Obligada. (Draco Malfoy) [Libro#1] °En Edición°.

46.Yo no te quiero.

¿Stone o Malfoy?

Y ustedes...¿Se quieren o se van a querer?...

Ella salió prácticamente huyendo de ahi, su necedad y su cerebro le gritaban que tenía que irse, pero su corazón, ese maldito traidor le pedía el quedarse.

Prácticamente fue arrastrada por el en el pasillo.

Draco había tomado su mano fuertemente sin permiso, aquella fuerza que había desaparecido en el tren había vuelto y con ella un mágico deseo de tomarla de la mano para no soltarla nunca.

Al fin llegaron a un lugar "Privado" aunque no era así, era un pasillo, otro, y estaba vacío porque habían comenzado otra clase, Draco la soltó esperando a que ella saliera corriendo de ahí para escapar, se quedo quieto, no quería otro hechizo silenciador.

Pero no, ella no corrió, ella se quedo quieta esperando a ver que pasaba, lo miro, el tenía una mirada neutra, de nuevo nada pasaba por aquellos ojos grises que eran un misterio, suspiro regresando aquel nudo que subía por su garganta a donde sea que pertenecia, aunque no pudo evitar ver de nuevo aquellos ojos, aquella mirada haciendo al nudo volver a su lugar favorito, su garganta.

Al ver que ella no hacia nada por huir Draco se acercó, acaricio su mejilla como cuando le limpiaba las lagrimas, pero ella se alejó, porque después de todo; no tenía lágrimas, ni quería que el la tocara. El no bajo la mano, cerró los ojos apretando la mandíbula "¿Que eh hecho?" Se preguntaba seguido el mismo, los abrió de nuevo, ella seguía mirándolo, aunque quisiera, no podía esconder en esos ojos marrones la tristeza, Draco sabía que lo quería, Draco sabía lo que había perdido aquella noche, es por eso que se molestó tanto consigo mismo que golpeó y rompió todo lo que había a su alcance, lo hizo hasta que Crabbe llegó y le hizo calmarse, el no era un buen amigo, pero sabía cuando apoyar, porque se conocían. Pero volviendo al tema.

Ella no hizo ningún gesto, aunque con aquellos ojos propició una mirada que hablaba más que su boca el supo lo que se preguntaba.

"¿Que es lo que quieres?"

Decidió hablar por fin.

-______- rasco su nuca nervioso.

Ella asintió invitandolo a seguir, el nudo se apretaba impidiendole hablar, sus manos jugaban inconscientemente entre ellas mientras colgaban, sus pies ni hablar, estaba tan nerviosa que no podía moverse, esa era la razón por la cual no había salido corriendo de ahí.

"Corazón traicionero".
"Cerebro estupido".

Ninguno le funcionaba en ese momento.

La razón se había ido.

-Tengo que... hablar contigo.- paso sus manos por la cara tratando de quitar el nerviosimo, no podía hablar, porque no se puede hablar cuando no se sabe que decir.

Ella seguía sosteniendo aquella mirada prácticamente fingida, aunque en sus facciones se notaba muy bien lo que trataba de ocultar.

-¿S...Si?.

Draco se fue acercando a ella, cada paso que daba el era un paso retrocedido por _______, pero en todo hay límites, incluso en ese pasillo, ella llegó a topar con la pared, maldijo internamente.

-No te voy a besar si no quieres.

Pero claro que quería, quería tocar y sentir suyos aquellos labios que había olvidado o que había tratado de olvidar, pero en cuanto acercó la cara a él, dándole permiso para tomar sus labios, la razón pareció volver a ella.

"Ya la tengo, cayó a mis manos"

La voz de Draco retumbo por todo su ser, trayendo con ella una ola de coraje indomable.

Con todas las fuerzas que junto en ese momento lo lanzó lejos de un empujón.

Draco se quedo como esperaba que se quedará, callado y quieto.

-Alejate de mi...

La mirada de el cambio por completo, tal vez ya se lo esperaba, pero no sabía como reaccionaria ante aquellas palabras.

-No.- le dijo, de nuevo se acercó a ella- No quiero no debo.

_______ río irónicamente, claro que no quería, puesto que era su misión tenerla.

-No me interesa que tipo de misión tengas- trató de empujarlo, pero el ya la había acorralado en la pared, de nuevo.

-A mi tampoco.

De un momento a otro le tomó la cara apretando sus mejillas, las apretó tanto que ella sentía como la sangre acumulada le hacía arder, y la beso, la beso como si nunca la fuera a besar otra vez, y eso era probable.

Aunque ella no respondió, se quedo quieta, dejando que su cerebro procesará, su corazón se agitó como si hubiera corrido mil veces la misma vuelta, pero por más que sintiera que tenía que corresponder o que aquel deseo le ordenara el volverlo a besar una vez que el se separó de ella recargando su frente contra la suya, la razón volvía a aparecer gobernando por completo. La locura y el enojo la llevaron a hacer algo que jamás imagino.

El se alejó sobando su mejilla, estaba roja y parecía dolerle, se le había marcado la mano.

-¿Que te sucede?- le pregunto molesto.

¿Pero porque se molestaba?, después de todo el lo había causado.

Ella no contestó, las lágrimas comenzaban a salir sin permiso, se había derrumbado de nuevo y frente a él.

Draco se acercó, olvidando lo que había pasado y preparándose para recibir otra con la misma fuerza, le tomó la cara entre sus manos y con el dedo pulgar le limpió una lágrima.

En cualquier otra circunstancia ella habría sonreído, puesto que en la mejilla de Draco yacía su mano marcada, pero después de todo había sido ella la que la había marcado. Pensó en pedir perdón, pero el no merecía nada.

Alejó abruptamente las manos que sostenían su cara, y con todo el enojo acumulado le dijo.

-Yo no te quiro.- escupió, aveces el coraje hacia a las personas decir cosas que jamás imaginaban que dirían, mentiras, y esta era una de las tantas que ella había dicho en su vida.

Lo peor era que Draco no lo sabía.

El no lo entendió, no lo entendió y su cerebro tardaba cada vez más en asimilarlo, asintió, se alejó de ella dejándole el camino libre para escapar.

Ella sin decir nada más se fue, era tarde para ir a la clase que le tocaba, y también era tarde para remediar lo que había hecho, probablemente el no le volvería a hablar nunca más, y estaba bien.

Después de todo, Draco Malfoy había estado jugado con ella.