¡Un demente ha entrado a la casa!

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¡Un demente ha entrado a la casa!

El exagerado ruido del timbre sonando varias veces resonaba demasiado dentro del departamento, como si la persona al otro lado estuviera sumamente desesperada por ser atendida, pero nadie le abría la puerta. Lamentablemente, el hecho de que nadie contestara había puesto a JungKook aún más ansioso.

Si dependiera de él, tiraría la puerta en ese instante, pero esta era tan especial que difícilmente lo lograría. JungKook no tenía más opción que pedir ayuda al vigilante para que lo ayudara a entrar a ese departamento sospechosamente extraño. No obstante, cuando estuvo a punto de rendirse, sorprendentemente la puerta se abrió, revelando a un chico al otro lado cuyo rostro era desconocido para JungKook.

JungKook no lo pensó mucho, hizo a un lado a este chico y entró tumultuosamente.

—¡Oye, qué te pasa! ¡No puedes entrar de esa manera!—gritó el que había abierto la puerta.

—Dónde está Jimin—exclamó JungKook.

—¿Qué?

—¡Jimin!—gritó JungKook, yendo a buscar a Jimin por todo el departamento.

—¡¿Estás loco?! ¡A dónde crees que vas!

Jungkook hizo oídos sordos a los gritos del chico. Solo podía pensar en Jimin y en la situación en la que probablemente se encontraba. Cuando Suran lo había llamado, nunca pensó que le diría que Jimin se encontraba en una fiesta, consumiendo alcohol en el departamento de un amigo, tan mal que necesitaba que fueran a recogerlo. Al principio no le creyó, pero al final montó en su moto y condujo hacia la dirección donde supuestamente Jimin se encontraba.

Llegó a la azotea. Fue fácil deducir que este era el lugar donde se había celebrado la fiesta, ya que todo el entorno seguía intacto, las luces, la mesa llena de comida y las botellas vacías de alcohol. Pero no había nadie, excepto otro chico desconocido que estaba recogiendo el desorden de la celebración.

—¿Oh, quién eres tú? —murmuró el chico al verlo.

—¡Yunmin, un demente entró al departamento! —gritó Luhan detrás, apareciendo detrás de JungKook.

Yunmin examinó a Jungkook. Su rostro le resultaba familiar. Lo señaló con el dedo. —Oh, yo te conozco, saliste en la televisión, tú eres el nadador. ¡Ah, JungKook!

JungKook nunca había visto a estos dos chicos, y en ese momento no le interesaba quienes eran. —¿Dónde está Jimin?

—Ah, ¿el chico bonito? —Yunmin sonrió. —Ya se fue.

—¿Qué? ¿Con quien?

—Con Suga, un chico muy guapo, piel clara, ojos hermosos, no sé si lo conoces. 

Por poco se le sale el corazón a Jungkook cuando escuchó el nombre de Suga. —¿Qué dijiste?

En ese instante, sonó el celular del más angustiado. JungKook contestó y resultó ser la abuela de Jimin. Le dijo: "Hijo, Jimin acaba de llegar a casa. Un amigo lo trajo. Todo está bien". Y apenas terminó la llamada, JungKook salió del departamento como alma que lleva el diablo y se dirigió a la casa de Jimin, dejando a Luhan y Yunmin muy desconcertados.

Era la segunda vez que Luhan y Yunmin se quedaban mirando la puerta por un largo tiempo con los ojos sin parpadear, ya que la primera vez que lo hicieron, fue cuando vieron a Jimin y Suga juntos en la azotea. Después de volver al departamento al olvidarse de algo, fueron sorprendidos por una escena conmovedora de ellos dos, y es que de repente vieron como Suga se inclinó a darle un beso a tierno a Jimin, y luego, como Jimin desde esa vez no se cansó de picotear tantas veces los labios de Suga  con torpeza. Ellos se habían quedado perplejos viendo este acto.

El Mismo Cielo (Yoonmin)Where stories live. Discover now