; nine ;

308 48 13
                                    

Maratón 1/3

–Mis padres esperan que me case, pero...- Jackson comenzó a reírse fuertemente, provocando que Mark frunciera el ceño confundido. –What the heck?

–Lo siento, hyung. ¿De verdad tus padres siguen creyendo que el matrimonio trae la felicidad a todo?- Mark suspiró cansado. –Escucha, no culpo a tus padres, solo quieren lo mejor para ti, pero si te sigues manteniendo en silencio, simplemente les dejas el mando de tu vida, ¿realmente quieres seguir viviendo así?- el muchacho no dijo nada, Jackson tampoco insistió con ese tema, a veces era tan difícil tener una conversación con Mark, que comenzaba a acostumbrarse a sus silencios, sin embargo, esperaba que reflexionara su situación.

–¿Cómo vas con lo de Jinyoung?- los ojos de Mark inmediatamente volvieron a llenarse de lágrimas, Jackson suspiró, esperaba que su ruptura la superara rápidamente, pero no fue así. –Escucha, hoy nos veremos en mi casa, necesitas descargarte completamente de todo, yo estaré contigo, ¿de acuerdo?- Mark asintió ante las palabras de su amigo, mientras limpiaba las lágrimas que amenazaban con salir. –Mark hyung...- lo llamó Jackson con una sonrisa traviesa, el mayor frunció el ceño confundido. –Estás llorando de nuevo.




El mayor despertó repentinamente, como si acabara de recuperar el aliento, sentía gotas de sudor resbalando a lo largo de su cuello provocándole leves cosquillas, su cuerpo estaba rígido, ya que había pasado bastante tiempo en una misma posición, al menos la húmeda y fresca sensación en su frente lo hacía sentir mejor, trataba de ubicarse, y no tardó bastante en hacerlo cuando su temperatura comenzó a regularse, pues el frío del ambiente chocando contra su piel, ocasionó al instante un escalofrío en su cuerpo.

–Despertaste.- escuchó un murmullo a lado de él, miró rápidamente encontrándose con Jackson sentado cómodamente, la camisa que llevaba era delgada, pero no pudo evitar fruncir el ceño al notar la chaqueta que cubría sus hombros...

–¿De dónde sacaste esa chaqueta?- Mark la había reconocido al instante, era la favorita de JB, ¿qué demonios había pasado mientras estuvo inconsciente?

–¿Te sientes mejor?- contraatacó Jackson con otra pregunta, Mark decidió dejarlo pasar por ahora, no era un idiota, esa mañana había visto a Jaebeom y a Jackson saliendo juntos de la habitación. –¿Hyung?- Mark se mantuvo en silencio, no sabía qué responder con exactitud, se sentía como si hubiera viajado por el tiempo. Comenzó a sentarse poco a poco, provocando que la toalla húmeda que reposaba en su frente cayera sobre sus piernas, fue consciente entonces de las cobijas que estaban bajo él.

–Jack, ¿en dónde estamos?- miró a los edificios frente a ellos, se encontraban en una azotea, pero no reconocía la mayoría de los edificios ahí.

–No te preocupes, solo subimos a la azotea del hotel, todo se ve diferente desde aquí, ¿no lo crees?- Mark no dijo nada, perdiéndose un poco en las luces que alumbraban las ventanas de los otros edificios, se sentía algo mareado aún y comenzaba a tener sed.

Ninguno de los dos pronunció alguna palabra, Jackson porque ya estaba acostumbrado a los silencios del mayor, además estaba algo enfadado con él, y Mark, simplemente sentía que su cabeza explotaría con el mínimo ruido que escuchara.

Pero necesitaban expresar lo que sentían, Mark estaba tan confundido, creía que tener a Jackson a su lado le daría la motivación que necesitaba, estaba a punto de casarse y quería el apoyo de sus amigos, ¿entonces por qué no se sentía bien?

–Lo siento.- murmuró Mark con voz ronca, Jackson lo notó, sin embargo, no lo miró, quizá eso desmotivó un poco al mayor para seguir hablando, pero ¿siquiera tenía verdaderas razones de disculparse?, no lo entendía.

don't run away; markson/jackbeomWhere stories live. Discover now