42 > Love letters

1.7K 111 3
                                    


Cuando Lissa despertó, Justin ya estaba instalándose en su habitación en el gran centro de rehabilitación Journey, Malibú. La cama era más parecida a la de un hospital que otra cosa, y el muchacho inmediatamente pensó en pedir un cambio de sábanas. Aquello le deprimía.

Después del almuerzo y la presentación de cada uno —al ser un centro lujoso, no había tanta gente como en los comunes—, repasaron las actividades que harían durante sus treinta días allí dentro. Aunque había gente que estaba hace meses, e incluso, unas dos personas hace un año. Una enfermera bastante carismática comenzó a anotar en el pizarrón, mientras explicaba, las etapas de recuperación que tendrían.

1.- Lograr predominio de la necesidad de control por sobre la necesidad del uso.
2.- Recuperarse de los efectos dañinos producidos por el abuso de sustancias.
3.- Cambios internos, de pensamiento, sentimientos y actitud con respecto al uso.
4.- Modificación del estilo de vida, incorporación paulatina de hábitos sanos.
5.- Mantener una vida sana y un crecimiento personal continuo.

Se veía tan fácil cuando ella lo decía. Justin ya empezaba a sentir un revoltijo en el estómago.

El primer día pasó rápido para él, pensó en Lissa un par de veces pero se entretuvo bastante conociendo gente allí dentro y realizando las actividades. Por momentos, se sentía como un patético niño de jardín de infantes, pero terminaba por prenderse a cada cosa.

Mientras tanto, a casi sesenta kilómetros de él, Wesley intentaba no pensar en el ni un segundo más. Se habían prometido no escribirse el primer día, descansar, tranquilizarse y luego empezar con las cartas, pero ella sentía la necesidad de hablarle en ese mismo instante y saber cómo estaba.

Aún así, Nina tenía tanto trabajo para ella que se distrajo fácilmente de aquellos pensamientos. Al llegar la noche estuvo tan cansada que ni siquiera llegó a quitarse el maquillaje; tocó la almohada y se desplomó sobre ella, cayendo en un profundo sueño.

 •     •     •

LISSA WESLEY

Día 2. 28 de Enero del 2014.

"Justin

Tuve que invertir dólares en un cartero que funcionara a las dos de la mañana ya que es la hora a la que suelo terminar de contar las cosas que hice en mi día. Inserta una risa aquí, porque se ve raro si escribo "jajaja" y no sé dibujar emojis.

Estoy en cama en éste momento y muy cansada, así que te culpo por las horribles ojeras que tendré mañana. En fin. No he dejado de pensar en ti. Me la he pasado de aquí para allá, hice un photoshoot para Vogue y estuve, sin mentir, tres horas frente a una cámara intentando que salga bien un vídeo de treinta putos segundos. Un vídeo de agradecimiento.

¡¡¡¡¡¡¡¡ESTOY NOMINADA A UN GRAMMY!!!!!!!!

Esperé todas las malditas palabras anteriores para decirte eso. Es algo que me emociona muchísimo y, por éste año, no se celebrarán hasta marzo, lo que quiere decir que probablemente ya estés conmigo.

En fin, hoy estuve con Caitlin y Xavier todo el día. Me acompañaron a todos lados. También estuve revisando varios eventos a los que estoy invitada y... ¿te soy sincera? No tengo ganas de ir. Me estoy cansando un poco. A veces extraño estar en mi departamento, en Tampa, en mi sofá, haciendo lo que quiero sin responsabilidad alguna. Quiero volver a eso la mayoría del tiempo...

En otras noticias, tengo bloqueo del escritor. Nina ya me está apurando porque luego quiere que saquemos otro disco y, lo juro, no sale un maldito verso nuevo. Ella insiste y ya me está poniendo nerviosa.

He visitado a David también, y me ha dicho que te envía saludos y que espera que todo salga bien. Le he explicado todo y se siente mal por tí. Dice que desearía haberse despedido.

Espero que me cuentes como van las cosas allá. También quería decirte que quizás deberíamos cambiar eso de escribirnos todos los días. Hay días en los que estoy demasiado ocupada y llego demasiado cansada como para ponerme a escribir. Selecciona la opción.

-Cada tres días      -Cada cinco días    -Cada una semana (ésta opción no puedes elegirla)

Y todavía no lo has pedido, pero aquí está tu foto. Te extraño y te amo. 


                                                                                                                                 Lissa."

Tomé el papel y pegué mi foto impresa en el espacio vacío. Luego doble la carta entera por la mitad para meterla en un sobre. Mi cartero personal ya estaba en mi puerta, así que sigilosamente bajé las escaleras y abrí la puerta para entregarle la carta que iría hacia Malibú. A cambio, el me entregó el sobre que venía de allí. Le agradecí, le pagué y subí corriendo a mi habitación para leer la carta.

Abrí el sobre con una sobreexcitación increíble y empecé a leer.

"Lissa

           Mi primer día aquí ha sido una mierda. En pocas palabras. En serio pensé que moriría y no aguantaba más sin estar conectado con el mundo, pero luego nos presentamos con otras personas y no hay tanta gente mala aquí. Hay dos chicos de mi edad, que al principio me miraron mal pero luego vieron que yo no tenía intenciones de tener mala vibra con nadie y se me han acercado. Hoy hablamos un rato y compartimos varias actividades juntos. 

Nos han asignado un psicólogo a cada uno y me pareció una estupidez. Siempre pensé que un psicólogo era sólo un amigo para conversar al que le pagabas, pero ésta vez me sirvió en serio. Hoy hablé con el por dos horas seguidas y, de verdad, sentí como un peso se me salía de los hombros.  

Tenemos un gimnasio increíble y creo que pasaré el resto de mis días ahí metido para enamorarte más cuando vuelva lol. En fin, ha sido un poco aburrido pero intento mantenerme positivo. Nos han dicho que  en unos días entrarán cuatro nuevas personas y me emociona eso, porque dicen que son jóvenes. Quizás haga algunos amigos.

Quería decirte algo respecto a las cartas. Ésta te la envío sólo porque rogué al portero que me deje mandarla, pero sólo puedo enviar correos cada cinco días. Es decir, dentro de tres días se cumplirán los primero cinco y te enviaré lo que tendría que ser la primera carta. Cinco días después, la segunda y así. También puedo recibir cartas sólo esos días. 

De hecho creo que es lo mejor. Así tendremos más que contar. Y tengo el presentimiento de que me mantendré ocupado aquí, así que no te hagas problemas.

No quiero que estés ahí fuera viviendo preocupada por mí. Disfruta lo que estás viviendo, lo que te gusta y enfócate en tu trabajo.

Besos a Caitlin y a Xavier. Los extraño, y a tí tambien.

                                                                                                             Te amo.  Justin"

Dejé el papel a un lado, soltando un suspiro. Me decepcionaba un poco saber que no teníamos tanto tema de conversación como yo creía. Sin embargo, me sentía feliz de que no estuviera super depresivo allí dentro.

El reloj marcó las tres de la mañana y decidí que sería mejor acostarme a dormir o al día siguiente lo lamentaría. Me desvestí, me puse mi pijama y me metí en cama, tomando la carta en mi mano. Acaricié el papel entre mis dedos y me quedé dormida pensando en sus palabras.

Welcome To My Industry » j.bWhere stories live. Discover now