M i r a d a s

21 3 2
                                    

Hoy te ví allí sentado, y me pregunté ¿por qué la vida fue tan injusta con nosotros?

Es decir, dos personas que se querían tanto, ¿cómo es que al pasar los años, se ven en la calle, y ni siquiera se saludan?

Honestamente, me hace sentir triste el hecho de que ya no seamos amigos. Y sé qué, en alguna parte de tu interior, también lo sentís. Porque pude sentirlo en esa mirada...

Sé que solo fueron unos segundos, pero me bastó para saber cómo te sentías. Porque te conozco, y nos conocía. Sentí como con una sola mirada nos abrazamos, por todo el tiempo que estuvimos separados.

Siempre pienso en vos, y le pido a Dios que te vaya bien. Porque, como te dije la última vez que hablamos, siempre te he querido, y siempre te voy a querer. No importa cuántos años pasen, o que hayas hecho, o lo que no... Solo siento que, te voy a querer para toda la eternidad.

Realmente no sé si alguna vez vas a leer alguna de las tantas cartas que te he dedicado en este espacio, mi espacio... La verdad creo que las posibilidades son de una en un millón. Aunque, aún así desearía que lo hicieras. Para que, de alguna manera, te enteres que te quiero, y que siempre te doy mis mejores deseos para tu vida, sinceramente, y con todo el cariño del mundo.

No voy a mentirte, he pensado varias veces en volver a hablarte. Llamarte y pedirte hablar cara a cara. Quisiera entender cómo es que una amistad tan sólida y con tanto amor de por medio, se pudo disolver tras una sola acción... Pero, siendo sincera... Tengo miedo...

Tengo miedo de que no quieras hablar conmigo. O de cómo me puedas tratar, porque, todavía me importa lo que pensas de mí... Tal vez, solo me da miedo el darme cuenta que quizá yo haya sido la única responsable de nuestra separacion.

Y es que, ya sabés, siempre he manejado un alto nivel de intensidad en mi persona. Como amiga siento que cometí muchos errores, como, no ser comprensiva, o ser celosa y querer atención solo para mí... Pero, mi forma de querer siempre fue sincera y desinteresada. Y lo sabés. Te pido disculpas si alguna vez demostré lo contrario, o no fui cómo querías que fuera, o como lo necesitabas...

Sé que, el que escriba acá no cambia nada entre nosotros, pero, me gusta pensar que algún día vas a leer esto, y vas a sonreír al darte cuenta que, aún hasta tres años después, te sigo queriendo...

Tal vez sea por el hecho de que te consideraba mi hermano. Yo creo que, lo fuiste verdaderamente... Muchos dicen que siempre se quiere a la familia, a pesar de todo. Y creo que eso es lo que me pasa con vos. Tal vez todavía no abandoné ese sentimiento. A veces dudo que pueda hacerlo, es decir... Fuiste el mejor hermano que he tenido, no es como que se pueda olvidar.

En fin, creo que ya comencé a divagar mucho y todo lo que quería decir era eso, que te extraño, te quiero, y que me gustaría que en algún momento nos sentáramos a charlar, a ver qué nos pasó. Y plantear el volver a ser amigos, hermanos, confidentes.

A veces pregunto por vos y me alegra verte bien y saber que poco a poco vas triunfando. Espero que también lo estés haciendo internamente, que vivas feliz, despreocupado y sobre todo, con esa esencia tan vivaz e inmanejable que solías tener a mi lado. Rezo por tu felicidad y guardo nuestros sueños en mi caja especial. Hubiera sido lindo cumplirlos algún día.

Espero que te encuentres bien. Gracias por esa mirada cargada de todas esas emociones, lamento haberme quedado tiesa, a decir verdad, no sé qué hacer con vos, a veces me confundís... Espero que algún día podamos encontrarnos y hablar, ha pasado tiempo, y sé que ambos hemos crecido y tenemos otras percepciones... Tal vez eso ayudaría.

Espero que cumplas tus sueños, y vivas la vida que siempre deseaste.

Hasta pronto, mi dulce amigo. Tal vez algún día, la vida nos vuelva a encontrar...

Diario de una chica "Loca"Where stories live. Discover now