¹⁴ Conocer

1.1K 132 36
                                    

Yoongi miraba con nostalgia como sus pequeños hijos corrían a los brazos de su padre desde la ventana, no queriendo cruzar palabra alguna con Jungkook, no se sentía preparado para eso, ni siquiera sabía si quería volverlo a ver algún día sin sentirse herido e incómodo, por eso en esta ocasión había preferido que Hoseok entregará a sus hijos mientras él se refugiaba en su habitación con el corazón bombeando con lentitud, como si le costará latir.

¿Cómo le haría para seguir? Su corazón estaba dañado y no sabía que es lo que haría para que volviera a sanar, la herida era tan fresca que por momentos su ánimo se caía dejándolo sin ganas de hacer nada, solo queriendo estar abrazado a sus hijos por horas y que la horrible opresión en su pecho se detuviera dejándolo respirar con tranquilidad.

Ahora sabía que amar era algo que tal vez no estaba planeado, que no solo era estar a lado de alguien y ya, abarcaba muchas cosas que lastimosamente a él le costaron y que ahora le dolían, lamentándose tanto por algo que no tenia la culpa, un error que él no cometió pero de cual se culpaba con el paso de los grises días.

No sabia cuando el sol saldría para él, lo iluminaria con sus cálidos rayos, pero sabia que cuando aquello sucediera seria la señal de que la herida estaría por fin sanada, que una sonrisa adornara su rostro y lágrimas de felicidad bajarían por su rostro.

Ese día... estaría completamente sanado.

Ahora solo lucharía por ello, ya no se deprimiría, buscará las fuerzas para ser feliz y que sus hijos se sientan orgullosos de él, un ser más fuerte que antes, que no se dejaría pisotear nunca más. Una ave aprendiendo a volar.

Una semana lejos de sus hijos sería pesado para él pero también sabía que podría trabajar consigo mismo, darse un pequeño tiempo para conocerse y tener tiempo con él mismo. Sabía que Hoseok estaría a su lado, sosteniéndolo cada vez que se quisiera caer, no dejando que se lastime más, seria su gran apoyo, y estaba eternamente agradecido, tanto que lo único que podría hacer seria llorar mientras le agradecía por tanto.

Limpió con su dorso las gotas saladas que bajaban por su rostro, una pequeña sonrisa adornando sus delgados y rosados labios, viendo como la camioneta se alejaba, perdiéndose.

Él estaría bien.

Jungkook admiraba a sus pequeños que divertidos jugaban en los asientos traseros, riendo a carcajadas por cada una de sus ocurrencias y juegos infantiles, absortos en su mundo ignorando lo demás

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Jungkook admiraba a sus pequeños que divertidos jugaban en los asientos traseros, riendo a carcajadas por cada una de sus ocurrencias y juegos infantiles, absortos en su mundo ignorando lo demás.

Le hacía sentir algo cálido dentro de su interior, él amaba con todo su ser a sus hijos, eran un hermoso regalo que el destino le había dado y también Yoongi.

— Niños, hoy pasaremos por su tío Jin al trabajo, quiere pasar tiempo con nosotros el día de hoy, ¿Están bien con eso? — miró a sus pequeños que dejaron de hacer lo que hacían para mirarlo.

— ¡Sí! — Jimin dio pequeños aplausos contento. — Hace mucho que no veo a tío Jinnie~

Con una pequeña sonrisa clavo sus ojos en Taehyung quien tenía el ceño fruncido con un semblante de disgusto, no era para menos que al pequeño casi no le agradaba Seokjin, lo sentía muy falso y alguien energético, algo que él no podía sobrellevar. Taehyung era más como su pálido padre, alguien tranquilo que solo toleraba a ciertas personas energéticas como su hermano y él tío Hobi, a quien le tenía demasiada confianza al pasar tanto tiempo con ellos y al que quería por proteger siempre a su padre cuando él y Jimin no podían.

Infiel |Kookgi|Where stories live. Discover now