El Rey Negro De Heartlabyul

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Estaba cansado, por primera vez en mucho tiempo tenía una jaqueca que no parecía querer disminuir y lo peor de todo es que esto solo estaba empezando. —Te escucho— decía resignado Crowley. —Sabia elección— comenzaba su discurso el ex-profesor.

 —Primero, quiero tu renuncia y segundo que me nombres el nuevo director— sonriente Walter se veía confiado de haber logrado su objetivo, los alumnos, maestros y fantasmas esperaban expectantes la respuesta de Crowley. —Primero, no porque solo se puede hacer el cambio de dirección si muero o me ganas en un duelo— comenzaba su respuesta el director.

 —Segundo, en tanto no regreses a mis estudiantes sanos y a salvo no pienso seguir negociando contigo— la seriedad con la que hablaba Crowley tenía sorprendidos a todos. —Y tercero, ¡blew!— terminaba sacándole la lengua y perdiendo todo respeto de los presentes.

Ver como a pesar de todo Crowley no le tomaba en serio solo hacía que la sangre de Walter hirviera. Con su báculo hizo levitar a Mc y Amín, las cuerdas que amarraban sus manos se extendieron a sus cuellos y comenzaron a asfixiarlos, aunque seguían inconscientes se notaba como el agarre los lastimaba.

—¡MC/ AMÍN!— los amigos de ambos chicos gritaban preocupados, —¡Crowley!— los profesores también se impacientaban. —¡Espera!— gritaba el director volviendo a conservar la calma, —Te propongo un trato—. El ex-profesor se tomó unos segundos antes de liberar el agarre de las cuerdas dejando a los alumnos respirar con normalidad.

 —Escucha, en verdad no hay forma de nombrarte director porque ya no trabajas aquí y eres muy cob... consciente de que solo por duelo puedes hacerte con el cargo, que te parece un duelo entre mis siete prefectos y tus siete ... Sean quienes sean esos zombis que tienes. A cambio regresas a ese par— terminaba su propuesta el director.

Walter sonrió, estaba seguro de que la escuela por fin seria suya, —Me parece bien, pero solo te regresaré a uno de ellos, a cambio de que tú tomes su lugar—. De inmediato las quejas y  palabras altisonantes sonaron en la sala de los espejos. Crowley oía cada pedido de rechazar dicha propuesta y comenzar la ofensiva.

—Acepto— dejaba callados a todos.

Walter aplaudió la respuesta, —Muy bien— el holograma se hacía a un lado dejando ver el espejo detrás de este, —Lo he encantado para que te traiga, una vez aquí teletransportare al estudiante que elija regresar, tienes cinco minutos— cortaba la comunicación.

Profesores y prefectos rodearon al director, —¿Estás loco?, podría ser una trampa Crowley— decía Divus a lo que lo demás lo secundaban, este solo suspiro. —No crean que no lo sé, pero Walter es un sujeto impredecible, además...— se quedó callado, no era conveniente preocupar más a los presentes con la sospecha que tenía.

—Escuchen ustedes siete— se dirigía Crowley a los estudiantes, —Solo necesitó que consigan tiempo, yo me encargaré de esto— los prefectos solo asintieron resignados. El de máscara se dirigió al espejo, —Profesor Mozus— llamo Crowley antes de entrar, le dijo algo en voz baja y acto seguido entro al espejo.

Pasados unos segundos el espejo se volvió a activar, un cuerpo aun atado de las manos cayó inerte de él, era...

—¡AMÍN!— sus amigos de Scarabia corrían a ayudarle.

...

Riddle vio el espejo que llevaba a su dormitorio, —No tienen que hacerlo, sobre todo ustedes dos— decía volteando a ver a los cuatro estudiantes que lo seguían. —Si de algún modo podemos ayudar a volver a Mc, ¡lo haremos!— decía entusiasmado Deuce siendo secundado por Ace quien se tronaba los nudillos.

Los otros siete (Dark Route)Where stories live. Discover now