Capítulo 65 - Laogong te cuidará bien esta noche

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Advertencia de contenido: automutilación, sangre, intento de suicidio


Hace diez años, el 10 de noviembre, Mu Hanfeng cumplió 18 años.

En aquella ocasión, celebró su cumpleaños con algunos amigos cercanos. Un grupo de jóvenes que acaban de crecer o están a punto de llegar a la edad adulta siempre quieren fingir que son adultos. Así que se burlaron de él para convencerles y, al final, todos bebieron mucho vino.

Cuando salieron del restaurante, ya era de noche.

Todos estaban borrachos, pero era el cumpleañero, Mu Hanfeng, el que más había bebido, pero el más sobrio.

Aunque detestaba a Mu Yang, Mu Hanfeng tenía que admitir que había heredado algunas cosas buenas de él.

Por ejemplo, el talento para los negocios y la capacidad de beber bien.

Mu Hanfeng llamó a un coche para cada uno de sus amigos, los vio subir, dio instrucciones al conductor y, finalmente, vio cómo se alejaba el coche antes de marcharse solo.

Aunque era el llamado joven maestro de la familia Mu, no era más que un título vacío. Naturalmente, no habría ningún coche que lo recogiera.

Y el propio Mu Hanfeng no quería volver a casa tan pronto en su cumpleaños y arruinar su raro buen humor.

Así que no llamó a un coche para él y se limitó a vagar sin rumbo por las calles.

Había un lago en la ciudad de Yangcheng, no muy lejos de donde estaban comiendo, y mientras Mu Hanfeng caminaba, se dirigió inconscientemente hacia el lago.

En verano, este lago estaría muy animado, con mucha gente disfrutando del aire fresco y amantes susurrando dulces palabras.

Pero ahora era noviembre. Era el final del otoño en el norte, y por la noche, el viento se volvía extremadamente frío y cuando silbaba junto a sus oídos, tenía un sabor sombrío.

Mu Hanfeng continuó caminando a lo largo del lago con un viento tan sombrío, despreocupado.

Hasta que una figura delgada apareció frente a él.

La persona era realmente delgada. Mu Hanfeng, de dieciocho años, llevaba cinco años diferenciados y tenía el físico robusto y único de un Alfa en transición de adolescente a joven adulto, y al compararlo más, Mu Hanfeng sintió que podía levantar a la persona que tenía delante con una sola mano.

La delgada figura estaba tumbada en la acera junto al lago. La ropa que llevaba era muy fina, y todo su cuerpo estaba acurrucado. No podía ver la cara, sólo podía ver el cuerpo temblando incontroladamente.

Mu Hanfeng se detuvo inconscientemente en su camino.

En un día tan frío y a una hora tan tardía, estar tumbado solo junto al lago temblando así no era, obviamente, una situación normal.

Lo primero que pensó Mu Hanfeng fue que esa persona estaba enferma, y dudó sólo un segundo antes de avanzar, dispuesto a echar un vistazo a la situación y llamar después a los servicios de emergencia.

En cuanto se acercó y vio claramente el rostro de esta persona, la respiración de Mu Hanfeng se tensó inconscientemente.

Aunque la expresión de su rostro era extremadamente dolorosa, se podía decir que seguía siendo la cara de un adolescente, sólo que infantil y juvenil. Pero no podía ocultar el impacto que le producía ese rostro tan delicado.

Sin embargo, Mu Hanfeng sólo se conmocionó por un momento, e inmediatamente estabilizó su mente para observar cuidadosamente el estado del adolescente.

Solo deseo tus feromonasWhere stories live. Discover now