Toda la tranquilidad de la vida de Clara Martin se había visto interrumpida al menos cuatro veces en lo que llevaba viviendo en Mystic Falls:
La primera vez fue cuando descubrió sus inestables poderes.
La segunda, cuando conoció a los hermanos Salva...
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La mañana siguiente fue más difícil.
Aunque así lo quisiera, Clara sabía que no podía seguir huyendo de la realidad de lo que había pasado. Había apagado la humanidad y, como consecuencia, había hecho cosas horribles. Ahora le tocaba disculparse, hacer frente a sus amigos y, más importante, a su hermana.
Cuando Klaus la acercó hasta su casa, lo único que quería era dar media vuelta y volver a entrar en su coche estúpidamente caro, para que él le abrazara y le ayudara a no pensar en el tema. Pero el híbrido tenía asuntos de los que encargarse, debía reunir a su familia. Ella no era la única que había sufrido por la muerte de Kol.
Una vez caminó hasta la entrada de su casa, los nervios la hicieron dudar. Respirando profundamente, entró en el lugar que solía llamar hogar. Dentro estaban Lydia, Allison, Scott e Isaac, quien cuando la vio llegar al salón no contuvo su mirada de odio. El rubio se levantó de su asiento con rapidez y dio pasos hacia ella con una mueca de desagrado.
-¿Qué haces tú aquí?
-Es mi casa -las otras cuatro personas se la quedaron mirando en silencio. Bien. Empezaba todo simplemente bien-. Quiero hablar con mi hermana, con todos vosotros.
-¿Has recuperado tu humanidad?
Lydia también se levantó, posicionándose al lado de Isaac. Parecía dudar en mirarla directamente, en mirarla a los ojos. ¿Tanto miedo le tenía? ¿O se trataba de asco?
-Sí. Klaus me ayudó -se mordió el interior de la mejilla, debía continuar-. Quiero disculparme con vosotros por todo... todo lo que hice estando así -gesticuló con la mano-. Por todo el daño que he causado.
Scott asintió, también levantándose de su asiento junto a Allison. Ambos compartieron miradas con Lydia, quien les asintió.
-Está bien...
-No, no está bien, Scott -Isaac le interrumpió-. Ha matado a gente. ¿Cómo podemos defender eso?
-No os estoy pidiendo que defendáis eso, pero tenéis que entender que no estaba siendo yo -eso era cierto, pero aun así no impidió las miradas desaprobatorias que poco pudieron ocultar los presentes-. No espero que me perdonéis, solo quiero ayudar. Stiles, el Nogitsune está suelto.
-Lo sabemos, desapareció al poco de tú... -su hermana fue quien le respondió, tratando de buscar las palabras correctas hizo una pausa- perder tu humanidad. Cualquier ayuda que podamos tener ahora mismo es bien recibida.
Lydia miró a Isaac cuando dijo lo último, provocando un resoplo por su parte. No estaba de acuerdo, pero poco más podía hacer al respecto.
-No te ofendas, pero no voy a confiar en ti simplemente porque ahora digas que eres buena -Isaac no lo dejó estar-. Sigues siendo... ¿Cómo lo llamaron los chupa-sangre? Una destripadora, sí, sigues siendo una destripadora.
