Capítulo 3

1.6K 252 39
                                    

El sonido de fuertes golpes en la puerta lo despertó, froto sus ojos para acostumbrarse a la luz del sol que entraba por la ventana, miró el reloj que se encontraba en la pared, el cual marcaba 15 minutos para las 10:00 am, podría seguir durmiendo sin problema porque sus clases iniciaban a las 4:00 pm, el rubio dio un pequeño brinco cuando escuchó nuevamente los golpes en la puerta del departamento, no sabía quién era la detestable persona que estaría molestando a esas horas, si era algún vendedor se iría cuando nadie respondiera, sus amigos no podrían ser porque tenían llave y en caso de que se les olvidará podrían marcarle, ambos sabían que no tenía clases por la mañana ese día, solo para estar seguro el rubio decidió revisar su celular sorprendiéndose que tenía más de 10 llamadas de Keisuke, además de mensajes donde le preguntaba cómo seguía, que por qué no respondía las llamadas y otras cosas, pero el que más le sorprendió es aquel que decía que estaba a 20 minutos de su casa y ese mensaje lo había enviado aproximadamente 30 minutos, eso quería decir que la persona que estaba tocando su puerta de manera ruidosa era Baji. 

La pantalla de su celular reflejo el nombre de Takemichi, sin pensarlo dos veces respondió, mientras se dirigía al baño para lavar su cara, antes de ir a ver si Baji seguía a fuera.

—Creí que no me responderías. –dijo su amigo del otro lado de la línea.

—¿Por qué no lo haría? –al fondo escucho la risa de Hina.

—Tienes el sueño pesado Matsuno, sabías que hay un loco llamado Baji Keisuke que lleva rato tocando la puerta de la casa. –bromeó —me ha llamado dos veces preguntándome que si en verdad estas en casa, en serio estabas dormido o simplemente no le quieres abrir. 

—Ya veo, así que, si es él, estaba dormido, ahora mismo iré a abrirle, gracias Take.

— Suerte, compañero, nos vemos en la noche. –necesitaría más que suerte, pensó el rubio.

Antes de salir del baño miro su reflejo en el espejo, sus ojos estaban hinchados y su cara algo inflamada. Era el momento de enfrentarse a Baji Keisuke, le iba a costar verlo y no poder golpear su cara, pero debía seguir siendo el Chifuyu dulce y alegre frente a Baji, subió la capucha de su sudadera hacia su cabeza tratando de ocultar su cabello y parte de su cara, salió del baño para encaminarse hacia la puerta del departamento. 

Al abrirla se encontró con un par de ojos marrones que lo veían con preocupación, ver su cara le daba ganas de golpearlo.

—Fuyu –el pecho de Chifuyu se contrajo al escuchar la voz de Baji.

—Baj... Kei ¿Por qué estás aquí? –que pregunta más estúpida, pensó el rubio, debía controlarse sino Baji se daría cuenta de que estaba enojado y haría preguntas.

—¿Me dejarás pasar?

El rubio se avergonzó por unos instantes al ver la sonrisa que le había dedicado el pelinegro, se hizo a un lado dejando entrar a su novio quien rápidamente se dirigió hacia la cocina, Chifuyu cerró la puerta del departamento, al entrar a la cocina vio a Baji sacando algunas cosas de una bolsa, reconoció inmediatamente el logo, era de su cafetería favorita, le había traído el desayuno. 

Baji estaba haciendo un desastre nuevamente en su cabeza y eso no le gustaba al rubio, porque lo trataba de esa manera si solo estaba con él por una apuesta, alejo esos pensamientos de su cabeza y con pasos lentos se acercó a la barra rodeándola para quedar frente a Baji, si quería que las cosas salieran a su favor debía actuar como siempre, apoyo su barbilla en sus manos para mirar fijamente a Baji, quien estaba sacando los croissants de la bolsa para colocarlos en una servilleta.

—¿Qué pasa? – Baji dejo lo que estaba haciendo para mirarlo.

—Nada, solo que mi novio es muy guapo. –la sonrisa que le dedicó el azabache hizo que el rubio se sonrojara

Happier Than EverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora