Pequeñas historias (Saint seiya)

Marginado parte 2(Saga x Mu)

Ser odiado, alejado de cualquier acto de amor, era la sensación más horrible que podía pasar una persona, sin embargo hay quienes sufren esto. Y aunque parezca imposible en el momento, aunque parezca que todo el mundo te desprecia, siempre hay una excepción.

Saga se levantó con una dulce respiración sobre su piel. El pequeño todavía dormía entre sus brazos, con tranquilidad. El caballero de Géminis aún no creía aquella situación. El Ariano había venido como una luz a iluminarlo, a dejarlo salir de aquella oscuridad a la cual se había hundido hace tanto tiempo.

Se levantó con suavidad de la cama para así no levantar al otro que seguramente aún estaría agotado. Se vistió y salió tranquilamente a las gradas de su templo. Su mirada estaba perdida entre las columnas del templo contiguo. Su mente se llenaba cada vez más de pensamientos de inseguridad.

"Me pregunto si se arrepentira de esto... tal vez no lo pensó lo suficiente...quizá tan sólo..."

Estas ideas lentamente lo consumían. Su mirada se perdía entre los escalones que guiaban a la siguiente casa. De repente sorprendiendolo por completo unos brazos lo rodearon con ternura. Sin darse cuenta una sonrisa se dibujó en sus labios.

- Buenos días...-dijo un poco nervioso Saga, sin saber como comportarse ante tal situación.

El pequeño pelilila se lanzó a los brazos del otro y le dio un pequeño beso.

- Buen día-

El corazón de Saga latía como hace años no lo hacía, esas nuevas sensaciones que le hacía vivir ese pequeño era la cosa más gratificante que podía tener.

La tarde pasó con calma, ambos chicos caminaron a través del pueblo más cercano al santuario. La noche cayó sobre ambos, las estrellas se hacían presentes con su resplandor. 

En un momento Saga estaba por entrelazar sus dedos con los de Mu, cuando de repente una risa se escuchó de lejos.

- Mu más te vale alejarte antes de que se te pegue la locura- las palabras de máscara de la muerte lograron molestar de gran manera al caballero de Géminis sin embargo su mirada sólo estaba sobre el pelilila que no se movía. Sus esperanzas poco a poco se volvían a derrumbar en su interior. Sentía como si se volviera a hundir en las tinieblas.

-¡Cállate!-

Mu se movió hacia el canceriano. Si no hubiera sido porque Afrodita se puso en medio de ambos, Máscara de la Muerte hubiera recibido un fuerte golpe.

-¡Detenganse!- el peliceleste tomó al otro del brazo y lo comenzó a mover de aquel lugar.

Sin embargo a pesar de que lo que había pasado no pareciera gran cosa, esto a Saga le había destrozado esas pequeñas esperanzas que tenía. Comenzó a caminar rápidamente, el pequeño no entendía que era lo que sucedía, sin embargo lo comenzó a seguir mientras lo llamaba aunque el otro no respondía ni bajaba la velocidad.
-¡Saga!-

Las palabras que había proferido se perdían en lo profundo de la noche.

Cuando por fin logró alcanzarlo se encontraban en las escalinatas de Géminis. Mu se quedó perplejo ante lo que se encontró, de los ojos de aquel caballero al cual creían traidor se escapaban lágrimas.

Su mirada se perdía en la nada, lo único que pudo hacer fue abrazarlo, lo mantuvo contra su cuerpo intentando arrancar esa angustia que invadía su pecho.

Se puso a la altura del oído de Saga y le susurró con mucha dulzura- Te amo Saga-

El otro lo abrazó con más fuerza.

Se unieron en un beso dulce. Las manos del peliazul se deslizaron a través de los brazos del otro hasta  levantarlo. Mu envolvió sus piernas en el torso de Saga.

Las caricias, los besos, cada roce en si demostraba el afecto que se demostraban. Sin embargo su amor no se limitaba a eso, su amor iba más allá de lo carnal, iba más allá de lo que los demás pensaban. Ellos dos se amaban de una manera en la cual sólo se necesitaban de ellos mismos para sobrevivir.

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Pedido de kagomesayri, esta es la primera continuación que le hago a una a de las historias espero que les gustara. Espero comenten que les pareció n.n
Gracias por leer.

Lanico Bane