41. Boxeo.

456 19 4
                                    

Veo como Amanda se levanta decidida, sin apartar la vista de mí, pero antes de que pueda acercarse, salgo corriendo.

¿Qué cojones acabo de ver?

Si antes estaba confundida, ahora lo estoy mucho más. ¿De qué conocía Amanda al hermano de Jaden?

Las palabras de Isabella vuelven a mi cabeza mientras corro. Jaden está enamorado de Amanda. ¿Y si se la presentó a Thomas? ¿Y si Amanda formó parte de la vida de Jaden? ¿Y si el anillo que tiene en el dedo es un regalo de Jaden? ¿Hace cuánto murió Thomas? ¿Qué cojones está pasando?

Necesito respuestas, las necesito lo antes posible.

Debería llamar a Jaden, preguntarle pero el pensamiento de que realmente haya estado jugando conmigo me lo impide. Que Oliver pudiera estar al tanto de todo esto hace que tampoco pueda preguntarle a él.

La única opción que me queda es Isabella.

Así que cuando llega el día siguiente, no me ando con rodeos, ni con falsas sonrisas, la acribillo a preguntas.

—¿Has hablado con Oliver? —Pregunto.

Isabella me mira con una mueca de desagrado. Esto es increíble, encima esta enfada como si yo le hubiera hecho algo.

—¿Sobre qué?

—Sobre Amanda. Necesito que me cuentes todo lo que sepas de ella.

La rubia se tensa y suspira, se reclina sobre su silla y niega con la cabeza.

—No sé nada, además ¿para qué? ¿para que no me creas? —Su tono de voz me molesta pero decido pasarlo por alto, necesito toda la información posible.

—Isabella, esto va mucho más allá del orgullo. Necesito saber todo lo que pueda de esa mujer y de su relación con Jaden.

—¿Por qué no lo dejas estar? ¿Tan obsesionada estás con él? —Niego con la cabeza. No puedo contarle nada más, esto no se trata de obsesión, si no de saber la verdad sobre esa mujer. De saber si realmente Jaden está enamorado de ella o es una mentira de Isabella.

—No puedo dejarlo estar. —Concluyo.

Isabella suspira y comienza a mirar el boli que tiene entre las manos como si eso fuera lo más importante ahora mismo.

—Sólo sé que Jaden y ella estuvieron juntos un tiempo, que lo dejaron y que él sigue enamorado de ella. Nada más.

—Eso no es nada nuevo. —Insisto. Pero Isabella rueda los ojos y vuelve a suspirar.

—Es lo que sé. —Y sin decir nada más, vuelve a su trabajo.

Se tira durante todo el día ignorándome y cada vez estamos más lejos la una de la otra. Ella porque no la creo y yo porque no pienso que esté siendo sincera.

Sigo sin saber nada de Jaden, no he tenido reacción por su parte al me gusta que se me escapó y al menos lo agradezco.

No sé donde hallar las respuestas a mis preguntas. No puedo fiarme de Jaden, ni de Oliver y ahora tampoco de Isabella.

Así que decido rendirme, la verdad llegará sola, en algún momento me enteraré. Tal vez si veo a Jaden lo atosigue a preguntas y aunque esté jugando conmigo, sabré la verdad y me preparé para dejarlo ir de una maldita vez.

Pero esto es una jodida agonía, no saber nada, la incertidumbre, el dolor constante en el pecho, el enfado y la decepción bajo mi piel. No lo soporto.

Así que cuando llego a casa, como rápido y sin darme tiempo a pensar, me preparo para asistir a mi primera clase de boxeo.

—¿Dónde vas tan deportista? —Me pregunta Desi antes de salir de casa.

El deseo de odiarte por siempre.Where stories live. Discover now