Un Amor Peculiar

Capitulo 43

Lucían estaba encantado con el hermoso lugar, habian pedido el platillo especial que contaba con el filete migno con salsa de brandy y mostaza que según Lucían era una delicia.

_. Como conociste este lugar?... Pregunto curioso.

El chef es un viejo amigo y lo contacte comento mientras comía su plato. Lucían asintió con una sonrisa y siguió comiendo.

Media hora después terminaron de cenar, y se dedicaron a disgustar un delioso postre de Torta Caprese que habia dejado imprecionado a Lucían. Jamás había probado algo tan delicioso.

--- Waauu este postre esta delicioso---

Alago con una sonrisa mientras aplaudía como un niño haciendo sonreir a Alessandro amaba todo de Lucían parecia un niño que busca ser mimado y amado, lo hacía recordár asu amado sobrino. Sin darse cuenta tenia una mirada sería y triste haciendo desaparecer el brillo de sus ojos.

-- Hey--.... No, no te pongas así perdaname no era mi intención solto con preocupación el sabia por lo que estaba pasando Alessandro y cuanto había sufrido.

El mencionado lo tomo de su mano y lo vio a los ojos dándole una pequeña sonrisa. Lucian quiero agradecerte por estar ami lado en mis peores momentos eres una persona maravillosa, el ser mas lindo y brillante que ilimina mis días por más grices que sean, apesar que al principio fui malo con tigo te agradezco por no odiarme y brindarme tu amistad, pero esta noche te traje aquí porque tengo algo que decirte.

Lucian estaba con una bella sonrisa timida y sus ojos brillantes, jamas nadie lo habia alagado asi y se sentía tan bien, tan feliz de saver que Alessandro lo viera de esa manera que su corazón palpitaba como que si se le hiba a salir en cualquier momento, pero el no quería ser solo su amigo, --desecho ese pensamiento-- y sonrió grande, el era feliz si Alessandro lo era siendo solo un amigo.

-. No tienes que agradecer Alessandro tu eres un gran hombre y apesar que no empezamos de la mejor manera ahora estamos bien, olvidemos el pasado y enfoquemonos en el presente.

Alessandro sonrió y le dio un pequeño beso en la delgada mano haciéndolo sonrojar, gracias Lucían eres maravilloso pero quiero que sepas que ya no quiero ser tu amigo.

Lucian intento apartar su mano de la  de Alessandro, su sonrisa desapareció y sus ojitos se aguaron, era obvio que ya no serían amigos si eyos eran tan diferentes pensó, ademas Alessandro ya estaba bien ya no necesitaba de el. Entiendo Alessandro solto casi en un susurro, quería salir corriendo, encerrarse en su departamento y echarse asu cama a llorar.

Alessandro le limpio una pequeña lágrima traicinera que se le salío y se levantó para ponerse de rodillas frente a el. Cariño no llores quiero que sepas que no quiero ser solo tu amigo, quiero ser alguien especial para ti, alguien en quien confies y ser tu apoyo cuando mas lo necesites, quiero poder ser yo quien este para mimarte, abrazarte y amarte siempre. ¿Lucían me arias el honor de ser mi novio?...pregunto con una sonrisa. En ese momento salió un joven con una guitarra y empezo a tocar una bella canción romántica, el chef salió con un pastel de corazón y otro empleado con un ramo de girasoles mas una pequeña cajita de terciopelo azul.

Lucian estaba llorando de la felicidad se sentia tan especial, jamás imajino que alguien lo amaria e hiciera una propuesta tan romántica era lo mas hermosa que le habian hecho en su vida. - - Si acepto - -  dijo con una sonrisa mientras lloraba de felicidad.

Alessandro sonrió y se acercó a limpiarle las lágrimas, luego tomo la cajita azul y saco un par de anillos de promesa de oro. Eran bellísimos el de Lucian era como una enredadera con un diamante en forma de corazón color menta pastel y el de Alessandro igual una enredadera pero con pequeños diamantes encrustados. Toma la mano izquierda de Lucían y se lo puso en el delgado dedo anular dejando un beso. Lucían copio su acción y le puso el suyo en la misma mano.

Ambos sonrieron feliz y cellaron su promesa con un tierno y delicado beso haciendo que los presentes aplaudieran y los felicitaran con emoción, habia sido una gran propuesta y el dueño del restaurante que es el chef estaba feliz por su amigo, deceandoles felicidad.

Media hora después iban en la camioneta rumbo al departamento de Lucian. Alessandro estaciono afuera del viejo edificio y salieron. Lucían bajo con su enorme ramo de girasoles y entraron al lugar tomados de la mano. Subieron al ascensor y salieron al pasillo con unas paredes bastante descoloridas. Llegaron al departamento 28 abrio la puerta y entró dándole paso a un pequeño lugar bien ordenado con paredes celeste pastel y algunas decoraciones con póster.

Alessandro era la primera vez que entraba aun lugar asi se sentía raro, incluso su baño era mas grande que eso. Lucían lo vio y se avergonzo savia que Alessandro venía de una familia multimillonaria lleno de lujos y dinero, no estaba acostumbrado a este tipo de lugar.

__. Lo siento si no es de tu agrado pero es lo único que tengo dijo tímido con sus mejillas sonrojadas.

Alessandro se acerco y lo tomo de la manos con delicadeza como si tuviera miedo a romperlo.

__. Hey no digas eso bebé, esta hermoso es pequeño pero acojedor, no te sientas mal, acariciando su mano.

Lucían sonrió y se paro de puntitas para darle un pequeño beso que se fue tornando caliente a medida que avanzaba. Alessandro lo acerco y lo tomo de la cadera para profundizar el beso.

Se separaron con la respiración agitada viéndose a los ojos, el ambiente era tenso, sintiéndose la atracción sexual.

__. Lucían no quiero que agamos algo que no quieras, puedo espera el tiempo que sea necesario informo acariciando su pequeña cintura, el mencionado sonrió grande amaba esa parte de Alessandro el era hermoso en todos los sentidos, lo respetaba y amaba en todo momento.

_. Lo deceo Alessandro deceo ser tuyo por completo aclaro volviéndolo a besar.

Alessandro se lo llevo a la habitación y lo acostó con delicadeza en la cama. Empezo a besar sus mejillas rosadas, nariz y frente demostrado su amor.

Poco a poco empezo a quitarle la blusa zatinada color rosa golf que traía, desabrochando botón por botón para dejar suaves besos en su piel blanquecina haciendo gemir al joven.

Después de quitarle la blusa empezo a desabrochar el pantalón negro de vestir, poco a poco la ropa desapareció dándole paso a dos cuerpos denudos profesandose amor eterno, aunque tendrian un largo camino por recorrer, su amor es puro y verdadero, logrando sobrepasar los obstáculos.