"¡Es un hecho! La mafia de los Black Dragon ha renacido de entre las cenizas y en tan poco tiempo se ha vuelto casi tan poderosa como Bonten, la mafia número uno de Japon."
"Brahman ha perdido contra la nueva generación de los Black Dragon y ahora s...
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—¿Qué harás después de que logres vengarte?— preguntó Chifuyu un día cálido.
Takemichi estaba sentado en la sala de su oficina mientras trabaja en su computadora sin descansar, llevando inventario y registros sobre el dinero que habían hecho esos últimos meses.
Chifuyu pasaba la mayor parte de sus tardes con Takemichi en su oficina, a veces hablaban y otras veces como esa solo se mantenían en silencio, disfrutando de la compañía del otro.
Ese día Chifuyu estaba sentado en el sofá de enfrente mientras veía su celular pero esa vez miraba de vez en cuando a Takemichi trabajar, su aspecto lucía algo demacrado y llevaba grandes ojeras. No había pasado muchos meses desde que Black Dragon renació pero al tener un gran éxito significaba que tenían mucho más trabajo de lo normal, en especial Takemichi que apenas descansaba.
Había aprendido muy rápido el cómo funcionaban los negocios en el bajo mundo y supo que no era algo para tomarse a la ligera si no querían fracasar por lo que pasaba la mayor parte del tiempo estabilizando todo Black Dragon.
Aparte Chifuyu también sabía que en los pequeños descansos que su compañero lograba tener los usaba para idear planes y estrategias para poder destruir a Bonten.
Hanagaki levantó su mirada de la computadora para ver a Matsuno.
—No he pensado mucho en ello— respondió después de pensarlo un tiempo.
—Entonces, ¿Por qué no vienes con Baji y conmigo a dar la vuelta al mundo?
Chifuyu le tenía mucha fé a Takemichi que sabía que lograrían que Baji regrese con Chifuyu y este último ya había planeado las cosas que harían ellos dos cuando se volvieran a juntar y entre esas cosas era viajar por el mundo, un sueño estúpido que tenían ellos dos cuando apenas se habían conocido pero que ahora era posible gracias al dinero que tenían.
—¿Dar la vuelta al mundo?— repitió el líder.
—Ahorraré durante todo este tiempo que nos logre llevar lograr nuestros objetivos— explicó Matsuno con una pequeña sonrisa— así podremos disfrutarlo sin miedo a quedarnos sin dinero.
La luz del atardecer se filtraba por el gran ventanal logrando que la habitación se pintara de colores cálidos.
—Tal vez no dar la vuelta al mundo por completo ya que eso nos tomaría demasiado tiempo— dijo después de un rato— pero al menos podríamos ir a un lugar al que nunca hayamos estado los tres.
Takemichi lo miró, pudo notar un brillo en los ojos de su compañero cuando dijo esas últimas palabras.
Podríamos ir a un lugar al que nunca hayamos estado los tres...
—Quiero recompendarte, compañero— le dijo con una sonrisa— porque has sufrido y has trabajado mucho.
