☘︎Eʟ ᴅᴇsғᴏʀᴛᴜɴɪᴏ ᴅᴇʟ ᴘᴀᴛᴏ☁︎

☢︎︎017☘︎

Apesar que la reina tenía estaba en una situación bastante cómoda y calmada, Tubbo y Ramboo eran lo contrario. Tubbo parecía un perrito rastreador mientras olfatiaba el aire en busca de nuevamente ese dulce olor a flores mescladas con el olor de su hijito.

También se podía oír a Tubbo insultar y maldecir cada que perdía el rastro ya que el olor a alcohol le empezaba a llegar por el fantasma alcoholico. El olor a vino o alguna bebida alcohólica empezaba a molestarle a el pequeño cabrito y eso más su pánico creciente no era una buena idea.

Aunque Ramboo le decía que se mantuviera calmado y siguieran buscando eso ni de coña hará a Tubbo calmarse y tranquilizarse. Los olores del bosque, de su hijo, flores y el vino le empezaron a marear. Demaciados olores para cuando quiere rastrear solo uno.

— Mierda! Ugh extraño a mi pequeño Micheal...— y ahí iba otra ves con sus llantos leves por su hijo que siertamente está en las mejores manos posibles. Iba a seguir caminando mientras trataba con toda su fuerza y paciencia de no tratar de pegarle al aire porque a los fantasmas no se les puede pegar.

Siguieron caminando hasta que el cabrito paro en seco, quedando estático mientras su nariz se movía levemente al reconocer un aroma que extrañaba y reconocería al instante. Su madre estuvo por aquí! Rápidamente se separó de su esposo y su fantasmal padre para correr al corazón del bosque algo cegado por el olor a su madre.
Se alejó bastante de su esposo el cual lo perseguía con una gran diferencia de distancia, pero eso no le interesaba a el cabrito.

Corria hasta casi caerse de cara en el suelo gracias a las raíces de los árboles, apesar de tener aunque sea una mínima maldita esperanza de que lo encontrase ahí con su hijo en brazos saludándole. Pero su suerte es una mierda asique no encontro a su madre si no a un ser humanoide de slime que lloraba levemente.

Lo miro con desinterés, desconoce casi por completo a el chico slime que era colega y amigo de su mamá. Pero puede asegurar que huele a esta, un poco más mesclado con el olor raro de su masa pegajosa pero olía a su mamá. Asique sin ningún problema se le acerco en busca de información.

— Slime no?— dijo de la nada estando en frente del chico slime el cual casi se hace una masa viscosa del susto.

— Tubbo de Snowchester? Que haces aquí?— pregunto curioso el slime ya que no tenía idea que los miembros del Dsmp estaban ahí con el dueño de Las Nevadas.

— Yo vengo a ver a mi mamá y tu hueles a ella, la has visto slime?— Lo miro con una mirada que lo inspeccionaba.

— Oh! Quackity de Las Nevadas! Si lo eh visto pero ... No lo eh visto ya que me perdí en el bosque en busca de alguna decoración para su casa!— dijo tapándose la cara de vergüenza, mientras soltaba lágrimas espesas de slime.

— Uh y desde cuándo te perdiste?— sus dudas eran muchas más de las que decía. Osea! Como quieren que no pregunte cuando el slime por cosas de la vida estaba vivo y ya se encontró con su madre!?

— Desde creo y ayer Tubbo de Snowchester, podrías llevarme con Quackity de Las Nevadas?— Dijo mirándolo con súplica, pensaba rechazar pero... Y si ese slime reconoce el lugar en algún momento y lo guía a su madre? Sería usarlo y aprovecharse de su inocencia para conseguir una cosa pero... Por su madre hasta literalmente daría de sacrificio a su padre para que vuelva a su lado aunque sea como fantasma.

Acepto ayudarle con rapidez y desespero algo disimulado, luego llegó su esposo el cual tenía muchas hojas y ramitas en el pelo alvino y azabache que poseía, además que su cara estaba algo golpeada levemente y con algo de rajuñones leves.

Talves correr en medio del bosque midiendo como dos metros no era la mejor idea de la vida, más si estás preocupado por tu esposo impulsivo y aveces agresivo por sus nervios. Solo por eso corre en el bosque, si no fuera por su esposo el cual es más bajito que el y es más hiperactivo no tendría tantos problemas con los árboles y sus ramas.

— Tubbo! No corras así denuevo!— dijo el híbrido de Enderman mientras recuperaba algo el aire. Parece que tendrá que acostumbrarse o mejorar su capacidad física para evitar quedarse sin aire.

— Sisi! Pero encontré a el chico slime y puede que sepa dónde está mi madre!— dijo moviendo su pequeño rabo que estaba escondido en sus tantos chalecos y chaquetas por vivir en el frío.

Eso sí le dio algo de nervio a Ramboo, por más que su querido esposo le dijera que el dueño de Las Nevadas es alguien con gran corazón y amable podría decir que dudaba bastante eso, pero es el miedo hablando por el, ya que también quere ver eso que su esposo dice. Pero su suegro fantasma no le ayudaba en absolutamente nada, lo llenaba de más nervios y casi pánicos.

Le decía que el peli azabache era otro chiste con respecto a alejados de sus familiares o los que considere familiares. Mirándolos fríamente jusgandolos y si no le agrada alguna de sus cualidades o comentarios simplemente era no y fin de la discusión.
Le daba miedo que no le callera bien a su suegro que no es un alcohólico anónimo. Y si le decía que se divorciara de su querido Tobías? O que solo lo acepte por los tantos ruegos de su esposo y porque su nieto se le apega a él por su plumaje dorado?
Aunque no sabe si es sierto, no tiene la menor idea de si la madre de su esposo y dueña de Las Nevadas tenía plumas doradas o algo.

Pero Tubbo noto rápidamente la idea de Jschlatt, molestando a su esposo lo pondría en un pánico que lo dejaría en cierta forma "desmayado o dormido" y eso lo aprovecharia en algo que seguramente no le gustará para nada a nadie. Asique fue y abrazo fuertemente con su fuerza a su esposo, talves fuera más pequeño pero, él podía cargar a su esposo todo el día si es que están en un lugar con agua o pequeñas lagunas no profundas. Todo eso para que no se lastime o le pase algún percance.