Capítulo 29: Home

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Todo se quedó en silencio durante unos segundos, pero para Killer fueron eternos.

El tiempo se detuvo para todos y Killer pudo analizar con toda la paciencia del mundo a su familia.

Outer, él también presentaba fracturas igual que él, en toda la extensión de sus mejillas, alrededor de sus cuencas, cuello, brazos y piernas, algunas pequeñas y otras muy extensas.

Sin embargo, a pesar de lo mucho que había cambiado.

Lo reconocería en cualquier momento.

Su pequeño hijo, Noir. Había crecido tanto, ya no era un bebé, ahora tenía la misma estatura que Shino, y hasta se atrevería a decir que estaba un poco más alto.

Las marcas en sus mejillas simulando ser lágrimas cayendo en forma de estrellas fugaces aún prevalecian, pero sin duda, lo que más le llamaba la atención era su alma.

Le recordaba mucho a la suya, la que tenía antes de que le arrebataran su DETERMINACIÓN. Pero en vez de ser un sencillo círculo esta tenía forma de un espiral con anillos amarillos rodeandolo, le hacia recordar mucho a la forma de un agujero negro.

Y finalmente su pequeño bebé, su cachorro, Crescent.

Era más pequeño que Noir, eso sin duda. Pero ya podía caminar y mantenerse de pie el solo, tenía la estatura de un bebé humano de tres años.

El color de su cuerpo... Tan oscuro, le hacía recordar mucho a él. A Nightmare.

Se sentía celoso, su bebé no había sacado características suyas, todas y cada una eran de su padre.

Si acaso podría decir que él heredó sus marcas de las lágrimas, pero aún así ni siquiera eso le daba un parecido cercano a él.

El color de sus ojos.. De las marcas alrededor de sus cuencas, del color de sus huesos y sobre todo, de la marca en su frente.

Una luna creciente.

No había duda... Era su bebé.

El tiempo volvió a correr de nuevo para todos cuando sintió como alguien le tocaba la pierna.

Al voltear a ver hacia abajo pudo verlo, pudo ver a su cachorro más pequeño alzar sus manitas hacia él e intentando ponerse de puntitas, haciendo soniditos de esfuerzo y pucheros.

Killer, de forma inconsciente se arrodilló frente a él, estando cara a cara y sintiendo como sus pequeñas y tiernas manitas se aventuraban por toda la extensión de su cara. Viendo con curiosidad cada una de sus facciones.

—... ¿Ba... Babá?— Preguntó con ojos tiernos llenos de curiosidad.

Sin poder soportarlo, Killer se abalanzó sobre el abrazándolo fuertemente, sintiendo como su corazón se hacía añicos. Al fin podía tocarlo.. Podía sentirlo.

Allí estaba, su pequeño cachorro, al fin lo tenía entre sus brazos.

—Crescent... Mi bebé... —murmuró en bajo, sintiendo como sus mejillas se llenaban de lágrimas y escuchando como su bebé comenzaba a emitir pequeños sollozos, su corazón no estaba soportando tanto.

—¡Papá! —escucho a su otro hijo gritar su nombre, sintiendo como unos brazos le rodearon. Noir también se lanzó a abrazarlo. Y como pudo libero uno de sus brazos para abrazarlo también.

—Killer... —escucho como le llamaban, y cuando alzó la mirada sintió como Outer le dio un beso en su frente. —Gracias... Gracias por despertar —sonrió al borde de las lágrimas. Lanzándose a abrazarlo también.

La familia se quedo allí durante un buen rato, entre sollozos y abrazos...

Le dieron la bienvenida a Killer, otra vez.

...

. . .

.  .  .

—¡Killer! —gritó Geno corriendo con su bebé en brazos.

—¡Geno! —respondió el esqueleto sonriendo mientras cargaba a Crescent.

Ambos esqueletos se encontraban en un parque de la Omega, habían pasado tres días desde que Killer había despertado y con el primero con quien quería hablar era con Geno.

—Geno... Yo.. Te quiero agradecer —comentaba Killer. Ambos ya se encontraban sentados en una banca del parque mientras veían a sus hijos jugar.

Geno había traído a Shino y Killer a Noir, ambos estaban muy felices y entretenidos mientras jugaban a las carreras con caracoles.

—¿Hm? ¿Por qué? —preguntó Geno, acariciandole la espalda a Salvage, quien estaba dormido en sus brazos.

—Por avisarle a Toriel sobre mi situación... Tengo recuerdos muy borrosos cuando estuve muerto, entre ellos puedo verla a ella, llegó en el momento justo —comentaba, mientra veía a Crescent en su regazo.

—Toriel fue solo el último empujón que necesitabas, pero a quien deberías de agradecer es a Outer —Killer volteo a verle con curiosidad. —... ¿No te lo han dicho? Gracias a él es porque estas vivo. Reaper me lo contó, cuando estaba a punto de llevarte él comenzó a revivirte, te dio parte de su alma para estabilizarte y cuando finalmente lo logró Toriel finalmente hizo que volvieras a respirar. Si no fuera por él no estarías aquí.

Killer de quedó callado y pensativo analizando las palabras de Geno.

—Outer... Él... Nunca me dijo nada sobre eso —dijo pensativo.

—Bueno... Supongo que el contarte sobre esto no era una de sus prioridades —comentó Geno, clavando su vista sobre Crescent. —por cierto... Se parece mucho a Nightmare.

—Ugh, ni que lo digas, salió igualito al papá —comento viendo a su pequeño cachorro.

Crescent también volteo a ver a Killer e instintivamente se acurrucó en su pecho, causando que el esqueleto de lágrimas carbón también lo abrazara con la misma intensidad.

—Pero... A pesar de que se parezca tanto a él aún así lo amo, es mi hijo y jamás lo cambiaría por nada en este mundo —aclaro sonriendo, acomodando a Crescent a pesar de que este aún lo seguía abrazando.

—Se nota que sufrió mucho por tu ausencia, los cachorros siempre ocupan del calor y el olor de su madre —dijo Geno sonriendo enternecido.

—De hecho, Outer me contó que fue muy difícil criarlo mientras yo estaba en coma, en todo el año que yo no estuve para mi bebé, Crescent lloraba sin parar, la única forma de calmarlo era ponerlo en mi regazo para que pudiera dormir en paz —Killer acaricio suavemente el cráneo de su bebé. —Probrecito, sufrió mucho por mi culpa.

—Tuya no, sino de ya sabes quién —Geno vio a su amigo y este asintió frunciendo el ceño. —Pero me alegra saber que estás bien y ahora podrás seguir disfrutando del crecimiento de tus hijos, imagina que hubieras despertado veinte años después.

—Uy no cállate los ojos —Killer abrió sus cuencas alarmado. —Que la boca se te haga chicharrón, si pasaba eso me volvía a infartar.

Ambos amigos rieron durante un rato y posteriormente siguieron su conversación con temas triviales hasta que se hizo tarde y se tuvieron que despedir.

Killer volvió a casa junto a sus hijos y al entrar allí estaba Outer, preparando la cena. Desde que había despertado el aún se encargaba de hacer las labores pues sentía que Killer aún estaba demasiado frágil como para hacer las tareas domésticas.

—Ya volvimos —hablo Killer cerrando la puerta detrás de el y dejo a Crescent en el suelo, quien con pequeños pasitos de acercó a su otro papá con lenta rapidez para saludarlo.

—Bienvenidos —volteo Outer y le proporciono una calida y suave sonrisa.

Sentía... Cómo si volviese a estar en casa.

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⏰ Última actualización: Feb 29 ⏰

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