don't run away; markson/jackbeom

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"Era tarde..."

Sus pulmones ardían como nunca ante su respiración agitada, pero la carencia de oxígeno en su sistema era el menor de sus problemas, en ese instante, lo único que podía preocuparle era encontrar a aquel muchacho de rostro angelical entre el mar de multitud que lo rodeaba. 

Sin embargo, la parte pesimista de su cabeza comenzaba a comparar sus esfuerzos  al mismo nivel de buscar una aguja en un pajar. 

No creyó que fuera tan difícil encontrarlo, en su momento menos delirante, lo creyó posible, pero se dio cuenta de su error cuando el nombre de Jackson apareció en su pantalla:

Gracias, por todo lo hermoso, por todo lo aterrador y por todo lo que me hubiera gustado ser contigo. -JW.

"Sí, ya era demasiado tarde".

Jackson se encontraba en la azotea del edificio fumando un cigarrillo, observando el cielo nocturno de Beijing frente a él, su piel estaba sonrojada por el clima frío, pero eso era algo que no le importaba en lo más mínimo. 

Un Namjoon preocupado lo miraba a la distancia, si bien, los primeros meses luego de que Jackson regresara a China no fueron los más fáciles, esperaba que su amigo mejorara con el tiempo, pero nunca habría podido predecir lo que pasaría los días posteriores. 

Al inicio fueron depósitos sospechosos en sus cuentas de banco, después, el nacimiento de rumores sin sentido en el mercado japonés, lo que retrasó en gran medida su incursión en los negocios en esa parte del mundo, y, para rematar, los constantes envíos de flores para Jackson, cada uno con un mensaje diferente que lo hacía perder la compostura.

Eran claras burlas hacia Jackson, y era obvio de quién se trataba. 

—¿Qué acaso ese anciano no tiene nada mejor que hacer?- habló Namjoon con irritación en su voz mirando el nuevo depósito que acababa de hacer en la cuenta de Jackson. 

El padre de Mark era asquerosamente rico, el depositar 100,000 dólares mensualmente, ya se había hecho parte de la rutina cada vez que realizaban la contabilidad de la empresa. Era una burla directa, Jackson lo sabía perfectamente, la peor parte, era que funcionaba; Jackson se preguntaba constantemente si realmente era así de insuficiente, ver ese depósito mensual en su cuenta junto con los arreglos florales semanales y los estúpidos mensajes ofensivos, a pesar de ser consciente de que se trataba de una provocación directa, dejaba que lo desequilibraran por completo. 

Pero al menos ya no terminaba en un hospital por los ataques de pánico, ahora simplemente se había acostumbrado a recibir un desequilibrio en su vida constante, ya lo había normalizado.

No obstante, esa noche Namjoon decidió revisar el último ramo de flores que había recibido Jackson, dándose cuenta que no se trataba de un mensaje común y corriente, esta vez, se trataba también de una fotografía, por lo que rápidamente subió a revisar a su amigo.  

—Lo viste, ¿cierto?- murmuró Jackson con su cigarrillo entre los labios, Namjoon soltó un suspiro.

—¿Cómo quieres proceder, Jack?- el chino sonrió, soltando una risa sin humor. 

—Lo que menos quiero es meter en problemas a Mark, especialmente porque será padre en poco tiempo.- Namjoon asintió, mirando la fotografía entre sus manos, era un ultrasonido, junto un aviso de hacienda, su empresa se sometería a una auditoría debido al aumento repentino de sus ingresos los últimos meses por los malditos depósitos del señor Tuan. —Además, el problema no es directamente con él, y ya que ciertamente no poseo un juicio racional en este momento, creo que lo más prudente será dejar esto en tus manos y la de los abogados.