedarme.

-Venga Summer, un rato, luego vendremos; te lo prometo.-Se quedó callada y me levanté con ella en brazos, la senté en el coche y fuimos para mi casa.

Le ayudé a bajar y antes de que se tumbara en mi cama le di una pastilla para que estuviera tranquila, me tumbé a su lado y se quedó dormida mientras le hacia caricias en el pelo. Llamé a Nicky y le conté lo ocurrido, le dije que la informaría cuando supiera a que tanatorio la mandaban y me dijo que no vendría a mi casa para no molestarla. Me sonó el móvil y lo cogí rápido para que no la despertara.

-Hola Mary, ¿cómo va todo por ahí?

-Hola, mejor, ¿cómo está Summer?

-Lleva dormida desde que llegamos a casa.
-No la despiertes, ya la llevan para el tanatorio y se entierra mañana a las cuatro, queremos que sea rápido.
-Vale, luego iremos para allá. Un beso.-Dije antes de colgar y Summer despertó.
Me acerqué a ella y le di un beso en la frente.

-Connor... ¿podemos ir ya?

-Sí, dame diez minutos.-Me metí en el baño y puse un pantalón vaquero corto y una camisa negra, la remangué porque hacía mucho calor.-Vamos anda.

Paramos en su casa porque quería cambiarse y aproveché para avisar a Nicky, cuando entramos en su habitación abrió el armario y sacó un vestido negro flojo, de manga sisa; le ayudé a quitarse la ropa y a ponerse ese vestido, puso unas converse negras y se peinó antes de salir.

Narra Summer
Llegamos al tanatorio y todos mis familiares estaban allí, los amigos más cercanos de mis padres también y cuando entramos en la sala, Connor apartó su brazo de mis hombros para que pudiera abrazar a Nicky, empecé a llorar y me susurró.

-Tienes que estar tranquila para que mamá esté bien, Summer. Estamos todos contigo, sé que es duro pero tienes que estar tranquila.-Me dio un beso y cuando miré tras ella estaba Luck.

-Hola florecilla-me dijo antes de abrazarme-, hey... no llores. Venga Summer, si tú estás mal, nosotros estamos mal. Tranquila, ahora tu abuela está bien, ya no sufre ni nada, tienes que tener en mente todos los recuerdos bonitos que has tenido con ella. Venga Su.-Asentí y volví para junto de Connor.
Me senté en un sofá y él se sentó a mi lado, estuvimos así hasta las once de la noche; entraba gente que no conocía, me abrazaba y volvía a sentarme. 


Connor estuvo a mi lado todo el rato, no se separó ni un minuto y eso hizo que estuviera mejor; al día siguiente aparecieron Richard y Rose, me alegró mucho verlos allí, estuvimos hablando los cuatro un buen rato hasta que nos dijeron que era la hora del entierro.

Llegamos a la iglesia y fue la misa, mi madre estaba medianamente bien y eso me relajaba pero mi tía... bueno; cuando acabó el entierro mucha gente me abrazó pero yo solo era capaz de asentir a lo que me decían, se fue marchando todo el mundo hasta que solo quedamos mi familia, los padres de Nicky, mis amigos y unos amigos de mis tíos.


-¿Por qué no vas un rato para casa de Connor?-Me preguntó mi madre y asentí.

También vinieron Nicky y Luck, me estuvieron contando cosas y eso hizo que estuviera mucho más entretenida, Connor me miraba cada cinco minutos y me daba un beso en la mejilla. Fue un gran apoyo para mí en aquel momento, cuando se fueron mis amigos ya eran las diez y media, estaba muy cansada así que me tumbé en el sofá.

-¿Quieres quedar a dormir?-Solo asentí y él me llevó para su habitación en brazos.

-Te quiero.-Dije cuando tenía los ojos cerrados y abrió uno.

-Yo también te quiero.-Me dio un beso corto y nos quedamos dormidos.


¡Hola florecillas! ¿Cómo estáis? Yo estoy muuuy contenta porque, aunque sean poquitas, ¡¡ya tenemos casi 400 lecturas!! Estoy super emocionada jajaja. 
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Un abrazo, Ris. 🌷

Sr. BrownWhere stories live. Discover now