Capitulo 4

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Andrea miro a Samuel con odio pero comprendió que ese no era el momento de pelear, ahora lo que le preocupaba era su hijo nada más y los problemas que habían entra Samuel y ella serian después. pero si le dolió que Samuel le dijera así, que la llamara asesina, se dio cuenta que a pesar del tiempo el le seguía guardando el mismo rencor, y las ideas de que ella era la asesina no habían cambiado.

Ella cuando él llego hubiera querido lanzarse a sus brazos, que Samuel la consolara abrazándola fuerte, como tantas veces lo hizo, quería que le dijera que todo iba salir bien. pero no fue así, al contrario, sus ojos se llenaron de ira, y coraje al verla, y ella todavía como una tonta sintiendo que su corazón se le iba salir cuando lo vio, se odiaba, se repugnaba a ella misma, por la forma tan intensa en la que todavía lo quería.

Andrea: No es momento de pelear Samuel, ahora lo importante es nuestro hijo.

Sofia: Yo pienso lo mismo, no me parece que esta sea una buena cituasion para que insultes a mi hermana.-dijo enojada.

Samuel: Tu no tienes nada que hacer aquí.-dijo agarrando el brazo de Andrea con fuerza.

Andrea: Quitame las manos de encima!.-dijo gritando y con lagrimas en los ojos.

Claudia: Samuel, Samuel este no es momento para pelear, ahora ese niño necesita de los dos, de sus padres.

Samuel: Tu fuiste la que la sacaste verdad?.-dijo enojado mirando a Claudia.-Por que?! Ella no tiene derecho es una.

Andrea: basta!.-dijo dándole una bofetada.-No te voy a permitir que me sigas faltando al respeto!

Samuel: Yo solo digo la verdad, si le ofende señora Andrea, discúlpeme.-dijo y se calmo un poco.

En toda la noche, nadie se había molestado en atenderlos, Samuel no dejaba de mirar a Andrea quien se la pasaba con su familia, llorando y preocupada por su hijo, quería ir a consolarla, pero su orgullo no se lo permitía, ella estaba realmente mal, a parte de que pensó que seguramente seria muy incomodo estar asi, con una celadora mirándote y persiguiéndote las 24 horas del día, eso no era agradable.

Doctor: Ya esta mejor.-dijo acercándose a Cayetana.-Le ha bajado la fiebre y se encuentra mas estable.

Samuel: Podemos pasar a verlo?

Doctor: Solo dos personas, mañana ya serán mas por ahora no es bueno tantas visitas.

Irina: Gracias doctor.-dijo mientras abrazaba a Andrea.

Doctor: De nada.

Andrea: Gracias dios mio.-dijo mirado al cielo.-Muchas gracias. Puedo pasar a verlo?

Doctor: Si esta bien, solo unos minutos.-dijo y se fue.

Samuel: Que bueno que este mejor, yo también quiero pasar a verlo.

Samuel: Podemos  pasar juntos, es mejor para que el bebé no tenga tantas visitas que le puedan afectar.

Samuel: Claudia...-dijo mirándola serio.-Me parece que no es buena idea.

Andrea: Muy bien, como sea.-dijo mirándolo.

Los dos se prepararon para entrar al cuarto en donde tenían al niño, y la enfermera les dio indicaciones, Andrea se acerco y sintió sus emociones a flor de piel, quería nunca despegarse de él, de su hijo, a quien amaba tanto, como nunca había amado a una persona, por su hijo era capaz de lo que sea.

Andrea: Por que la vida es tan injusta?.-dijo mientras lo cargaba y me besaba su frente.-No me quiero despegar de ti mi amor, perdóname, se que te estoy haciendo mucha falta, que seguramente me necesitas, y yo no estoy, pero te juro que pronto voy a salir, hare lo posible.

Samuel miraba atentamente a Andrea, sus palabras hacían que se le encogiera el corazón, se imaginaba la tristeza que sentía ella, la impotencia que sentía en esos momentos, al no poderse quedar más tiempo con ella.

Celadora: Ya nos tenemos que ir, asi que apurate.-dijo seria.

Andrea: Tiene que ser ahora, no he pasado mucho tiempo con él, solo unos minutos más por favor.-dijo suplicante.

Celadora: Crees que soy tu chofer o nana para esperarte? Cinco minutos ni uno más o vengo por ti.-dijo y salió.

Andrea con rabia e impotencia dejo al niño en el cunero donde se encontraba y al enderezarse le comenzó a doler las costillas, lo cual Samuel noto ya que ella dejo escapar un gemido de dolor, y se apoyo en la cama.

Samuel: Estas bien?-dijo tomándola de la cintura, y le alzo la blusa que traía, dejando ver lo morado e hinchado que estaba la parte inferior de las costillas.-Pero..que diablos te paso?

Andrea: nada que te importe, no creo que te interese mucho la vida de una asesina o si?-dijo tratando de aparterse de él pero Samuel no se lo permitio.

Samuel: Tu sabes que me preocupas.-dijo mirándola y después a sus labios.-Aunque hayas echo lo que hiciste me preocupas.

Andrea: Yo no..déjame.-dijo resignada.-no me vuelvas a tocar ok?

Samuel: Ok.-dijo mirando como ella se iba.

Miro a su hijo, tenia la misma mirada de Andrea, dulce, cariñosa, y que era capaz de hacer reir hasta el más amargado, era un niño encantador, una belleza, también tenia cosas de él, se estuvo cargándolo un buen tiempo sin dejar de pensar en Andrea y después salió dándole un beso en la frente.

Claudia: perdón pero me parecio que ella tenia derecho es su mamá.-dijo tosiendo.

Samuel: Estas tosiendo mucho.-dijo preocupado.

Claudia: Estoy bien.-dijo respirando.-Solo dime que pensaste?

Samuel: Si te refieres a lo de Andrea estoy en la misma posición, pienso lo mismo de ella. En cuanto a mi hijo...

Claudia: Que?

Samuel: Pienso que no esta bien con Andrea. Su madre lo ha de ver descuidado y por eso se enfermo.-dijo mientras ella tocia.

Claudia: Y que opinas?

Samuel: Que tienes razón, es mi hijo, y pienso que estaría mejor a mi lado, tengo derecho, asi que mañana mismo voy a iniciar los tramites para la patria potestad.

Claudia: Pero yo no me refería a eso cuando te dije que es tu hijo, Samuel me parece que estas exagerando.

Samuel: No, lo estoy alejando de una familia indigna, y estando Andrea en la cárcel será muy fácil quedarme con él...

Claudia: A ella le dolerá mucho.

Samuel: No me importa, soy su padre y tengo derechos, es mejor que el niño este conmigo y no con una asesina...

La Cima Del CieloWhere stories live. Discover now