In My Veins - [Hyunin] [2] [✓]

VI

El cuerpo de Jeongin se movió de un lado al otro a causa de la fuerza de Changbin, quien apoyaba su mano en su hombro y le gritaba cosas en su rostro como si no estuviera a menos de un metro del menor. Jeongin abrió los ojos con pesadez y miedo, últimamente dormir era un privilegio y parecía que nadie en aquel búnker se lo iba a dejar fácil.

—¡Jeongin, despierta! ¡Tenemos que irnos! —Apuró el curador, en su mano había un bolso que había robado de su armario y que estaba llenando con ropa aleatoria del mismo.

Jeongin se levantó, se colocó su ropa y ni siquiera se detuvo a tomar las cosas de importancia, pues Changbin había vaciado media habitación. Se encontraba aturdido, apenas y podía reaccionar. Salieron al pasillo, Changbin empujando al menor y haciendo que esté se encuentre con Seungmin de golpe, también adormilado y con Chris a su espalda.

—¿Tienes idea de que está ocurriendo? —Preguntó Seungmin, tenía un bolso en su mano y parecía asustado. Jeongin negó, refregando sus ojos para acostumbrarlos a la fuerte luz del pasillo.

—¡Rápido, no tenemos mucho tiempo! —Atacó Changbin, adelantándose por el pasillo y recibiendo una acción algo torpe de los demás.

—Changbin. —Llamó Chris, su cabello rizado y negro despeinado le caía desprolijamente por su frente y sus ojos se encontraban más hinchados de lo normal.

—Ustedes subirán al ascensor y yo iré por Felix. —Continuó Changbin, bajando las escaleras con rapidez.

—Changbin.

—Ya cargue las armas, inclusive el maldito francotirador de Hyunjin, no tenía tanto tiempo así que solo hay algunos cuchillos y-

—¡Changbin! —Chris lo detuvo del brazo, al mismo tiempo que el curador le miraba con una expresión preocupada. —¿Qué está pasando?

—El búnker... El búnker caerá en menos de treinta minutos. —Habló con torpeza, abriendo el ascensor con sus manos y lanzando dentro el bolso de Jeongin. —Tuve una visión, no hay mucho tiempo.

Su voz se escuchaba preocupada, los menores del grupo se miraron entre ellos antes de entrar al elevador mientras Chris tomaba de los hombros al curador y lo obligaba a mirarlo. El aire frío entraba por las grietas y el humo aeris no tardaría en hacer presencia en sus organismos.

—Iré contigo. —Aclaró el mayor, afirmandolo y no pidiendo permiso. —Si Felix está despierto, no tendrás mucha oportunidad contra él. —Changbin asintió, algo adolorido por ese comentario. Chris se dio la vuelta hacía los menores. —Volvemos enseguida, pero en caso de no hacerlo, suban al galpón, ¿Está claro?

—No. No lo está. —Declaró Jeongin. —No voy a dejarlos aquí abajo. Aún hay tiempo.

Pero mientras Jeongin se mantenía firme en su lugar y miraba con determinación a sus mayores, el techo desprendió otro pedazos y todo lo que algún día llevó a los miembros del búnker al segundo piso, unida a la plataforma de entrenamiento y principal entrada del comedor, se encontró destrozado bajo los escombros y el polvo gris que se levantaba.

—Jeongin, si no volvemos, subes. —Reprochó Chris, mirando con enojo al menor.

—No, no voy a hacerlo.

—Si, lo harás. —Atacó, empujando el cuerpo del menor y empujándolo hacia atrás, para luego tomar la reja del ascensor y cerrarla con fuerza para evitar que Jeongin saliera.

El menor soltó un sonoro jadeo de dolor y apoyó sus manos en las rejas mientras veía como sus dos mayores corrían entre el polvo y se perdían allí dentro. Seungmin apoyó su mano en el hombro del menor y le dedicó una suave caricia en su lugar.