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، 🌼 : Capítulo 25

Jungkook siente una presión en su pecho junto con un calor abrumador que recorre su cuerpo, está alerta por cualquier cosa que pase. Frunce el ceño y mira a su alrededor, ¿por qué mierda se siente así? Todos sus sentidos se ponen alerta al instante, puede escuchar los pasos en el pasillo correr, carpetas ser movidas, el pequeño clip que ha caído al suelo, el vaso de café que cayó encima de uno de sus empleados, antes de poder moverse su móvil suena, lo toma rápidamente y ve el nombre de su omega iluminar la pantalla.

—Amor. ¿Qué... —habla, pero el gemido de Jimin lo calla.

—C-Celo alfa, d-duele.

Apaga el aparato y sale corriendo.

Mientras tanto Jimin balbucea al móvil apagado quejándose al no obtener respuesta por parte de su alfa, han estado ocupados como para olvidar ese pequeño detalle, por el tiempo que han estado juntos y por ser destinados sus celos están sincronizados.

El pequeño omega cierra los ojos y gime restregándose en las sábanas, sus piernas se encuentran empapadas en lubricante y el calor que siente es insoportable.

La puerta es abierta de un golpe, Jungkook está agitado y sin aire por haber subido rápido las escaleras, aún así cuando ve a su omega con solo unas bragas negras en medio de la cama pidiendo por su nudo corre hacia él. Empieza a desvestirse hasta solo quedar en bóxer, se sube encima del omega sin llegar a lastimarlo.

—Alfa, por fa-favor —lloriquea restregándose necesitadamente en él.

—Te haré sentir bien.

Jimin lo toma del rostro para besarle, siente la piel caliente de Jungkook en la palma de sus manos, gime porque sabe que su alfa está en celo al igual que él, tiene que ser bueno, pero en realidad Jungkook quiere satisfacerlo a él.

El alfa besa su cuello donde la marca descansa brillante por el sudor que emanaba su cuerpo, chupa una porción de piel por su clavícula a la vez que su mano derecha baja para introducirse dentro de su ropa interior que ahora estorbaba. Acaricia su miembro duro que pedía atención, sube y baja lentamente perdiéndose en los gemidos que salían de su boca, pero Jimin quería a Jungkook dentro de él ahora mismo si no se desmayaría.

—¡Hazlo ya! —Jimin grita echando su cabeza hacia atrás.

Dos dedos entran de golpe en él callando sus ruidos, una cosa era que Jimin amaba los dedos de Jungkook el maldito sabía muy bien como usarlos. Jungkook lo sigue preparando haciendo tijeras y doblando sus dedos en su interior, otros dos son agregados. Cuando siente que es suficiente los saca, el omega se queja y eso hace que ría.

Quita su braga empapada y la tira por algún lugar de la habitación, el aprovecha para quitar su bóxer para liberar su erección, se acaricia echando la cabeza hacia atrás, solo lo hace unos segundos para después volver a meterse entre sus piernas de nuevo, besa su mandíbula y sin aviso entra.

Los dos gimen por el contacto y porque ya lo necesitaban, Jimin se aferra a los brazos fuertes del alfa, empieza a moverse cuando Jimin le besa la mejilla y susurra un pequeño "Hazlo ya". Las estocadas empiezan suaves como si fuera a lastimarlo, le gusta cuidar de su pequeño.

Los gemidos de ambos aumentan, el punto de Jimin siendo abusado por el pene de su alfa y Jungkook porque Jimin lo estaba recibiendo bastante bien. Cambian de posición, el omega queda encima del alfa, con sus manos instaladas en su pecho da pequeños brincos mientras que Jungkook da una que otra bofetada a sus glúteos, ninguno reprochaba porque algunas veces lo habían hecho o mejor dicho todo el tiempo que podían.

—Ya casi lle-llego —sus movimientos aumentan gracias a la ayuda de Jungkook que lo toma de las caderas y hace de ellas lo que quiera, dejando marcas a su paso.