Efímero || Pablo Gavi

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Llego a casa, 22:30. A Pablo se le habrá pasado el enfado seguro, es uno de mis y nuestros defectos. Nos enfadamos por cualquier tontada, y no podemos estar sin el otro.

Aparco el coche en el garaje y visualizo que él sigue en casa. Subo en el ascensor hasta la puerta de casa y cuando llego, está todo a oscuras.

- PABLO?

Me adentro en la casa y veo que hay un caminito de velas encendidas y pétalos de rosas esparcidos por el suelo. Continúo andando, y veo como está sentado en una mesa con más decoración. Su mirada me ruegue que me siente en frente. Me quito el abrigo y las zapatillas y camino hacia allí.

- Y todo esto?- pregunto mientras agacha la cabeza.

- Quería pedirte perdón por lo de este día. Lo siento, me he pasado 100 pueblos. No era mi intención enfadarme contigo y mucho menos gritarte, es algo que no me gusta nada. Y bueno, entre Ferrán y Pedri me estaban tocando los cojones, y de ahí todo. Pero perdóname por favor, no me dejes.- ruega con esos ojos y me ha sorprendido bastante el "no me dejes".

- Molesta mucho que te hablen así en verdad, te deberías de haber puesto en mi sitio. Pero no te guardo rencor, a ti no.- veo que se le escapa una sonrisilla y se levanta para darme un beso en los labios. Me abraza y apoyo mi cabeza en su pecho.

- Bueno, he preparado la cena. Supongo que habrás cenado afuera y no lo querrás pero-

- Tranquilízate, no he cenado afuera y vengo con un hambre que me como las paredes. Has hecho la cena?

- Ehm lo he intentado. Espero que esté bueno, es algo que te gusta bastante así que.- se va rápido a la cocina y mientras le doy un trago a la copa de vino.

Trae una cacerola tapada y la deja en la mesa. Me permite abrir la tapa y veo mi pasta favorita, Pasta Alfredo.

- No-te-creo, te adoro mucho AAAA.- me pongo a gritar y él se ríe de la situación.

- Al bebé seguro que le gusta, y a ti te va a encantar.

Me sirve en el plato y pruebo la pasta. Está buenísima, tiene todo perfecto: el punto de la pasta, la salsa...

- Y qué, cómo está?- pregunta mientras se rasca la nuca.

- Está delicioso, echaba de menos comer esto. No has quemado nada no?- niega y seguimos comiendo entre risas.

Y esta sensación es la mejor, estar en casa con la persona que quieres y con un ser en tu interior. Estoy feliz, muy muy feliz.

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Capítulo bastante corto, pero prometo que el siguiente será más largo y será también el último capítulo. Gracias por las visitas y los votos✨