Paloma Páez, una niña de apenas 16 años. Prima del famosísimo Pablo Gavi, futbolista famoso del FCBarcelona. Se muda a la capital catalana, para cambiar de aires. ¿Conocerá al amor de su vida? ¿Será realmente el indicado?
- Paloma, de verdad que no fue nada - dice Pedri mientras pica un poco de fresa con chocolate.
- A ver Pedri, no eres consciente del daño que me hiciste. Llevabas unos días súper raro, y cuando estoy mal, va y me salta una noticia, "Pedri y su nuevo amor" que quieres que le haga - digo mientras como un plátano.
- Pero Paloma, siempre te digo que no te creas todo lo que ves en Internet - dice Pedri, mientras sujeta mi cara entre sus manos.
- Ahora me dirás que era mentira - digo evitando mirarle.
- No, no te estoy diciendo que sea mentira. De echo me arrepiento muchísimo de lo que hice, y sé que no volverá a pasar, porque ya me arrepentí una vez y no volveré a hacerlo - dice él.
- Pero... - intento decir pero él me interrumpe.
- Ya te hice daño una vez, y no volveré a hacerlo Paloma. Te quiero, y solo te quiero a ti. Nunca he querido a nadie como te quiero a ti - dice el, mientras me toca los mofletes suavemente.
- Yo también te quiero Pedri, pero ya no sé si puedo volver a confiar en ti, como ya lo hice una vez. Mira como acabó la última vez - digo, con los ojos algo aguados.
- Palma, mi amor - dice el, aunque al momento me extraño - ¿te acuerdas de ese sueño que tuviste? - pregunta él, y yo ya he empezado a notar mis lágrimas por las mejillas -. Ese sueño que tuviste, el de nuestra boda, en el que nos casábamos, en el que teníamos un hijo, que se llamaba Martin y que era guapísimo como tu - sigue hablando - Paloma cariño, eso no fue casualidad, eso se va a cumplir - dice el haciendo que las lágrimas caigan más rápido por mis mejillas.
- Te quiero Pedri - digo mientras toco sus mejillas, y me acerco a sus labios.
A este paso ya estoy sentada a horcajadas de Pedri, y besando sus carnosos labios. Que después de tanto tiempo, sin contar ayer por la noche, los añoraba demasiado.
- Que me dices Paloma, ¿quieres volver a salir conmigo? - pregunta él mientras me agarra con una mano en la cintura y la otra en mi cuello, sin llegar a hacerme daño.
- Si, Pedri - digo sonriendo mientras me acerco de nuevo a besarle.
Pedri se tumba en la toalla, y yo encima de él mientras continuamos besándonos. Me separo de sus labios, y apoyo mi cabeza en su pecho.
- Voy a subir una foto - dice Pedri - vamos a hacernos una, que si no no tengo foto para subir.
Nos hacemos un selfie en el que Pedri me sujeta y estruja la cara entre sus manos, y yo solo sonrío y me rio a mas no poder.
- Dime por favor, que no vas a subir eso - le digo mientras me rio, y me vuelvo a subir encima suyo.
- Pero si sales guapísima - dice el, mientras pone moriros y yo me acerco a posar mis labios sobre los suyos.
- Bueno vale... - digo mientras accedo a que suba esa foto, que no me gusta.
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Me suena el movil, y se que es la notificación de Pedri. En la historia, cojo mi móvil y resubo la historia.
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Un rato después de estar dándonos varios beso en la playa, y haciéndonos varias fotos. Decidimos recoger todo y volver hacia casa, pronto será la hora de comer, y le prometimos a Nessa, que sobre esa hora la devolveríamos el coche.
En el camino de vuelta a casa, ninguno de los dos hablamos, estamos mudos. Pero ambos vamos con una sonrisa de ojo a ojo, y ambos vamos pensando en lo mismo, de eso estoy segura 100%.
(.....)
- Bájate tu, que voy a aparcar y entro a casa - dice Pedri, mientras yo le doy un beso en los labios y me bajo del coche, saco la mochila y me acerco a la entrada.
Un sonriente Pablo me abre la puerta, le saludo y le pregunto a qué se debe esa maravillosa sonrisa que muestra su boca.
- ¿Y esa sonrisa a que se debe? - pregunto con la mochila en el hombro, mientras saludo a Anna y a Nessa.
- Ya me he enterado - dice Pablo, con una sonrisa de oreja a oreja, sin si quiera cortarse un pelo.
- Vamos a ver Pablo, deja de ser tan misterioso, ¿de qué te has enterado? - pregunto algo extrañada mientras poso la mochila en el sofá.
- Joder Paloma, andamos cortitas eh, me he enterado, Instagram, Pedri... pareja... - dice él enlazando todo - estás saliendo con Pedri.
- Ah si, hemos hablado las cosas y están solucionadas, empezamos de 0, olvidando todo lo malo, y recordando todo lo bueno - digo sonriendo.
- Ay hija, estás enamorada eh - dice ahora Nico mientras me toca el hombro y me abraza por encima de estos.
Suena el timbre de la casa, y me acerco a la puerta. Abro la puerta y aparece mi nombre en primer plano, me acerco a él y dejo un beso sobre sus labios, mientras detrás nuestros oigo aplausos y vitoreos, Pedri posa sus manos en mi cintura y yo las mías en su cuello.
- Ole, ole, ole! Viva los novios - grita Nessa, pro toda la casa, haciendo que todos los presentes nos callemos - no me miréis así, me lo he aprendido en español, para cuando llegara este momento - dice ella, haciendo que todos nos riamos, por su mala pronunciación en español.
- Me la cuidas Bro - dice mi primo, abrazando a Pedri - como me alegro hermano - dice sonriendo mientras abraza a Pedri.
(.....)
- Buenas noches! - digo mientras le doy la mano a Pedri, y subo con él rápidamente a la habitación.
- ¡Con protección, y no hagáis ruido cerdos! - grita mi primo desde el salón.
Una vez subimos a la habitación, me lavo los dientes y él hace lo mismo. Me pongo algo cómodo para dormir.
Lo que significa "cómodo para dormir" es una camiseta de Pedri, y unos calzoncillos suyos. La camiseta aún huele a él, y me encanta.
Abro la cama y me tumbo en ella, pongo el móvil y cargar y espero a que Pedri venga a la cama.
- Buenas noches niña - dice él mientras se acerca a darme un buen beso de buenas noches.
- Buenas noches mi amor - digo devolviéndole el beso, mientras me tumbo en su pecho y me abrazo a su cuerpo.
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Holi! Por aquí os dejo el capítulo del día de hoy! 🩷🫶🏽