Infiel |Kookgi|

¹⁷ Pasado ³

(Parte I)

Yoongi sentía como todo su cuerpo le estaba temblando de los nervios, tan ansioso y desesperado que la sensación de querer vomitar estaba sumamente presente.

Hoy daría otro paso más en su vida y no podía dejar de sentirse feliz y ansioso, seria algo maravilloso, un recuerdo que siempre estaría guardado en su memoria sin importar el tiempo transcurrido.

— ¿Estás listo? — Hoseok se acercó con una enorme sonrisa y un hermoso traje negro envolviendo su cuerpo. Lo vio dudar. — ¿Nervioso?

Yoongi soltó todo el aire que no sabía que tenía retenido mientras asentía varias veces, sentía que en cualquier momento se desmayaria o que vomitaria lo poco que pudo consumir esa mañana.

— Tranquilo, yo estaré a tu lado — No dudo en envolverlo en sus brazos. — Hoy es tu día, debes sentirte ansioso y feliz, solo eso.

— Gracias. — Yoongi sintió a su cuerpo tranquilizarse lentamente, tener la presencia de Hosoek ahí era un calmante para todas sus tormentas.

"Yo puedo, yo puedo"

Se repetía una y otra vez mientras respiraba suavemente, mirando el hermoso camino de flores que hacia un recorrido hacia el altar.

— ¿Listo? — Hoseok le ofreció su brazo y Yoongi sin dudarlo lo enredo con su mano soltando un fuerte suspiro antes de asentir.

Ambos empezaron a caminar lentamente acompañados de la suave melodía del piano que se escuchaba de fondo, sus ojos viendo a sus invitados y como estos lo miraban con admiración y buenos deseos, una sonrisa en sus rostros conmovidos.

Cerro sus párpados unos momentos antes de abrirlos y encontrarse con él, viéndolo con una enorme sonrisa en su hermoso rostro, esos lindos dientes de los que se enamoro, sus brillantes luceros más que emotivos al encontrar su mirada.

Ahí estaba, con un traje negro ceñido a su cuerpo, con una camisa blanca sin ninguna adeuda y unos zapatos a juego, con un peinado demasiado formal para alguien como él, demasiado brillante y hermoso como solo puede ser.

Su corazón bombeo con suma fuerza cuando en el momento indicado se su llegada le estiro su mano, dispuesto a lograr eso juntos, sin dejarlo caer jamás a partir se ahora, formar algo juntos.

— Te ves hermoso — Su cuerpo tembló ante esa cálida voz y aliento chocando en su oído.

Sonrió con timidez cuando dejó un casto beso en su frente, ambos listos para el siguiente paso en sus vidas, sin juegos ni engaños, sin arrepentimientos o peleas, ellos querían esto.

Ambos lo deseaban con todo su ser.

Entonces Yoongi solo pudo concentrarse en Jungkook, en sus labios moviéndose al recitar sus votos, adorandolo, tomándolo como su ser más preciado sin importarle el resto, solo eran ellos dos ahí, diciéndose cuanto estaban dispuestos a hacer por el otro, jurandose amor eterno.

— Yo, Jeon Jungkook, te tomo a ti como mi legítimo esposo, prometo amarte y adorarte, en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte nos separé. — Su dedo anular fue decorado por una hermosa argolla dorada.

— Yo, Min Yoongi, te tomo a ti como mi legítimo esposo para amarte y adorarte, en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte nos separé. — Su corazón estaba como loco mientras su mano temblorosa colocaba la unión.  — Te amo.

— Te amo, Hyung.

Yoongi sintió miles de fuegos artificiales y miles de palomas volar en su estómago cuando sus labios sellaron su promesa de amor, movimientos suaves y que decían miles de palabras.