NO QUIERO SER CARNE DE CAÑÓN

CAPÍTULOS DEL 407 AL 412

CAPÍTULO 407. EL REINO SECRETO ESTÁ A PUNTO DE ABRIRSE （1）

Después de charlar un rato en la sala, todos se marcharon.

"Chen Mu", llamó Wu Feng perezosamente, con los brazos cruzados, deteniendo a Mu Chen.

"Senior Wu, ¿hay algo que pueda hacer por ti?" Mu Chen se dio la vuelta y preguntó respetuosamente.

"Tu encanto es realmente grande. No sólo atrajiste la atención del Maestro de Torre Jiang , sino también del Maestro de Torre Ge", dijo Wu Feng con una sonrisa.

Mu Chen respondió con impotencia: "Señor Wu, me halagas mucho. Ambos Maestros de Torre vinieron a visitar al Maestro de Torre He Xian. ¿Qué tiene que ver conmigo?"

Wu Feng rió entre dientes y se inclinó más cerca del oído de Mu Chen, susurrando: "¿Sometiste el Fuego Extraño dentro del Reino Secreto?"

Confundido, Mu Chen preguntó: "Senior Wu, ¿de qué estás hablando? ¿Qué fuego extraño? ¿Qué relación tiene conmigo? Si yo tuviera un fuego extraño, me habría quemado hasta la muerte hace mucho tiempo."

Wu Feng desestimó las palabras de Mu Chen y dijo: "Tienes mucho talento. ¿Cómo habrías podido morir tan fácilmente?"

Mu Chen miró a Wu Feng inocentemente y dijo: "Senior Wu, ¿has entendido algo mal? No se me puede llamar talentoso."

"Entonces tómalo como si lo hubiera entendido mal", se rió Wu Feng.

"Señor Maestro de Torre, un mocoso sospecha de usted", dijo impotente el espíritu de torre.

Si sospechaban de él, que así fuera. No era para tanto.

El Reino Secreto de Tianji normalmente permanecía abierto durante tres meses, pero el tiempo dentro era diferente al de fuera. Tres meses dentro era igual a tres años fuera.

Si entraba y salía después de tres meses, sería al menos un Maestro Marcial de cinco o seis estrellas. Con su habilidad, incluso un santo marcial ordinario no sería su rival. Llegado el momento, podría ir a cualquier parte del mundo. Lo más importante era entrar primero en el Reino Secreto.

Después de deshacerse de Wu Feng, Mu Chen continuó caminando hacia su residencia.

"Señor Chen, tengo algo que discutir con usted. ¿Podemos encontrar un lugar para hablar?" Jiang Feng apareció de repente.

Mu Chen sintió que los ojos de Jiang Feng parecían estar llenos de más asombro hacia él. "Señor Jiang, ¿qué ocurre?" Preguntó Mu Chen.

Fueron a una habitación tranquila.

"Pensé que nuestro trato ya había terminado." Mu Chen miró fríamente a Jiang Feng y dijo.

Jiang Feng se disculpó y dijo: "Lo sé. Te gusta mantener todo en secreto, pero tengo asuntos importantes que discutir contigo."

Mu Chen asintió y dijo: "¿De qué se trata?"

"Shi Jingtian es uno de los socios de Zhuang Jin. Zhuang Jin y Zhuang Yu son gemelos. Sus vidas se oponen a la de Bai Yanxing. Zhuang Jin tiene cinco compañeros, y Shi Jingtian es el más débil", dijo Jiang Feng.

Mu Chen se sorprendió y preguntó: "¿Shi Jingtian es el más débil?"

Jiang Feng asintió y dijo: "Sí, yo tampoco podía creerlo, pero según la investigación, así es. Zhuang Jin tiene dos santos marciales a su lado."

Los ojos de Mu Chen se llenaron de tormenta. "¿Cómo pueden ser tan fuertes?"

Jiang Feng suspiró y dijo: "Hace doscientos años, alguien del Clan Destino heredó cinco torres espirituales de la tierra extranjera. Las cinco personas que las heredaron son ahora santos marciales, y no son santos marciales débiles."