Diario de una chica "Loca"

Qué suerte tiene el cielo

Si no digo esto ahora... Seguramente me romperé...

Antes de que termine este día, solo quiero desearle un feliz cumpleaños al cielo. Qué suerte tiene de tenerte allá arriba...

Siempre pienso que no quedan más cosas por decir, y aún así; tengo tanto por decir...

A lo largo de estos años he vertido un océano de lágrimas. Y por cada lágrima te amo y te extraño más... Parece que después de todo, algunas heridas incluso con el tiempo no desaparecen, otras son más profundas de lo que parecen, y casi todas son como espinas que nacen entre las flores que crecen.

A veces no puedo creer que esto sea verdad... He rezado tanto por vos. Te echo tanto de menos...

Por mucho tiempo no sabía lo que tenía, pero maldita sea, en estos días, lo hago. Y, parece tan complicado pedir ayuda.

Si tuviera un solo deseo, sería que no te perdieras esto. Deberías estar aquí... Muchos me dijeron que estás en un lugar mejor, y yo también lo estaría si pudiera verte... Aunque fuera por un ratito. Pero, lo único que sucede es que el dolor nunca se va, solo envejece...

Jamás podré superar el que te hayas ido. Nunca he sido del tipo de persona que deja ver sus sentimientos; y pensé que ser fuerte significaba no perder el control de vos mismo. Pero estoy lo suficientemente triste para dejar caer al dolor como la lluvia de mis ojos. En esta maldita noche fría solo quiero llorar, tratando de descifrar esta vida... Vivo con un pasado que no puedo superar y todavía me persigue. Así que estoy rezando por el coraje para hacer un cambio, pero tengo esperanza.

Todo está bien, excepto por una cosa: Deberías estar acá, de pie con tu brazo al rededor del mío; acompañándome en tantas cosas que... Dios, deseo que de alguna manera pudieras estar acá... Algún día, caminaré a tu lado de la mano, junto al viento de los huracanes. Donde estés, ahí voy yo; algún día...

Todos estamos hechos de recuerdos, y con esos recuerdos vienen algunas cicatrices. Todos cargamos con algún nudo en la garganta... Y una cicatriz en el corazón. Hay cosas que no olvidamos con los años, que valen más... Y, aunque no ha sido fácil tuve que aceptar que vos no estás conmigo. Creí que las batallas que pelearía, lo haría a tu lado. Tu presencia se me arrebató a muy pronta edad, tus latidos, tu voz, tu corazón... Pero quiero que sepas, que siempre vas a ser parte de mí.

Y espero que estés brillando en el cielo, sobre todo hoy. Espero que los ángeles sepan lo que tienen... Apuesto lo que sea a que el cielo está tan bien desde que llegaste.

A veces me pregunto en dónde estoy. Si la realidad refleja lo que algun vez soñé cuando era niña. No vivo mi vida cada día como rezabas para que lo hiciera, soy un desastre de chica, con tantas lecciones por aprender, como estrellas en el cielo. Aún tengo un largo camino por recorrer.

Pero te agradezco porque siempre fuiste paciente conmigo, gastabas tus ahorros en mí y me enseñaste mucho en esos tiempos cuando la línea entre el bien y el mal no parecía tan confusa. Me contabas sobre los viejos tiempos con nostalgia, y me enseñaste a estar para el otro pase lo que pase; me mantenías sana y salva en las noches, tenías que llevarme a todos lados, y siempre, siempre estabas ahí cuando miraba hacia atrás. De todo eso dependen las niñas pequeñas... Los recuerdos que hicimos podrían llenar un libro entero. Eras como un ángel guardián, aunque tal vez en la tierra los ángeles no siempre tienen alas.

Espero que el cielo sepa cuán valioso sos y lo afortunado que es en tenerte, daría lo que fuera por verte, al menos cinco minutos... Y poder desearte, un feliz cumpleaños...

~ Con todo mi amor, Crazy