36 | EPÍLOGO |

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CAPÍTULO TREINTA Y SEIS

Días después de la muerte del señor Duffy

El día había llegado al pueblo de Adare, dicho pueblo se encontraba repleto de gente que llegaba de todas partes del mundo para presenciar el resultado del famoso experimento que se había hecho viral en toda red social y periódicos. Tal noticia había atravesado continentes y personas de alta categoría estaban llegando al pueblo para ver al señor Duffy dar su discurso de apertura y presentar a los que fueron partícipes del experimento.

La gente toma asiento, otras se quedan de pie esperando a que el gran telón se abra para que el hombre salga, y así sucede. Los aplausos lo reciben al mismo tiempo que silbidos y gritos de algunos en Adare. Aquella gente se encontraba emocionada por estar presente en dicho evento porque aquello estaba siendo transmitido a nivel mundial en las principales cadenas televisoras.

Él saluda a todos como si fuese un amigo y no un enemigo. Toma el micrófono entre sus manos y entre sonrisas espera a que el público se calme para empezar a hablar.

La gente se queda en silencio y él eleva el micrófono hasta la altura de su barbilla para empezar con el discurso que todos estaban esperando.

—Antes de empezar quiero darles la bienvenida a todos ustedes al maravilloso pueblo de Adare en Irlanda –la gente aplaude y grita–. Han sido largas semanas de pruebas en las cuales hemos visto sangre correr y cosas estropearse, al mismo tiempo en el cual hemos presenciado la muerte de algunos de nuestros participantes. Pero no se preocupen por eso, todo fue planeado y ninguno de ellos han fallecido.

La gente grita como si la noticia de que fueron planeadas las muertes fuera de alta relevancia, aquello era más que obvio y nadie se daba cuenta de que el señor Duffy es un loco que no piensa en nada de lo que hace o dice.

—Semanas largas en las cuales hemos tenido ciertos problemas con algunos de nuestros participantes porque se creían más listos que yo –dice riéndose y la gente lo imita–. Quiero presentarles a Saoirse, la mujer que encabeza este experimento –el telón de vuelve a abrir y un hombre trae a Saoirse atada de manos y con la boca cubierta de cinta–. Lamento mucho que tengan que verla de esta forma, la pobre mujer ha atravesado por mucho en estos últimos días que le es difícil asimilar la verdad del asunto.

Otro hombre sale del telón con las mismas características del que se encuentra hablando y este cuando lo ve sonríe y lo abraza como si se extrañaran.

—Señores y señoras déjenme presentarles a mi hijo el señor Duffy Junior, él ha sido participe en este experimento y con él planeamos cada uno de los pasos que se llevarían a cabo, entre esos las mentiras, hechizos y trampas para controlar las mentes de los chicos.

El público entero enloquece.

—Es honor estar aquí frente a todos ustedes, pero antes de que mi padre siga con su discurso quiero decirles que los padres de cada uno de nuestros participantes firmaron unos documentos en los cuales aceptaban dicho experimento y que no tomarían cargos legales si algo malo sucedía. Por lo tanto si ven que alguno de ellos se encuentra herido sepan que todo está controlado y que fueron atendidos por los mejores médicos del país.

El público aplaude como si aquel discurso hubiese sido el mejor del universo. Duffy Junior saluda a toda la gente y retrocede unos cuantos pasos para dejar que su padre vuelva a tener la atención ante el público.

—Los resultados han sido exitosos y quiero compartir con ustedes que la magia ha llegado a un punto en el cual ha sido controlada. El objetivo de este experimento fue para comprobar si la nueva generación de hechiceros, brujos, hombres lobo y vampiros podían compartir tiempo juntos sin matarse al instante, y créanme que lo hemos logrado.

Adare ✔️Where stories live. Discover now