Por la noche

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Es de noche Waller y su hijo emprenden paso para irse a casa, Carl tiene cara triste en el paso porque no pudo jugar mucho un poco con Niní gracias al pleito que se formó en medio parque. Desde que Maiban vio a Nicolle irse, que Waller le hizo un asentimiento, de que las cosas ya estaban solucionada al menos por el momento, este dio media vuelta con Niní en sus brazos y se fue. 

Él no ha podido dejar de pensar en que le hubiera gustado que las cosas no salieran de aquel modo, sentía que por  fin todo mejoraba Matt ya ha sido enterrado cerca de la tumba del papá de Waller porque Nicolle no tenía tumbas de familiar, no fueron muchas personas a su entierro solo algunos hombres del taller en especial la familia de Neizan que son muy apegados a Maiban, estuvo Waller junto a Maiban y Sterling Langley, es el chico que se encarga personalmente de las ganancias de Maiban, tanto del taller como del dealers y las finanzas personal de Maiban: el único que sabe cuánto dinero tiene él a lo justo.  Es un chico muy hábil con los números que Maiban cuida desde que el chico era más pequeño. 

Justo cuando Waller este enfrente de su auto le entra una llamada. Él contesta:

—"Hola" .

—"Wa-Wally" —habla después de unos minutos Sam. Tiene la voz apagada de fondo se logra escuchar una música alta de barrio.

—"¿Estás bien?" 

Waller se preocupa, siente que algo no anda bien. Ella después de un tiempo lo apodo Wally, ambos se han familiarizado más, incluso Nicky se a encariñado con ella por el tiempo que ellos han pasado juntos. Sally también a convivido con él, la mamá de ella lo a aceptado, han conversado a veces con un taza de café.

—"A-Ayúdame, por favor" —dice con dificultad, se encuentra llorando. Ahora se escucha cómo le pegan a la puerta.

—"¿Dónde estás? ¿Qué sucede Samantha?"

—"Estoy en casa. El Judas a invitado a sus amigos a la casa..." —chilla, le han pegado a la puerta con mucha fuerza. Pero la puerta aún no cede.

—"¿Él es  el que le está pegando ahora a la puerta?"

—"No. Es uno de sus amigos".

—"¿Te ha hecho daño?"

—"No" —dice llorando.— "No aún".

—"Voy para allá, estoy en el parque. ¿Tienes cómo salir para cuando llegue?"

—"Sí, puedo salir por la ventana. Pero tú tienes que acercarte por detrás de la casa".

—"Esta bien, esta bien. Ahora voy para allá. Pero, Samantha, cuídate".

—"No tardes. Tengo miedo".

Waller corta la llamada y se monta rápido en su automóvil.

—Hijo, abrochate el cinturon. Ahora iremos a recoger a Samantha a su casa.

—¿Por qué papá?

—Ella necesita que la ayudemos con algo, no se siente bien.

[...]

Waller le da la vuelta al parque y estaciona su camioneta en la acera de una casa antes de la de Samantha, y le pide a su hijo que lo espere del auto, camina hasta la parte trasera de la casa y le manda un mensaje a Samantha notificándole que ya estaba allí. Él escala la valla del jardín trasero que es de diferente tamaño la madera intentando de aplastar las plantas que allí hay en macetas. Cuando lo logra ve una ventana abrirse y a Samantha sacar su cabeza, al verle sonríe él le hace una seña con un dedo de que haga silencio, ella corresponde con un asentimiento de cabeza para meterse de nuevo dentro. 

Un CriminalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora