CRECER AGRIDULCE ©

CAPÍTULO 21: DESTINO FINAL

Las vacaciones de verano ya están por comenzar y los alumnos se están arreglando con los profesores para acreditar las materias que faltan por evaluar. Danna ya no necesitaba ir a la secundaria pues ya había sido evaluada en todas las materias, pero seguía asistiendo para ver a Yahir unos minutos más de lo habitual. Hoy cumplen cuatro meses de novios y ambos prepararon un pequeño regalo para el otro. La joven ve a su amado que se encuentra esperándola sentado en la jardinera frente a la entrada de la escuela, el chico parece nervioso mientras observa una cajita pequeña que sostenía en su mano.

La adolescente nerviosa toca el hombro de su novio para darle la sorpresa de su llegada y el chico asombrado la abraza con todas sus fuerzas.

─Llegue mi amor ¡Feliz cumple mes! No sabes cuánto agradezco a la vida de tenerte, te amo tanto Yahir─ el chico separa su rostro unos centímetros, admira el rostro protagonista de todos sus sueños con esa oscura mirada llena de amor adolescente en donde puede observar su reflejo, el que tanto le invade de inseguridades. El muchacho se aleja de inmediato por el repudio interno que siente de sí mismo pero la chica no entiende lo que pasa.

─ ¿Dije algo malo? ─ Danna le toma de la mano y el niega con la cabeza.

─No, solo me acorde de algo no es nada, te traje esto por nuestros cuatro meses─ dice Yahir mientas que la chica abre la cajita y se encuentra con una nota de papel junto a unos aretes de color rosa con destellos brillantes, algo que la toma por sorpresa pues no se esperaba ese tipo de regalo en un cumple mes. Lo que más le causaba intriga era lo que contenía esa nota, pero no quería leerlo frente a él ya que quería hacerlo en el momento adecuado a solas.

─Muchas gracias hermoso, no tenías que hacerlo, pero yo también te traje algo─ la joven ilusionada saca su carta con el moño de estambre junto con un chocolate que alcanzó a comprar en una tienda en el camino.

─¡Que linda eres! La leeré cuando llegue a casa, ¡Te amo Danna! ─ la chica tomando la iniciativa se acerca a él para plantarle un beso en los labios pues no quería esperar a que él lo hiciera primero.

─ ¡Felicidades a los tortolos! ─ llega un compañero del grupo de Yahir a arruinar el momento romántico de los novios.

─ ¿Qué quieres Alejandro? ─ dice el chico con fastidio

─Como no me has presentado con tu novia me presento, me llamo Alejandro, pero puedes decir Alex─ la chica le extiende la mano para saludarlo, pero él se toma el atrevimiento de darle un beso en la mejilla lo cual hace enojar a Yahir.

─Solo venía a recordarte que tenemos la última exposición de inglés mañana y aun no hacemos la lámina y quería preguntar sobre quién lo iba a hacer─ dice el chico sin dejar de observar a Danna mientras ella se sonroja por ello.

─Ya te había dicho que lo haría yo─ le dice Yahir fastidiado por la situación.

─Perdón que me meta, pero ¿tienes familiares asiáticos? Lo digo por tus ojos, digo si no te molesta─ dice Danna introduciendo más tema de conversación con el chico.

─Si, todos me preguntan eso no te preocupes, mi mamá es mexicana y mi papá es coreano, pero yo nací aquí, así que soy mexicano con pinta de asiático ¿y tú de dónde eres?

─Mi familia es de Sinaloa, pero también nací aquí en la paz

─Con razón por eso estas tan bonita─ la chica sonríe de los nervios y Yahir está matando a Alex con la mirada por su comentario innecesario ─Guey perdón sin ofender, pero tienes una novia muy bonita espero no me lo tomes a mal.

─Si, no pasa nada─ dice entre dientes, pero no puede esconder su molestia. De pronto una avalancha de estudiantes de dirigen a un rumbo en específico.

─ ¿A dónde van todos? ─ pregunta la chica

─Según habrá una pelea a dos cuadras de aquí ¿vamos a ver? ─ la chica asiente y toma de la mano a Yahir para acudir rápidamente al lugar de la supuesta pelea. Al llegar se encuentran varios estudiantes grabando con sus teléfonos lo que sucedía, Danna se adentró entre los chicos para observar quienes eran los que iban a enfrentar y lo que vio la dejo atónita. Dos hombres de mala pinta sostenían a Rogelio mientras otro lo golpeaba en el estómago. La chica quiso intervenir, pero Yahir alcanzó a tomarla de la cintura por detrás para que no se entrometiera en un lio en donde podría salir herida. La joven desesperada empuja a su novio de la impotencia y corre para tratar de parar la pelea, pero vuelve a sentir que unos brazos envuelven su cuerpo y le impiden moverse. El hombre que golpeaba a Rogelio se coloca una manopla y golpea dos veces en el rostro ya desfigurado del muchacho, los hombres lo dejan caer al suelo, hizo su último esfuerzo para ponerse de pie cuando recibe el ultimo impacto con la manopla en su rostro y su cabeza golpea con la banqueta quedando totalmente inconsciente.

Danna logra zafarse del agarre de su novio y corre hacia el cuerpo tirado de Rogelio, todos los estudiantes incluidos los golpeadores huyeron de la escena de los hechos lo más rápido que pudieron. Las sirenas de la policía se escuchaban más cerca, Yahir intentaba convencer a su novia de irse, pero ella no quería dejar solo el cuerpo de su compañero de clase.

─¡Danna tenemos que irnos! Nos meteremos en más problemas─ dice el chico muy asustado al ver toda la sangre que derramaba Rogelio.

─ ¡Cállate y llama una ambulancia! ─ le grita histérica y en un mar de llanto la joven quien sostenía la mano del chico.

Pasan las horas desde el suceso que llevo a Rogelio al hospital. La policía interrogo a los chicos que se encontraban en la escena del crimen, el video del momento en donde Rogelio cae al piso inconsciente se hace viral en redes sociales llegando a ser evaluado por las autoridades. Los padres del muchacho agradecen a Danna por su valentía para quedarse acompañando al cuerpo mientras llegaban los paramédicos, el chico se encuentra en coma debido a todas las lesiones que sufrió en el ataque. Los novios se toman de la mano mientras se van a sentar en las sillas de la sala de espera viendo al horizonte sin tener conversación alguna.

─Es mi culpa Yahir─ dice con voz entrecortada.

─ ¿Por qué lo dices? ─ dice el joven desconcertado

─Élsabía que esto pasaría...