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La cena con los Johnson:

Dove:

James me habia invitado a una cena que sus padres habían organizado para conocerme. Estaba nerviosa, ¡Claro que si!. Sería dentro de unas horas.

Y aún no recordaba nada de lo que paso...

Estaba con las chicas hablando, cuando Azael apareció en la cafetería con su pinta de playboy y sorprendentemente con una chica a su lado. La conocía, era Sam, una chica con la que hice un trabajo juntas y nos conocimos. No somos amigas, pero si conocidas. Se sentaron en una de las mesas cerca de nosotros y Azael miró a la chica como siempre, como una de sus conquistas. Luego me miró a mi y me estremecí. Mucho.

Volví mi mirada a la comida y por suerte, las chicas no notaron a donde me miraba a Azael y me tranquilize. Por otro lado, James no vinó hoy ya que tenía una cita médica y me había escrito que a la tarde, como a las seis me buscaba en casa. Y ya le había cometado a mamá y a Landom.

—Escuché de una nueva tienda de chocolates, podríamos ir después de aquí, ¿que dicen?— yo solo asentí y las otras aceptaron con un "si".

Cuándo llegó la hora de entrar a las clases otra vez, mi profesor de Literatura habia faltado y me quedé sola. Por que como habia dicho, ninguna de mis amistades estaban conmigo a esa clase. Era un tortura total no estar com ellas. Así que decidí escribirle a James un rato, mientras me sentaba en uno de los bancos de semento que habían para sentarse. 

Pero no sentí antes de llegar. Su mero aroma y su sombra lo delataban. Alcé mi vista y lo vi con sus manos en los bolsillos y mirandome fijamente.

—¿Mmm?— cuestioné rodando los ojos.

Él se sentó a mi lado y me miró fijamente:

—Escuché que tuviste un percanse, ¿estas bien?— me preguntó.

¿Cómo lo sabia?

Solo asentí mirando hacia un lado y me fijé de nuevo en él. Abrió la boca para decir algo, pero la cerró. 

—Di lo que tengas que decir, te recuerdo que no soporto tenerte cerca— le dije rodando los ojos. 

Me di cuenta de que estaba siendo muy dura así que me disculpe.

—Lo siento— le dije—, solo es que... ya sabes.

Él asintió y dijo algo que me dejo atonita.

—Solo quería pedirte perdón por lo que te dije en la fiesta, yo estaba tomado y aunque fue verdad yo...— se detuvo cuándo vió que ponía una cara de confusión—, ¿Si sabes de que hablo, no?

—Ah... no— le di una mirada confusa y me encongí de hombros.

Él parecia átonito, como si no entendiera nada. Luego mira el suelo y quise saber de que hablaba.

—¿Dé que hablas exactamente? Es que... mi mamá me dijo que llegué a casa alterada y con el pulso en el cielo, estaba con un ataque de ansiedad y lo último que recuerdo fue haber dejado a James con su hermano por que estaba muy embrio y vomitó, ni siquiera recuerdo como llegué a casa. Perdí la memoria en unos minutos atrás. — le dije y no se por que lo hice.

Este me miró rápidamente y abrió los ojos como platos, como si estuviera esperando a que le dijera que era mentira lo que le había dicho. Después miró al frente suyo y dió un largo respiró antes de voltearse a mi.

—¿Dices que no recuerdas nada después de eso?

—Prácticamente, el doctor me dijo que recuperaré esos recuerdos en poco tiempo— le dije extrañada y ví como se tensaba—. ¿Estas bien?