Frágil (Manigoldo X Albafica)

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MANIGOLDO

Subía por las escalinatas cuando lo vi, sus ojos se perdían en los pétalos de la rosa que sostenía entre sus dedos. Su mirada no se inmutó ni un segundo a pesar de que me sentara junto a él.

- ¿Qué quieres?- Su voz era fría, cortante. Siempre era así con todos, siempre tratando de alejarse.

-¿Acaso ahora no puedo sentarme?- Hice una mueca de reproche con el fin de lograr hacer que aunque sea me mirara un segundo. Pero el seguía con su mirada en las rosas, normalmente me hubiera echado con algún comentario sarcástico, pero en ese momento sólo reinaba un silencio melancólico, estaba pasando algo malo, definitivamente.

Me acerqué más a él y roce su mejilla con mis dedos, para mi sorpresa el no se movió, con la yema de mi dedo pulgar comencé a acariciar su suave piel, parecía porcelana, era pálida y fría.

Pero su mirada seguía sin centrarse en mi, todavía observaba aquella rosa roja como la sangre.

Lo quería tomar en mis manos, traerlo a mi mundo, sacarlo de aquella soledad que lo invadía constantemente. Pero por más que constantemente quisiera hacerlo, el siempre se encerraba en aquella prisión de rosas, aquel lugar impenetrable a donde no me dejaba llegar.

Tomé su rostro y lentamente lo hice mirarme, sus ojos parecían vacíos, llenos de tristeza, aquel celeste que normalmente era tan brillante ahora estaba opaco.

-Déjame, te lastimare...- Su voz sonaba llorosa, pero de sus ojos no escapaban lágrimas, devuelta se hacía el fuerte cuando en realidad era tan frágil. Me acerqué más a él hasta sostenerlo en mis brazos.

- Entonces lastimame...-Su cuerpo comenzó a temblar bajo mis brazos, podía sentir las lágrimas sobre mi piel.

"Tan frágil"

Sus brazos me rodearon con timidez, sin confianza, parecía lleno de miedos que yo no conocía. Miedos que derrumbaria para poder llegar a aquel jardín de rosas con altas rejas donde se esconde. Encontraría la llave para entrar y escapar juntos el dolor que traía la soledad.

Levantó su rostro, sus ojos estaban repletos de lágrimas, era visible el dolor que sentía. Filtre mi mano a través de su cabello, acercando su rostro al mío.

Primero fue un beso tímido, no sabría si en verdad el lo aceptaría, pero al ver que el no se apartaba lo sostuve con mayor fuerza profundizando aquel beso.

Nos separamos por la falta de oxígeno. Me levanté y lo ayudé a levantarse, su cuerpo parecía temblar, todavía había lágrimas en sus ojos.

Lo levanté con mis brazos y lo abracé con toda la fuerza que tuve. Lo acosté en su cama con sumo cuidado. Su cuerpo era muy delgado, con una cintura fina, a simple vista el caballero de Piscis parecía una mujer, con aquellos rasgos tan afilados,  ese cabello suave. Pero en el momento en el que hablaba podías ver que en realidad era un hombre con carácter, honesto y dulce, que estaba obligado a alejarse para proteger a la gente.

Sus ojos estaban hinchados por el llanto, me acerqué a él y besé con dulzura sus párpados. A pesar de que mi cuerpo en ese momento no pudiera contenerse, lo único que me limite a hacer fue rodearlo con mis brazos y mantenerlo contra mi pecho. Su piel que era tan fría como la nieve poco a poco se calentaba con el amor que le daba.

Quería compartir con el aquella soledad con la que ambos habíamos vivido toda nuestra vida, siempre sufriendo en silencio y ahora nos teníamos.

Por primera vez no me sentí ni sólo ni odiado,  y en mi corazón esperaba que el tampoco.

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Este capítulo fue un poco corto, pero va a haber una continuación con lemon 7u7

Este fue un pedido de ManiAlba-DefMita002  espero que te gustara n.n

Gracias a todos por leer y espero sus comentarios que siempre me hacen feliz :3

Respecto a los pedidos, no se preocupen que se volverán a abrir. Por ahora quiero terminar todos los que ya tengo, los pedidos que haya confirmado en los comentarios, serán publicados así que paciencia por favor n.n

Lanico Bane

Pequeñas historias (Saint seiya)Where stories live. Discover now