35 | el fin de la vendetta

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Arthur Shelby estaba vivo.

Hetty podría haber jurado que nunca había sentido tantas emociones diferentes a la vez, pero cada una quedó olvidada cuando Arthur levantó su arma, apuntó a la cabeza de Luca CHangretta y apretó el gatillo. El cuerpo del italiano golpeó el suelo y cayó muerto, dejando un tenso silencio en el aire.

Tommy rompió el silencio y señaló a los hombres de Luca—. Dile a tu gente en Chicago que Michael Gray firmará la licencia de importación a Nueva Yor. Trescientos barriles de gin inglés al mes.

—Váyanse —dijo Arthur—. Todos. Cuéntale a tu jefe lo que viste aquí. Dile que no se jode con los Peaky Blinders.

Y así se terminó. Luca estaba muerto, al igual que la vendetta. Todos estaban a salvo, y Arthur estaba vivo. Tessa corrió a abrazar al mayor de los Shelby mientras Hetty abrazaba a Finn.

El cuerpo de Luca yacía en el suelo, era un recordatorio de todo lo que habían perdido, pero en ese momento no estaban pensando en los muertos. Pensaban en los vivos, y en el futuro que todos tenían que vivir ahora que la vendetta había terminado.





—Es hermoso —dijo Polly, mirando el anillo en el dedo de Hetty—. Un hermoso anillo para una hermosa mujer.

Hetty se sonrojó y se miró los pies—. Era de mi abuela.

La familia Shelby se había reunido en la casa de Tommy y Tessa para celebrar su victoria, pero a pesar de la atmósfera explosiva, Hetty no tenía ganas de celebrar. Ella solo estuvo allí por insistencia de Mason, quien dejó en claro que no permitiría que se sintiera deprimida por más tiempo y la había obligado a salir de su habitación para asistir a la celebración.

De pie con Finn en la esquina de la habitacón, después que de Polly se dirigera a hablar con Aberama Gold, Hetty notó que Tessa y Tommy entraron en la ahbitación y se adelantó para escuchar el discurso que se acercaba inminentemente.

—Bien. Escúchenme —dijo Tommy, aclarándose la garganta—. Me gustaría decir unas palabras antes de que vayamos a comer. La última vez que estuvimos aquí... todo terminó mal.

—Sí —murmuró Arthur.

—Pero ahora estamos en un lugar más feliz —dijo Tommy, y cuando todos pensaron que iba a continuar, se detuvo—. Eso es todo. Solo me gustaría hacer un brindis.

—Espera —dijo Arthur—. Hay algunas palabras que quiero decir desde el corazón y esta vez me dejarás terminar, Tommy.

—Aquí vamos —susurró Tessa en broma.

—Como todos saben, Arthur Shelby está muerto —dijo Arthur—. Debido a eso, Tommy me ofreció una salida: una nueva identidad. Comenzar una nueva vida para mí. Lo pensé... y tomé una decisión. No me iré a ningún lado.

—No es como si te lo permitiera —dijo Mason riendo.

—Nuestros enemigos desaparecieron —continuó Arthur, con un pie sobre la mesa—. Están muertos. Todos. Por primera vez, desde que mis dos hermanos menores, Tommy y... John, mi hermano Mason y yo nos alistamos en Warwickshire Yeomnary... tenemos paz. Entonces me gustaría hacer una propuesta. Shelby Company Limited, insiste en que Tommy se tome un tiempo libre.

—Esa es una buena idea —dijo Tessa.

—Es hora de que te tomes unas vacaciones, Tom —dijo Arthur—. Levanta los pies. Pasa algún tiempo con tu esposa. La guerra terminó. Nadie quiere matarnos —Arthur levantó su vaso—. Por la paz.

—Por la paz —repitieron todos.

—Nosotros también tenemos algunas noticias —dijo Tessa.

—Tessa está embarazada —dijo Tommy.

Una serie de aplausos siguió a la revelación, y Tessa se sonrojó—. Gracias.

—Entonces un tiempo libre suena perfecto —dijo Mason—. Te da tiempo para planificar y arreglar tus cosas antes de que llegue el bebé número dos y arruine sus vidas nuevamente.

—Creo que es una buena idea —dijo Tessa, mientras la mano de Tommy apretaba su cadera suavemente—. ¿Qué dices, Tommy?

—No puedes contradecir a tu mujer, Tommy —bromeó Johnny Dogs—. De lo contrario, te dejará.

La expresión de Tommy no cambió—. Muy gracioso, Johnny.

—Está lleno de diversión —dijo Arthur—. Solo di que sí, Tom, y luego todos podremos ir a comer.

—Bien —dijo Tommy—. Tomaremos un descanso.

Entonces fueron a comer, y mientras Hetty caminaba por la cocina, Tessa la agarro del brazo—. Hetty, cariño, ¿estás bien? Tommy me dijo lo de Alfie, y yo...

—Estoy bien —dijo Hetty—. Lo prometo. Solo necesito algo de tiempo, porque acabo de perder a mi papá y a Michael en la misma semana, así que va a tomar un tiempo.

—Está bien —dijo Tessa—. Pero si alguna vez me necesitas o quieres hablar con alguien, puedes venir a verme.

Hetty asintió—. Gracias, Tess. Felicitaciones por tu embarazo.

—Gracias —dijo Tessa sonriendo—. No puedo creer que esté pasando de nuevo —pasó un brazo alrededor de los hombros de Hetty—. Pero ahora vayamos a comer, y a celebrar nuestra victoria, porque Dios sabe que podría ser la única vez que tengamos esta oportunidad.

Hetty dejó que Tessa la arrastrara hacia la mesa y se sentó con su familia a celebrar. Se sentó junto a Finn, quien continuamente le preguntaba si estaba bien, y Hetty constantemente le aseguraba que estaba bien.

Su padre tenía razón en lo que dijo, porque Hetty tenía una familia con estas personas.

Se había convencido de que Michael era el único que realmente se preocupaba por ella, pero mientras se reía con la familia Shelby, bromeaba con Arthur y Mason, y arrojaba guisantes sobre la mesa a Tommy con Finn, se dio cuenta de que tal vez estarían bien.

THE KIDS AREN'T ALRIGHT | Michael Gray ¹Where stories live. Discover now