12.2 Nunpyobeom choice

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Camina por los senderos despejados del bosque. Usados por caballos y carros transportadores. Namjoon camina en silencio y sin prisa. Tiene todo el tiempo del mundo ahora que no hay guerra. Supone que en su hogar, todo estará muy callado y será encantador de experimentar tras tanto tiempo. Toma un profundo respiro, recostándose de un árbol para descansar unos cuantos minutos. Tiene desde la mañana en este proceso.

Mira el camino por el que vino, casi queriendo volver y así conseguir a la persona que le gustaría, estuviera aquí con él. Sin embargo, se mantiene firme en volver a su casa. Su aventura terminó. Ya hizo lo que tenía que hacer y si está solo ahora, debe ser lo que el destino hizo para él.

Bastante triste y decepcionante.

En su mente plantea mil escenarios. Cada uno igual de fatalista, sino peor que el anterior a cada que insisten en surgir. Imagina a Jimin dormido en su habitación, feliz de volver a sus lujos y negado a abandonarlos; lo imagina teniendo un encuentro con ese aparente pretendiente y Alpha que quería desposarlo; lo imagina encerrado gritando por ayuda en un sótano, castigado por haber faltado a las indicaciones de sus parientes.

Que tal vez ese mismo pretendiente lo secuestro y ahora lo están buscando allá en la capital...

—Estás siendo paranoico. —refunfuña a sí mismo con las orejas caídas y la cola quieta. Su cabello largo se agita con suavidad por la brisa invernal y su gesto es uno de pena.

Tal vez no es tan buen pretendiente como se pensaba que lo era. En la vida de Jimin, es alguien que lo ayudó a ver lo animal dentro suyo, abrazarlo y disfrutarlo por un periodo corto de tiempo y ahora debe reanudar su vida enteramente humana.

Levanta la oreja derecha, escuchando el galope de un caballo en su dirección. Sus garras salen y sus colmillos hormiguean bajo la sensación de que van a morder carne. Sería un buen almuerzo. Sea quien sea que esté viniendo a solas por aquí. Es un lugar ¿peligroso? Por la probabilidad de que lobos, osos y zorros surjan para atacar, posiblemente también ladrones.

Si es un viajero solitario, es dudoso lo que puede esperar. Gira la cabeza, viendo al caballo acercarse. Apenas tiene silla de montar; la persona usa una capa oscura en la cabeza y en el animal de carga trae equipaje.

Namjoon se pone de pie y mantiene la compostura. El caballo se detiene junto a él y sus pupilas se dilatan, con el jinete bajando la capucha de capa. Jimin sonríe amplio, mostrando los colmillos y su rostro con un tenue sonrojo, sus orejas levantadas y el cabello trenzado sobre su hombro.

— ¡Pensé que te habías ido entre el bosque! No te encontraba, empezaba a asustarme.

—Tardaste mucho en salir. —defiende Namjoon y Jimin encoge de hombros.

—Hoseok insistió en darme algunas cosas. No quería soltarme—comunica con sonrisa apenada—. ¿Subes? —ofrece y Namjoon niega con la cabeza.

—Me gusta caminar.

Jimin baja del caballo, toma la rienda y camina junto a Namjoon. El tigre le da vistazos de reojo, con temblores involuntarios y siendo emocionados, incrédulo de que realmente está junto a él a pesar de sus pensamientos fatalistas de hace un instante. Jimin da un largo bostezo y Namjoon se ríe, negando con la cabeza.

—No creo haber dormido nada—admite Jimin apenado—. Los nervios me estaban matando.

— ¿Sigues nervioso?

—Un poco.

—Ya estás aquí y dudo que quieras hacer todo el camino de regreso.

—Es la primera vez que hago algo que quiero... a este nivel y... nervioso o emocionado, ambas cosas se sienten igual ahora; muy distinto a ansias de volver a casa. —responde Jimin y Namjoon enrosca su cola con la de Jimin.

Children of Winter || NamMinWhere stories live. Discover now