Forma de amar

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A veces quisiera tapar la realidad con una venda en mis ojos, y tomarles la mano para siempre, huyendo a donde el tiempo no pasa, donde nos perderíamos el paso de la vida, que en este mundo, tarde o temprano llega a su fin...

Por ellos creo en lo eterno, de niña ahuyentaron mis miedos y angustias. Abrazaron mis miedos y calmaban las tormentas que no dejaban de llenar mi interior. Con ellos siempre estuve en calma, siempre fui yo, siempre fueron ellos.

Y, aunque tengo a mi abuela conmigo desde hace catorce años, para navidades y cumpleaños, solo he deseado haber pedido más tiempo para mi abuelo. Mi abuela lo extraña mucho, y yo con ella.

De mi abuela he aprendido que puede existir el amor y la pasión después de cincuenta años. Me ha hecho creer en la eternidad... Extraño a mi abuelo, desde hace mucho lo hago, y, siendo sincera, no hay día en el que no lo recuerde. Lo venía pensando desde hace mucho, pero de alguna manera, no lo había dicho. No en voz alta...

El hecho de que se fuera temprano, hizo que volcara todo ese amor pendiente en mi abuela. Hoy, la veo reírse y se me reinicia la vida. Ella me enseñó que el amor son recuerdos en la memoria, y que cuidar es la mejor forma de amar.

Por eso, la mejor forma que tengo de amarla, es aludir a esa enseñanza de vida que me deja, cuidándola hasta donde la vida me lo permita. Porque yo la amo, con cada latido de mi corazón. Después de todo, cuidar, es la mejor forma de amar...

Diario de una chica "Loca"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora