"¡Es un hecho! La mafia de los Black Dragon ha renacido de entre las cenizas y en tan poco tiempo se ha vuelto casi tan poderosa como Bonten, la mafia número uno de Japon."
"Brahman ha perdido contra la nueva generación de los Black Dragon y ahora s...
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Frente a él se encontraba una lápida con un nombre grabado y los años que vivió. Había permanecido sentado frente a esa lápida en silencio por al menos cinco minutos donde prendió un cigarrillo que poco a poco fue consumiéndose hasta que dio una última calada a éste.
Sacó otro cigarrillo que prendió y sacó el humo antes de hablar.
—¿Lo estás haciendo bien, Kisaki?— le preguntó a la lápida, el silencio fue la única respuesta que recibió—. Bien, entonces empecemos la historia de un ángel que se convirtió en un ángel caído y un demonio.
Había muchas versiones de esta historia, unas más locas que otras, otras más románticas y otras más trágicas pero había una versión en especial que se creía que era la verdadera.
Había un ángel querido por los cielos, siempre amado y nunca odiado, emanaba tanta luz con una simple sonrisa y calentaba el corazón de tantos con su suave voz. De todos los ángeles en el cielo, él era el ejemplo a seguir en los cielos.
Este ángel cumplía su deber; servía y protegía a los humanos hasta que un día ese ángel se enamoró de una pequeña humana, había sido cautivado por su bondad y amabilidad pero para un ángel, enamorarse de un humano estaba en contra de las reglas por lo que solo podía observarla y cuidarla desde la lejanía.
Hasta que un día, esa humana se armó de valor para hablarle a ese ángel que la seguía y cuidaba, y que sin darse cuenta se terminó enamorando.
Sabía que el amor entre ambos estaba prohibido en los cielos pero decidió seguir a su corazón y se permitió amarla a escondidas, con el paso de los años ese amor fue creciendo y creciendo, volviéndose inquebrantable, el ángel había hecho un buen trabajo todos esos años al ocultar su enamoramiento y creyó que sería así por siempre.
Hasta que un día, el cielo y el infierno tuvieron un desacuerdo que los llevó a una guerra, la humana se había involucrado demasiado lo que la llevó a su muerte.
El ángel caído, al ver el cuerpo sin vida de la persona que tanto amaba, ardió en dolor pero ese dolor se convirtió en rabia al enterarse que había sido un demonio quien había terminado con la vida de su amada.
El dolor y el sufrimiento lo llevaron a tener demasiadas emociones negativas de rabia y enojo pero sobre todo la sed de venganza. Al poco tiempo, el ángel querido por los cielos terminó dejándose llevar por el mal y terminó siendo desterrado de los cielos y con esto, convirtiéndolo en un Ángel Caído.
Ser desterrado era algo humillante pero a ese ángel no le importaba, solo quería hacer pagar a ese demonio por quitarle lo que tanto amaba.
Así que este Ángel Caído, sediento de venganza, decidió buscar a La Muerte para que éste lo ayudara a vengarse de aquellos demonios que le quitaron al amor de su vida.
Al principio La Muerte se había sorprendido, nunca ningún ángel caído lo había buscado, mucho menos para pedirle que lo ayudara a vengarse de un demonio, era algo extraordinario sin duda alguna.
