Solo una noche

1 - Madurez, por Londres.

27 de agosto 2023

Paloma

Piso el suelo del aeropuerto catalán, después de hace ya casi 6 meses que no venía a la ciudad catalana. La última vez que estuve aquí fue en el último clásico, a mediados de marzo. El cual tristemente los azulgranas perdieron, burlas y más burlas de los del equipo madrileño pisaron la ciudad, desde el pitido de final del partido.

Algo de menos si que la he echado al igual que a las personas que viven aquí.

Mi melena morena invade mi cara. Me cambie el color hace ya tres meses. Lo hice ya que me recomendó mi amiga Nessa, a ella la conocí nada más llegue a Londres.

Nueva vida, nuevo pelo, nueva ciudad, nuevo aire para respirar. Mantengo contacto con todos, excepto con Pedri, y con Fer con quien poco a poco he ido perdiendo el contacto. Al principio hablábamos todos los días, hasta que dejamos de hablar hace tiempo.

Freno en mitad del aeropuerto, cojo una goma y me recojo todo mi cabello moreno en una trenza que cae por mi espalda. Me ajusto bien la trenza y salgo dispara a la entrada del aeropuerto, en la que deberían de estar mi primo y Nico esperándome.

Como siempre tengo que esperarles un rato, lo de mi primo no es especialmente la puntualidad. Nico que va detrás de él como un perrito faldero pues tres pares de lo mismo.

Me meto en Instagram para ver un poco las historias que decoran el día de hoy. Mis seguidores han aumentado bastante, sobre todo desde que se sabe que soy prima de Pablo, y desde mi ruptura con Pedri. Han aumentado los seguidores bastante, y las notificaciones se han triplicado.

Me hago una foto y la subo a mi historia, mientras les espero. Cotilleo los perfiles hasta que un claxon hace que levante la mirada del teléfono. Levanto la mirada y me encuentro a un Pablo bastante moreno y muy sonriente. Como conozco a mi primo, se que esa sonrisa es demasiado falsa y exagerada.

Detrás de él se encuentra un Nico algo enfadado, cruzado de brazos y mirando con cara de asco a mi primo. Imposible no saber que les pasa a este par de dos.

- ¿y este pelazo? - dice mi primo mirando la trenza.

- Cambio de aire - digo haciendo una mueca algo torcida y extraña - que morenos estáis ¿no? - digo tocándole el brazo.

- Si, en casa de Fer se toma muy bien el sol - dice Nico sonriente con algo de pena.

Le hago una cara tranquilizadora, abrazo a mi prima mientras él me repite una vez tras otra todo lo que me ha echado de menos. Después abrazo a Nico y nos montamos lo tres en el coche. Nico y yo delante mientras que mi primo está sentado atrás, sin para de quejarse por ir en ese lugar.

- ¿algún chico inglés por ahí? - dice Pablo haciendo un intento de cara pilla, aunque se queda en el intento porque es demasiado graciosa la cara que ha hecho.

- No, no ninguno - digo mirando por la ventana aún riéndome de su cara.

- Aunque no tengas pareja con alguno habrás... - dice Nico apartando la vista de la carretera.

- Si Nico eso si - digo sonriendo.

- Hay madre mía, la madurez de Londres - dice Pablo resoplando provocándome risa otra vez.

- Éramos pocos y parió la abuela - digo girándome a mirar la cara de Pablo.

Pongo la radio y la primera canción que suena es "Yandel 150" de "Yandel y Feid". Esta canción es bastante conocida este verano lo ha estado petando. Tarareo algunas de las partes que me suenan y que me sé de la canción. En Londres escuchaba canciones en inglés, en todas las discotecas era de lo único que se escuchaba.

- ¿porque hay un mantel puesto? - pregunto perpleja mirando la mesa, en cuanto entramos a la casa.

- Digamos que tenemos invitados - dice Pablo mirando algo extrañado a Nico.

Estos traman algo...

Pedri

- ¿a que hora dijo? - pregunto una vez más.

- Joder Pedri no das eh - dice Fer quejándose - a las 14:30 en su casa, dijo que tenían una sorpresa - dice él algo nervioso.

- ¿sabes que sorpresa es? - pregunto poniéndome la camisa.

- No... no que va, ¿porque iba a saberlo? - dice él bastante más nervioso de lo normal.

- En fin... que bien disimulas... - digo poniéndome los pantalones beige, junto con un cinturón que me regalo Paloma por Navidad.

Paloma... que decir de ella. Se fue de aquí sin siquiera despedirme aunque tampoco lo merecía... hace casi 6 meses que no sé nada de ella. Me cree una cuenta de Instagram con un nombre infiltrado para que no se diera cuenta. Pero había dos opciones:

1. Bloquea a todas las personas que no conoce.
2. O no sube nada.

Creo que optaré más por la primera, quizás me descubrió la cuenta o algo. Por lo que se de los chicos, dicen que la va muy bien por Londres, parece ser que se fue allí después de la ruptura.

Es de las únicas cosas que se. Al principio mi hermano hablaba diariamente con ella por videollamada, muchas veces estaba yo detrás de esa videollamada escuchando todo lo que decía Paloma, lo mucho que preguntaba sobre mi, que si ¿estaba bien?, ¿que tal estaba?...

Cuando acabo de ponerme los zapatos salimos de casa. Directos hacia la casa del Sevillano y del Gallego. Aparcamos en la puerta de la mansión y salimos del coche.

Llamo al timbre y segundos después me abre Pablo, quien nos sonríe y abraza a ambos. Entramos todos en la casa y les miramos algo extrañados esperando la sorpresa.

Minutos después escuchó el timbre de la casa. Estamos sentándos en el sofá de la casa, miro a Nico o a Gavi para quien de los dos se dignan a abrir la puerta. Ellos son los anfitriones u tengo pensado esperar a que abran la puerta.

- Pedri abre la puerta, por favor - dice Nico algo nervioso, tragando saliva.

Aún con un nudo en la garganta y algo nervioso me dirijo a la entrada. Abro la puerta. A partir de ahí todo es a cámara lenta, levanto la mirada y me encuentro una melena morena muy bien cuidada. Enfoco mi vista en su cara y me doy cuenta de que es Paloma...

Así que está es la sorpresa, vaya con la sorpresita de las narices...

(.....)

Me sirvo el tercer plato del día de ensalada. La ha cocinado Fer, y cómo no es extraño está súper rica. De segundo hay una merluza al horno, la ha cocina el sevillano. Últimamente está hecho un cocinillas, y la verdad es que se le da bastante bien para lo torpe que es el pobre.

Mi vista se dirige por quinta vez en toda la comida a Paloma. Con ese color de melena, y esos ojazos verdes que destacan como los que más, está guapísima. Siempre lo ha estado pero es que así está guapísima.

Nos habla de su estancia por Londres, dice que es un cambio muy grande pero que la ha hecho mucha falta para despejar la mente. Sobretodo para arreglar los pedazos de su corazón roto.

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Holii, por aquí os dejo el primer capítulo de la siguiente parte de la historia.

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Muchas gracias por las 100k lecturas que estamos a punto de llegar. Esto no seria posible sin vuestra ayuda.

Deciros que hay cambio de Portada! me la ha hecho chiarasmt y ha quedado preciosa. Muchas gracias por ellas.

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