Capítulo 72: ¡Snoopy!

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• Kindly Calm Me Down - Meghan Trainor •
"Cuando me esté sintiendo perdida, ¿Vendrías a buscarme?"

Ángela estaba temblando mientras Harry trataba de hacer algo, no sabían si la piedra arrugada que había metido estaba ayudando o empeorando, tal vez lo que había tomado no era un bezoar.

—¡Haga algo!— gritó Ángela viendo a Slughorn —¿Escucha? ¡Mi mejor amiga está muriendo! Por favor... Haga algo— pidió con lágrimas en los ojos.

Harry, quien estaba desesperado por hacer cualquier cosa que pudiese ayudar a su mejor amiga, no sabía qué hacer, simplemente estaba en shock, no sabía de donde sacar otro bezoar que funcionara. Mientras que Horace veía todo a unos metros, solamente estaba de pie, y por su expresión también estaba en estado de shock. Evelyn llevaba casi dos minutos sin respirar, seguía echando espuma por la boca, antes tenía su piel enrojecida, pero en ese momento estaba de color azulado, estaba fría y ya no hacía ningún movimiento.

—Necesitamos llevarla con Madame Pomfrey, ella puede ayudarnos— dijo Ángela.

—Iré a buscarla— eso fue lo último que dijo Harry, pues salió del despacho para ir por ayuda.

Para su buena suerte, recién saliendo del salón se encontró con Snape, y al ver la frustración del chico, accedió a ver lo que ocurría, sin embargo, se le congelo la sangre cuando vio a su alumna, sin decir que, a la favorita, tirada en el piso, pálida e inmóvil mientras que Ángela lloraba tratando de hacer algo.

Sus facciones eran las mismas de siempre, un rostro sin mostrar ningún sentimiento o reacción —A la enfermería ahora— ordenó.

(...)

Nadie sabía lo qué estaba pasando dentro de la enfermería. En cuanto Snape llegó con Evelyn, cerraron las puertas, ya que era una emergencia y claramente era demasiado grave. Minerva McGonagall ya estaba enterada de todo lo ocurrido, no le importó cancelar todas las clases que tenía con tal de ir a la enfermería. Pero se sorprendió cuando estaba por entrar a la enfermería, pues había varios estudiantes sentados en el piso y sabía perfectamente que estaban esperando alguna respuesta sobre la salud de Evelyn. Pues entre esos alumnos estaban Theo, Hermione, Harry, entre otros.

Las puertas de la enfermería se abrieron, dejando ver al profesor Snape, camino hacia la misma dirección, pero se detuvo al ver a los estudiantes —¿No deberían estar en clase?— preguntó, pero nadie contestó. Minerva se acercó a él y le susurro un par de cosas. —La muchacha está muy grave— fue lo único que se distinguió.

McGonagall se exaltó al escuchar eso, ni siquiera espero a que Severus caminara, ella no tardo en adentrarse y dejarlo atrás, y cuando las puertas de la enfermería estaban por cerrarse de nuevo, el señor y la señora Weasley llegaron, no pensaron y rápidamente también entraron.

Ginny y Harry estaban junto a Hermione, la chica no había asistido a ninguna clase desde que le avisaron que su novia había sido envenenada, simplemente había estado esperando alguna noticia buena. Tampoco había comido y mucho menos pensaba en irse de la enfermería sin haber visto a su novia.

—Hermione, tienes que comer— insistió Ginny, pero de nuevo, fue en vano.

—Ya te dije que no me iré de aquí, tengo que verla, tengo que ver cómo está— le repitió limpiando una lagrima que había rodado por su mejilla.

Mientras tanto, del otro lado estaba Theo abrazando a Ángela, mientras Zabini estaba tomando la mano de Pansy y Astoria. Por suerte, Ángela ya estaba tranquila, pues Madame Pomfrey le había dado una poción tranquilizante. Pero cierto rubio no estaba cerca, lo cual era raro.

Quédate GrangerWhere stories live. Discover now