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Seis años se han pasado desde la ultima vez que Jimin pisó Corea del sur. Pero esta vez vuelve con muchos logros y muy orgulloso de sí mismo.
En estos  largos años en los Estados Unidos no hizo nada más que trabajar, fueron años de agendas llenas para las pasarelas y entrevistas.

Si, Jimin logró sus sueños de representar a varias marcas importantes y ahora estaba listo para ignagurar su propia agencia de modelaje y marca de ropa.. No podía estar más feliz y nada podría salir mal, ¿o si?.

(...)

Al día siguiente, Jimin despertó con toda la alegría del mundo. Preparado para un día agotador y de arduo trabajo, hoy acomodarían el set de fotografías y también su nueva oficina.

Todo el edificio estaba en caos total, pero todo estaba fluyendo de la manera que el pelirojo esperaba, todo estaba quedando de la forma en que siempre soñó.

— ¡Señor Jimin, cuidado!— el pelirojo miró hacia arriba al escuchar los gritos de un hombre encargado de las instalaciones eléctricas, viendo caer uno de los reflectores que este estaba colocando en el techo del gran set de fotografías.

—¡Carajo!— dijo Jimin intentando cubrirse la cabeza con los brazos para así no salir lastimado. Cosa que no ayudó mucho ya que ese reflector que lo impactó con algo de fuerza rozó sus manos provocando un corte de algunos siete centímetros.—Estoy bien, no se precupen— habló de notar que algunos de sus nuevos empleados iban corriendo hacia el para así ayudarlo.

—¡Llamen a una ambulancia, rapido!— gritó Jennie la secretaria y amiga de confianza del pelirojo. Preocupada al ver lo ocurrido con su jefe.

—Tranquila Jennie, fue solo un pequeño corte. No seas exagerada.— habló Jimin entre risas.

—Estás sangrando, necesitas ir a un hospital—reclamó la bella mujer de largos cabellos negros con mechones blancos.

—Está bien, está bien. Solo que tu conduces, no necesitamos ninguna ambulancia.— el pelirojo sonrió al terminar la frase, así sigiendo a su secretaria hasta el carro para dirigirse rapidamente al el hospital más cercano.

(...)

—Deverias tener más cuidado en los lugares de instalaciones y construcción.—Habló el doctor que terminó de coser la herida en la mano del pelirojo.—tuviste suerte que el corte fue en la mano y no en la cabeza.

—Lo sé, tomaré en cuenta sus palabras.—contestó Jimin, levantandose de la camilla donde se encontraba sentado.—Gracias doc, debo volver a trabajar.

—No esfuerces tu herida o se volverá a abrir.— reclamó el doctor al ver que el pelirojo ya salía de la sala de emergencias.— Vuelve dentro de una semana para sacarte los puntos.

—Lo haré— salió luego de hacer una pequeña reverencia de agradecimiento.

—¡Jimin!—otra vez gritó Jennie al ver a su amigo salir de la sala de atendimiento— ¿estás bien?. Te he dicho muchas veces que debes ser más cuidadoso, ¡siempre te caes o te lastímas por ser distraido!. Ash, ¿que digo?. ¡Es mi culpa por no cuidarte más!.

—Tranquila, no tienes la culpa de nada.  Y basta de sermones, ya tuve bastante con el del doctor.—El pelirojo sonrió tiernamente mirando a su amiga.— ¡Auch!— se quejó al sentir su cuerpo chocar con el de alguien más.—Lo siento, estaba distraido ¿está bien?—preguntó y se quedó en silencio por unos segundos.—¿Jin?!.

—Si, estoy bien ¿y usted?— contestó el doctor de rostro extremadamente bonito levantándose del suelo luego de recoger unos papeles.— ¿Jimin?!... ¿Mimi, eres tú?.—preguntó está vez sorprendido.

—¡Exacto!. Tiepo sir verte Jin, veo que ya eres un doctor.

—¡Wow!, vaya que ha pasado mucho tiempo, si lo soy. Y tú todo un super modelo, te he visto en algunas revistas extranjeras que Nam trae de sus viajes de trabajo.

—Oh, vaya. ¿Sigues saliendo con Namjoon?, creo que el amor entre ustedes sigue siendo igual de intenso como cuando íbamos en la universidad.

—Claro,  nos hemos casado ya hace dos años. Tenemos algunas peleas porque siempre rompe las cosas de la casa pero sigo amandolo como el primer día.—contestó entre risas el mayor—Y hablando de el. Ahí viene.

—Oh, ¡felicidades por su boda! Y veo que no ha cambiando.—Habló el pelirojo un poco sorprendido.

—¡Wooow!. No me lo puedo creer, ¿Jimin?.—dijo el moreno pelinegro corriendo hacia la dirección del menor para abrazarlo.—¿que haces por aquí?, han pasado años desde la última vez que te hemos visto.

—Namjoon, te he extrañado. Ah, y vine al hospital por un pequeño accidente y terminé encontradome con Jin.

—Ya veo. También te hemos extrañado bro.—contestó el moreno luego de rodear sus brazos en la cintura de su esposo y darle un pequeño beso en la mejilla.—¿Quien es ella, tu novia?.—preguntó viendo hacia Jennie que estaba parada al lado del pelirojo un poco incomoda con toda esa situación.

—Ah, es verdad. He olvidado presentarlos.—contestó el menor riendo avergonzado.— Ella es Jennie, mi secretaria y mejor amiga.

—Es un placer— contestó la pareja en unisolo.—¿Quieren ir a almorzar con nosotros?— preguntaron.

—No queremos incomodar— Jimin respondió.

—No será incomodo alguno, después de todo Nam vino para almorzar cómo lo hacemos todos los día. Aveces se vuelve aburrido comer solos entre los dos.— volvió a hablar Jin.—¡vamos!.

—Está bien, será un placer acompañarlos.










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Actualizamos un nuevo personaje a la lista💖

RED HAIR.  Una historia de su primer amor.Where stories live. Discover now