One shots ⇝ Harry Potter ✔

George Weasley

Elinor se sentía aturdida y apenas estaba consiente de lo que pasaba a su alrededor. Estaba entre escombros del castillo tratando de recuperar la respiración. Voldemort había retirado a los mortífagos pero no sería por mucho tiempo y ella debía reponerse antes de que regresaran.

Se puso de pie con cuidado pues aunque no estaba completamente segura, probablemente tenía un par de costillas rotas. Caminó a paso lento por el pasillo, observando que todos se reunían en el gran comedor. Para este punto no le importaba tener toda la ropa sucia y el rostro lleno de polvo, simplemente quería asegurarse de que sus amigos estuvieran bien o que al menos estuvieran vivos.

Pero apenas entró al comedor cuando vio una escena que le desgarró el corazón. Los Weasley estaban reunidos alrededor de un cuerpo, desde su lugar, Elinor identificó a Fred. Las lágrimas brotaron en silencio. Caminó con dificultad mirando a los demás fallecidos.

Era tan doloroso ver tantas muertes. Pero era mucho peor cuando los conocía a todos.

Cuando estuvo más cerca de la familia de pelirrojos, George fue el primero en verla y sin dudarlo ni por un segundo corrió a abrazarla. Ella lo recibió con los brazos abiertos y ambos volvieron a llorar. Elinor había olvidado incluso el dolor de sus costillas rotas.

George lloraba sobre su hombro sin parar, eso le rompió el corazón a la chica y no pudo más que quedarse abrazando a aquel pelirrojo. Cuando el llanto cesó se separó de la chica y limpió su propio rostro con la palma de su mano.

—Me alegra que estés bien, Elinor —sonrió apenas— quería ir a buscarte pero Fred...—

—Lo entiendo —interrumpió. George asintió— lo siento mucho, George.

—Esto aún no acaba. Ya tendré tiempo para lamentarme por esto —sonrió pero aquella sonrisa no le llegó a la ojos.

—No tienes que ser fuerte ahora, George.

—Sí, si tengo que serlo justo ahora —colocó ambas manos en los hombros de su contraria— esto aún no termina así que mantente a salvo.

—Y tu no hagas nada tonto, ¿bien?

El pelirrojo besó la frente de la chica con suavidad.

—Lo intentaré —ambos se sonrieron apenas un poco— Vamos a que te curen, te ves muy mal.

—Gracias por el cumplido, Weasley —lo miró mal.

᯽

Cuando todo terminó, hubo completa paz por primera vez en muchísimo tiempo. Elinor estaba a las afueras del castillo alejada de los demás para que no la vieran llorar. Había pasado tanto en tan poco tiempo que su mente recién lo procesaba y todo era tan doloroso.

—Te estaba buscando —escuchó una voz a sus espaldas.

Rápidamente detuvo su llanto y limpió las lágrimas antes de dar media vuelta. Allí estaba George, todo lleno de polvo y tierra, hecho un completo desastre.

—Quería estar sola un momento.

El pelirrojo se acercó un poco más hasta estar frente a la chica y se quedó en silencio un largo momento.

—Hay algo que tengo que decirte.

—Claro, lo que sea.

Elinor tomó con cuidado la mano de su contrario. Eso hizo sentir más seguro a George. Le gustaba la manera en que sus manos encajaban perfectamente.

—Yo le contaba todo a Fred e incluso cuando no lo hacía, él sabía exactamente lo que pasaba por mi cabeza. Yo nunca se lo dije pero él sabía perfectamente que yo estaba enamorado de ti —Elinor iba a decir algo, pero no lo logró— y las últimas palabras que me dirigió fueron "tienes que decirle". Y tiene razón, hoy perdimos a muchas personas, perdí a mi hermano y moría de miedo al pensar que también te podría perder a ti.

—George... —murmuró.

—Elinor —tomó con más fuerza la mano de la chica y la dirigió a sus labios para darle un rápido beso— he estado enamorado de ti desde que recuerdo. Eres la chica más linda y amable de todo el mundo. Eres demasiado inteligente y estar a tu lado me hace sentir seguro. Confío ciegamente en ti y si me pides que salte de la torre de astronomía... lo haría sin dudarlo. Te amo, Elinor. Lo hago desde hace mucho tiempo y quisiera que me des la oportunidad de ser tu novio. No sé lo que pueda pasar mañana, pero me gustaría que estuvieras a mi lado para que lo descubramos juntos.

Elinor era un mar de lágrimas, se arrojó a los brazos de su contrario para abrazarlo con fuerza.

—Claro que quiero ser tu novia —habló sin soltarlo y sin poder parar de llorar.

George la abrazó con fuerza mientras el llanto regresaba.

Había perdido a su hermano y le dolería el resto de su vida, pero también buscaría la manera de ser feliz de nuevo junto a Elinor.